El aluvión de pacientes del fin de semana llena el Santa Lucía

De ellos, unos diez aguardaban encamados en los pasillos, ya que en la zona de boxes y en la sala de sillones no quedaba ni un solo hueco disponible. Además, la Unidad de Preingreso (UPI), que tiene 30 camas, y la Unidad 25, con 28, se encontraban completas. Ambas estancias solo se abren excepcionalmente, cuando hay una alta presión asistencial.

Numerosos ancianos y otras personas con problemas respiratorios, de diabetes y con gripe, como principales patologías, acusan estos días la bajada de temperaturas y demandan los servicios sanitarios. Pero, al llegar al hospital, se encuentran con que no hay espacio suficiente para atenderles en condiciones adecuadas.

Según datos de la Gerencia del Área de Salud, la pasada semana fueron contabilizados 956 casos de gripe, frente a 908 de la semana anterior. Del total, 30 estaban ingresados, porque su cuadro médico impedía enviarles a su casa. La dirección aceleró ayer por la mañana el proceso de altas. Tanto fue así que se dieron casi un centenar, según las mismas fuentes hospitalarias. Sobre las cinco de la tarde, el número de enfermos ubicados en los pasillos era aún de una veintena. En la Consejería de Salud confían en que la epidemia de gripe comience a remitir en los próximos días.

A pesar de las contrataciones de personal sanitario para reforzar los servicios, los trabajadores del Santa Lucía se quejan de la alta carga de trabajo que tienen que soportar. La Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública Salvemos el Rosell también se sumó a la petición de los trabajadores y exigió que se abra de manera inmediata una o dos plantas de hospitalización, para impedir que haya camas en pasillos.