Carta de María Moscoso, una estudiante murciana de 18 años que sufre una grave enfermedad rara
María Moscoso
Viernes, 2 de septiembre 2022, 00:16
Hola, soy María Moscoso tengo 18 años, vivo en Murcia, desde los cuatro meses que ingresé en un hospital hasta ahora, he vivido infinitas pruebas, ingresos y operaciones debido a mi grave enfermedad.
Estuve matriculada en un colegio desde infantil hasta 6º de primaria, aunque durante mis largos y reiterados ingresos no podía asistir al centro ni tener las mismas horas lectivas que el resto de mis compañeros.
He pasado media vida en el hospital y he contado siempre con la ayuda de mis queridas profes de las aulas hospitalarias durante mis largos ingresos.
Me hubiera gustado ir al colegio como todos mis amigos, y también a las excursiones que se hacían cuando estaba bien, aunque el colegio siempre ponía problemas, por el simple hecho de tener una enfermedad grave, e incluso en el viaje de estudios mis padres tuvieron que ir al mismo hotel porque ellos no se hacían cargo de mí.
Posteriormente realicé estudios a distancia desde 1º de la ESO hasta 1º de bachiller debido a mis largas estancias hospitalarias, incluso estuve estudiando y realizando exámenes mientras permanecía en la Unidad Hospitalaria de Paliativos y Domiciliaria Pediátrica durante más de un año.
No quería repetir ningún curso y mi mayor ilusión era llegar a la universidad como el resto de mis compañeros. Ya en 2º de bachiller pude volver a un instituto de forma presencial aunque solo fueron tres meses porque el Covid (ómicron) impidió que volviera a clase desde enero.
Lo que he aprendido todos estos años es que con esfuerzo, ganas e ilusión todo es posible. No ha sido fácil mi camino debido a mi grave enfermedad sin embargo nada me ha detenido, ni me ha hecho sentirme menos que nadie.
Hoy quiero dar las gracias a todos: profesores hospitalarios, domiciliarios, voluntarios y particulares, que me apoyaron e hicieron las adaptaciones que necesitaba; a todos los que me tendieron su mano, su sonrisa y su apoyo.
He logrado este año acabar 2º de bachillerato, me gusta estudiar y tengo muchas ganas de sacar mi futuro adelante, sin todas las personas que me han prestado su tiempo y su ayuda, así como su fé en mí, creo que no hubiera llegado hasta donde estoy ahora, por eso GRACIAS.
Al final de todo este duro camino he llegado a la EBAU, y por primera vez me encuentro con un sistema de examen inadaptado a mis circunstancias, y a las del resto de mis compañeros con discapacidad, por lo que no he podido superar el examen, a pesar de las largas horas de estudio y esfuerzo de tantos meses.
Aunque la EBAU no se adaptara a mis limitaciones y haya tenido que optar por una FP, a pesar de ser mi deseo entrar en la universidad como cualquier otra persona, me siento muy feliz y agradecida de la ayuda recibida por todos.
Esta carta es mi forma de dar las gracias a todos los que me han tendido su mano en este difícil camino y sobre todo quiero ser voz y palabra de todos los chicos y chicas que sufrimos graves enfermedades crónicas y necesitamos que se tengan en cuenta estas circunstancias.
Me gustaría que a partir de ahora las personas como yo tuvieran el camino un poco más fácil.