La Audiencia encamina a juicio al exalcalde José López por lanzar una patada a Mateo

El exalcalde de Cartagena y líder de la formación Movimiento Ciudadano, José López, se encamina hacia la sala de vistas por un presunto delito leve de amenazas y maltrato de obra, como sospechoso de haber lanzado una patada a Fernando Mateo, ex director general de la Comunidad Autónoma con el Partido Popular.

El pasado enero, el Juzgado de Instrucción número 2 de Cartagena, que instruye la causa contra el ex primer edil cantonalista, ya dictó un auto poniendo fin a la investigación y declarando que, una vez practicadas las diligencias oportunas, se apreciaban indicios de la supuesta comisión de los citados delitos leves. Esa resolución dirigía de manera casi inevitable hacia el banquillo de los acusados a José López, que trató de evitar verse en ese trance mediante la interposición de un recurso ante la Audiencia Provincial. En su descargo, el antiguo regidor y hoy líder de la oposición municipal no negaba que se había producido «un desagradable incidente», pero sostenía que todo ello había sido fruto «de una provocación orquestada por el querellante (Fernando Mateo) con personas afines para obtener un rédito político de la reacción de José López».

El origen de la discusión, siempre según su particular versión autoexculpatoria, se enmarcaría «en el pueril intento del Gobierno regional de impedir la cesión de una réplica del submarino Peral al Ayuntamiento, para su exhibición en una rotonda de acceso a la ciudad».

Fue en ese contexto, insistió su defensa, «donde medió la provocación y los insultos del señor Mateo hacia José López, en aquel momento alcalde de Cartagena».

Las expresiones y supuestos insultos que López habría dirigido al antiguo alto cargo del PP se encontrarían «extramuros del derecho penal» y no irían más allá de una mera discusión, por lo que consideraba que la causa debía ser archivada.

Por lo que respecta a la patada que en apariencia lanzó a Mateo, la defensa asegura que las cámaras de videovigilancia que registraron la supuesta agresión en el CIFP de Hostelería y Turismo de Cartagena, donde se produjeron esos incidentes, no estaban debidamente inscritas en el fichero de la Agencia Española de Protección de Datos. De ahí que considerara en su recurso ante la Audiencia que las imágenes fueron obtenidas ilícitamente y reclame su nulidad como prueba.

En sentido opuesto, Francisco Luis Valdés-Albistur Hellín, letrado que ejerce la acusación particular en nombre de Fernando Mateo, se opuso a la pretensión de José López y recordó que dos altas funcionarias de la Administración regional, que fueron testigos del incidente, expusieron por escrito que fue el entonces alcalde quien empezó a provocar al cargo público popular. Y concretaron que le dirigió expresiones ofensivas como «imbécil, a éste ponle un bote de vaselina que se meta el submarino por el culo, esto se arregla en la calle, sal a la calle como un hombre, vamos a la calle que te voy a meter una hostia que te vas a comer todas las copas, marrano, sinvergüenza, ladrón, gilipollas, hijo de puta, fuera de mi ciudad, no quiero volver a verte aquí, cobarde, sinvergüenza».

Ahora el tribunal de la Audiencia ha rechazado la pretensión de López de que la causa sea sobreseida y deja sentado que, al margen de las valoraciones políticas que el político cartagenero quiera hacer, lo cierto es que los hechos apuntan a la supuesta existencia de un delito leve de amenazas y maltrato de obra, por lo que lo sitúa prácticamente a los pies del banquillo.