El alzhéimer afecta ya a 2.400 personas en la comarca de Cartagena y los expertos animan a prevenirlo

«El alzhéimer es una enfermedad tremendamente prevalente y cada vez lo es más, porque cada vez las personas llegan a más edad. La prevención es muy importante y el esfuerzo de las asociaciones es fundamental, porque hay momentos en que la sanidad ya no puede hacer más en cuanto a información, asesoramiento y apoyo en una enfermedad demoledora y terrible para los pacientes y las familias, que a veces acaban claudicando». El consejero de Salud, Manuel Villegas, enmarcó con esta reflexión la relevancia del convenio de colaboración suscrito ayer entre su departamento y la Asociación de Pacientes y Familiares con Alzhéimer u otras enfermedades neurodegenerativas de Cartagena (Afal). Y destacó una cifra que refleja la incidencia de la patología en la comarca: hay unos 2.400 afectados.

Con motivo de la firma del acuerdo, celebrada en el Palacio Aguirre, el consejero recordó la importancia de seguir «hábitos saludables, como una dieta adecuada, el ejercicio físico, la lectura y la actividad intelectual en general», porque «previenen de alguna manera la enfermedad o hacen que no se desarrolle». Esta patología neurodegenerativa constituye la primera causa de demencia en los países desarrollados y se caracteriza por la degeneración de las células nerviosas del cerebro y una disminución de la masa cerebral. En el paciente, se manifiesta en síntomas como confusión, problemas de memoria y pérdida del habla.

«Con el aumento de la esperanza de vida hay un creciente número de personas afectadas por enfermedades asociadas con el envejecimiento, como la demencia y, entre ellas, la más frecuente es el alzhéimer. Por desgracia, no hay un tratamiento que revierta la enfermedad, pero sí retarda su desarrollo», añadió Villegas. Y apuntó que afecta sobre todo a personas mayores de 65 años y que, por encima de los 80 años, seis de cada diez tienen demencia senil o alzhéimer. Fuentes de la Consejería detallaron que, en total, hay 4.000 personas con seguimiento médico por demencias en la comarca.

Solo el año pasado, la Unidad de Demencias de las áreas de salud de Cartagena y del Mar Menor, ubicada en el Hospital Santa María del Rosell, atendió a 192 pacientes con alzhéimer. Forman parte de los 800 pacientes nuevos con deterioro cognitivo, de los cuales 320 (un 40%) vieron confirmado el diagnóstico.

Según los datos recopilados por el Servicio Murciano de Salud (SMS), en la Región de Murcia más de 18.000 personas mayores de 65 años padecen alzhéimer.

En España, afecta a 3,5 millones de personas y constituye la primera causa de demencia en los países desarrollados, así como una de las principales causas de mortalidad entre los adultos. Y Villegas señaló que, según las investigaciones científicas disponibles, los factores genéticos también tienen una alta incidencia, si bien las personas que tienen antecedentes de parientes con este mal y que a lo largo de su vida han estudiado o no desarrollan el alzhéimer o logran demorar su aparición y la gravedad de su manifestación.

Respecto al acuerdo con Afal, un colectivo creado hace veinticinco años, el objetivo es contribuir a la mejora de la calidad de vida de los usuarios de la asociación. La entidad y el Complejo Hospitalario Universitario de Cartagena, integrado por el Rosell y por el Santa Lucía, cooperarán en el desarrollo de actividades de información, asesoramiento, acompañamiento y actividades socio-sanitarias y de promoción de la autonomía personal, de prevención y de sensibilización.

El ámbito de actuación abarca las consultas de neurología, geriatría, psiquiatría, centros de salud, hospitales de día y domicilios de los pacientes. Se trata, según explicó Villegas, «de un paso más para avanzar en el bienestar de estos pacientes y de sus familias, aportándoles no sólo recursos sanitarios sino ofreciéndoles herramientas con las que puedan plantear estrategias de futuro y realizar estudios de prevalencia e incidencia, entre otros».

También alabó la labor de los profesionales implicados en la atención a estas personas, desde neurólogos a farmacéuticos pasando por psicólogos, logopedas y terapeutas ocupacionales. Y subrayó la importancia de transmitir información veraz, para que los afectados «no acepten alegremente rumores ni falsas promesas» de curación. «Desgraciadamente, no podemos dar una terapia que sea esperanzadora para todo el mundo», insistió.

El presidente de Afal Cartagena, Raúl Nieto, recordó a los periodistas que durante el último cuarto de siglo esta organización no gubernamental ha hecho «un trabajo muy duro, de pasito a pasito». «Estamos en el buen camino para poder dar respuesta a esta sociedad. Por desgracia, el envejecimiento está aquí y tenemos que dar respuesta a ello», manifestó.

Nieto informó, asimismo, de que ya la asociación tiene a veintidós personas trabajando para atender la demanda de sus usuarios y agradeció el respaldo «transversal» de la administración regional, a través de las áreas de Salud y de Familia.

Uno de los problemas que afronta la asociación es la falta de espacio en sus instalaciones, ubicadas en el número 29 de la Alameda de San Antón. Para paliar este inconveniente y aliviar la lista de espera para acceder a sus servicios, de lo que se benefician ya 250 personas, el Ayuntamiento y la Consejería mantienen conversaciones con la Tesorería General de la Seguridad Social de cara a que ésta permita a Afal el uso del antiguo centro de salud de San Antón.

La vicealcaldesa y concejal de Bienestar Social, Noelia Arroyo, mostró su confianza en que, una vez que el Servicio Murciano de Salud abandone ese consultorio y se traslade al nuevo construido en el barrio, Afal pueda ocuparlo. «Estamos trabajando para agilizar los trámites y contribuir a prestar la mejor atención» a los ciudadanos, afirmó Arroyo. La previsión autonómica es dejar el antiguo centro como máximo en abril.