La Comunidad propone cerrar en 15 días un pacto sobre la zona de actividades logísticas

El proyecto va encaminado a albergar, en una primera fase, el Depósito Franco, que actualmente ocupa una parcela que adquirió la Autoridad Portuaria. Esto último garantiza la viabilidad del traslado. En ese primer sector, de 65.000 metros cuadrados, tendría cabida asimismo una Ciudad del Transporte para camiones. El siguiente sector, de 24,5 hectáreas, será la piedra de toque para calibrar la aceptación del proyecto por parte de los empresarios. El resto, tres millones de metros cuadrados, serían promovidos y vendidos durante la próxima década.

Tras meses de inacción, Sepes ofreció en octubre dos opciones: recibir de la Comunidad todo el dinero en cuatro años, a razón de nueve euros el metro cuadrado, o demorar hasta ocho años esos ingresos, pagaderos a partir de la quinta anualidad, pero con un anticipo por el 1% del valor total (300.000 euros). La Comunidad se negó a aceptar un acuerdo con estas últimas condiciones. «Es discriminatorio respecto a lo que Sepes ofrece en otras comunidades y, por razones jurídicas, no podemos pagar una reserva de suelo», explicó la secretaria general de la Consejería, Yolanda Muñoz. Ella es autora de la contrapropuesta de dar a Sepes suelo urbanizado y listo para vender. Ahora solo queda esperar a que la sociedad dependiente del Ministerio de Fomento acepte el ofrecimiento.

Valverde y Muñoz revelaron también que la aplicación de las normas urbanísticas transitorias para desbloquear el crecimiento industrial en Escombreras y la promoción residencial fuera del casco urbano depende de dos trámites. Uno es la publicación de la nueva ley regional de Aceleración Empresarial, aprobada este otoño en la Asamblea Regional. La segunda es que el Consejo Jurídico Consultivo de la Región se pronuncie «para poder tener las máximas garantías jurídicas». El consejero resaltó la importancia de que el Ayuntamiento impulse un nuevo Plan General para dar credibilidad a todo el procedimiento.