Blanca del Rey, la cordobesa a la que Rock Hudson le quitó una flor
Bailaora y presidenta del jurado del Festival Internacional del Cante de las Minas. La artista volverá al concurso después de asegurar que la bronca del alcalde el año pasado le había afectado a su salud
Blanca del Rey (Córdoba, 1946) ha hecho borrón y cuenta nueva con una de las experiencias más desagradables de su vida. Tras el jaleo en la final del año pasado y perjurar que jamás volvería a pasar por lo mismo, la bailaora ha aceptado de nuevo volver a ser la presidenta del jurado del concurso de flamenco con más tradición en España: el Festival Internacional del Cante de las Minas de La Unión. «A Dios pongo por testigo de que no volverán a aplastarme, viviré por encima de todo y cuando haya terminado nunca volveré a saber lo que es hambre. Ni yo ni ninguno de los míos (...). ¡A Dios pongo por testigo de que jamás volveré a pasar hambre!», proclamó Scarlett O'Hara en 'Lo que el viento se llevó' volviendo a su hogar arrasado tras la guerra, una escena mítica como la vivida el 6 de agosto de 2022 cuando los miembros del jurado se quedaron «en estado de 'shock'» por las «malas formas» en las que Pedro López Milán, entonces alcalde y presidente de la Fundación Cante de las Minas, subió al lugar donde el jurado toma las deliberaciones, con 2.000 personas en la 'Catedral del Cante' esperando conocer el veredicto. Nunca se supo claramente qué fue lo que quería López Milán, pero sí que aquellos «graves hechos» (la bronca monumental) afectaron a la salud de Blanca del Rey hasta el punto de decir hasta aquí hemos llegado y no querer saber más de presidencias. Hasta la fecha. Pasó ya la tormenta. «Una mala tarde la tiene cualquiera», decía Chiquito de la Calzada. Pero esta fue la excusa que López Milán arguyó como disculpa a sus excesos.
Una nube oscura en el recuerdo. Porque la relación extraordinaria que Blanca del Rey ha mantenido con La Unión ha sido inmejorable. Esta misma semana, el nuevo alcalde, Joaquín Zapata (PP), que el año pasado fue uno de los primeros en condenar lo sucedido, confirmaba también que el cantaor Miguel Poveda celebrará los 30 años de su triunfo en el Cante de las Minas entregando la nueva 'Lámpara Minera', una presencia, que, sin duda, refuerza la apuesta del festival por generar las mejores vibraciones. Para Zapata, «el mejor concurso de flamenco del mundo se honra de contar con el mejor jurado del mundo, y por eso se han seleccionado minuciosamente los componentes de este órgano calificador que es garantía de conocimiento, eficacia y prestigio». Ahí tenemos al frente de todos ellos a Blanca del Rey, nombre artístico de Blanca Ávila Molina, quien a los 12 años ya andaba subiéndose al tablao en el Zoco de Córdoba y a los 14 debutó en el mítico Corral de la Morería de Madrid. Con su propia compañía, el Ballet Flamenco Blanca del Rey, ha realizado giras por todo el mundo. Está acostumbrada a sudar, pero también a que se aplauda su esfuerzo. Fue estrella del Ballet Nacional de España y de la Compañía de Maurice Bejart, y en su espectacular trayectoria cuenta con reconocimientos como el Premio Nacional de Flamenco y la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes. Sin duda, una de la coreógrafas y bailaoras más importantes de la historia del flamenco.
Adoración por La Unión
«Quiero a esta tierra como si hubiera nacido aquí», dice Del Rey. «He estado ahí siempre, casi desde que empezó, sentada en la silla viéndolo con mi marido, y tengo recuerdos únicos en mi vida»
«Adoro el Festival Internacional del Cante de las Minas», reconocía esta semana. «He estado ahí siempre, casi desde que empezó, sentada en la silla viéndolo con mi marido, y tengo recuerdos únicos en mi vida». El papel de presidenta no es moco de pavo. Supone «mucho trabajo y muchas horas», que la cordobesa disfruta porque lo que le importa «es apoyar el Festival y el flamenco». «Quiero a esta tierra como si hubiera nacido aquí», dice Del Rey, directora artística del Corral de la Morería, la sala mítica de Madrid donde han acudido las más increíbles celebridades a disfrutar del flamenco en vivo en la capital española, y donde el Cante de las Minas presenta su programación cada año como tradición.
En su debut en el Corral de la Morería, Blanca del Rey vivió una historia increíble. No fue una alucinación: en la barra se le antojó ver al hombre más guapo del mundo: Rock Hudson. Lo era. La mirada fija. Y en esas que Rock se le acerca y le quita una flor que llevaba en el pelo. Subió al escenario, bailó y, al bajar, su madre, que pudo recuperarla, se la devolvió. ¡Con lo que le había costado encontrar una a juego con el vestido!
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