Sanidad abrirá quirófanos por las tardes y derivará casos para reducir listas de espera

En la semana en la que la consejera de Sanidad tiene que dar explicaciones en la Asamblea Regional sobre la aplicación de la ley que le obliga a equipar al completo el Rosell, e independizarlo del nuevo Santa Lucía para que sea el segundo hospital general del área de salud, Encarna Guillén aseguró ayer que su departamento continuará reforzando el centro sanitario del Paseo de Alfonso XIII «con todo aquello que sea necesario», tras aplicar en su totalidad el Plan Funcional. Además de los servicios restituidos, a finales de este mes abrirán sus puertas una Unidad de Corta Estancia y otra para Cuidados Paliativos, mientras que para el primer trimestre de 2017 está previsto implantar otra de Hospitalización Domiciliaria (UHD). Tras ello y «si fuera conveniente», dijo, «continuaremos en la línea que llevamos hasta ahora de aumentar la calidad asistencial en Cartagena con el consenso de los vecinos».

Lo hará, aseguró, contando con las propuestas que lleguen de la comisión de seguimiento del Rosell, cuya creación tendrá lugar en breve, con representación de los ayuntamientos y de los colectivos vecinales de la zona sanitaria. «Con los integrantes de este equipo haremos un análisis continuo de la situación del hospital, para seguir evolucionando. Las necesidades de la población son dinámicas y por eso no se cierra la puerta a nada», aseguró en declaraciones a 'La Verdad'.

Encarna Guillén mantiene que «el Plan Funcional, que presentamos en noviembre de 2015 y que estamos desarrollando, responde absolutamente a lo que marca la ley del parlamento murciano aprobada en marzo de este año». Así lo explicará mañana por la tarde en la Asamblea, donde comparecerá a petición de los tres grupos de la oposición: PSOE, Podemos y Ciudadanos.

En su opinión, quien analice el articulado de la Ley 3/2016, de 21 de marzo, para el funcionamiento pleno del Hospital Santa María del Rosell como hospital general, se dará cuenta de que el Plan Funcional «da respuesta por completo a las necesidades que tiene el Área de Salud II de Cartagena, con respecto a hospitalización a domicilio, a cirugía y al servicio de corta estancia, entre otras cuestiones».

Escuchar a los vecinos

Guillén insistió en que el Plan Funcional que aplica su departamento fue acordado con los vecinos y que «fueron ellos los que nos dijeron los servicios que había que poner en el Rosell». En su opinión, la Región está en un momento en el que se debe adaptar «a las nuevas necesidades asistenciales de los enfermos».

Lo que no contempla la titular de Sanidad es planificar la asistencia «de acuerdo a los parámetros de hace un siglo». Hay que hacerlo «de acuerdo a un nuevo modelo que dé respuestas a las tasas de envejecimiento, a la cronicidad y a la atención cada vez más cercana del paciente». En esto, el Rosell será puntero, avanzó la consejera.

Fue la Junta de Portavoces de la Asamblea Regional, reunida el martes de la semana pasada la que ordenó la comparecencia de la consejera para informar al Pleno de la evolución de la implementación de la ley para el funcionamiento pleno del Hospital del Rosell como hospital general.

La puesta en marcha de ese Plan Funcional, que iba a incrementar en 500 el número de operaciones en el Área de Salud, era una de las alternativas que la Consejería de Sanidad tenía para reducir las listas de espera, pero a tenor de los últimos datos publicados del Servicio Murciano de Salud (SMS), de poco ha servido. Las demoras para ser operado en los hospitales del Área de Salud II han aumentado en siete días y para ver a un especialista, en seis.

En este sentido, Guillén confesó estar preocupada por esta situación provocada por el incremento del número de pacientes que han requerido una operación de urgencia, ya que tenemos «una población cada vez más envejecida». «Nuestro objetivo prioritario de legislatura es armonizar los días de espera y disminuirlos por debajo de la media nacional», dijo. También achacó esas subidas a que en los últimos años «se han incorporado servicios y cirugías que antes no estaban». Todos esos factores, remarcó la consejera, están siendo continuamente analizado para revertir la situación a través de la «optimización de los recursos al máximo».

Encarna Guillén tampoco cerró la puerta a usar «recursos externos», refiriéndose a los hospitales concertados, así como a operar por las tardes en los quirófanos propios, para reducir al máximo las demoras de atención a los pacientes.

«La sanidad en Cartagena es una prioridad para el Gobierno regional y seguiremos trabajando para reducir al máximo las esperas tanto en lo que se refiere a las entrada a los quirófanos, como para ver a un especialista o hacerse pruebas de diagnóstico».