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A. LÓPEZ / A. SALAS
Cartagena / San Javier
Jueves, 29 de agosto 2019, 01:21
La Armada aceleró ayer los trabajos de recuperación del cazaminas 'Turia', encallado el martes en un lecho rocoso frente a la costa de Cabo de Palos, cuando buscaba los restos del avión siniestrado el pasado lunes en el que murió el comandante instructor de la Academia General del Aire (AGA) Francisco Marín Núñez. Buzos y personal técnico trabajan contra reloj para evaluar los daños de la nave y diseñar un plan que saque de la zona al buque. Para ello, la Armada ha creado el Grupo de Vigilancia y Control, que permanece en la zona desde ayer. Un equipo de buzos estuvieron durante casi todo el día inspeccionando el casco del barco. La mejoría de las condiciones del viento y del mar permitieron tener una visión más detallada de los daños que provocó el choque contra la piedras, en una zona conocida por los pescadores de Cabo de Palos y San Pedro del Pinatar como 'La Barrica'.
Para agilizar los trabajos y aligerar el barco, a mediodía comenzaron las labores de extracción del combustible del buque militar. Fue a través de una manguera hasta una gabarra. A media tarde de ayer, según fuentes de la Armada, ya habían sacado 15 de las 30 toneladas que llevaba el cazaminas.
El accidente ocurrió, según explicó el jefe del Estado Mayor de la Fuerza de Acción Marítima, capitán de Corbeta, Juan Bautista Pérez Puig, cuando la embarcación procedía a recuperar a bordo el robot submarino no tripulado, un dron teledirigido desde la sala de control del barco. Fue entonces cuando, por razones que están siendo investigadas, el buque «perdió estabilidad y quedó encallado». La vía de agua afectó a varios compartimentos, entre ellos a la sentina (una zona de la sala de máquinas que recoge líquidos y aceites).
Los trabajos para recuperar el 'Turia' fueron seguidos, por segundo día consecutivo, por decenas de vecinos, que se agolpaban en la playa, en las escaleras de bajada a esta y sobre los miradores de Monte Blanco y Galúa. Ahora, la Armada baraja colocar unas fajas exteriores que den flotabilidad al buque, estabilizar el casco y bombear el agua de su interior. Después de ello, será remolcado al puerto de Cartagena para su reparación.
La playa de Galúa, que se había mantenido cerrada desde el pasado lunes, para favorecer los trabajos de extracción de los restos del avión, fue abierta al baño sobre las dos de la tarde, según fuentes del Ayuntamiento de Cartagena. Su uso está permitido hasta 50 metros de la orilla. No obstante se mantiene la vigilancia y la advertencia de que si alguien halla partes de la aeronave de aviso a la Guardia Civil. La que no ha sido posible abrir para el uso de los bañistas ha sido la de Monte Blanco. Estará clausurada hasta que terminen los trabajos de recogida de los fragmentos del avión.
Mientras tanto continúan también los trabajos para recuperar los restos del piloto Marín Nuñez. El incansable trabajo bajo el agua realizado por los equipos de rescate desde minutos después del accidente dieron ayer resultado. Buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil hallaron nuevos restos del cuerpo del instructor de vuelo, en las inmediaciones del accidente, frente a la costa de La Manga, según confirmaron a 'La Verdad', fuentes de la AGA.
Pasadas las doce del mediodía, un equipo de buzos, tras horas sumergido, subió a la superficie parte del cuerpo del piloto y lo embarcó en la patrullera 'Río Guadalentín' de la Guardia Civil. Para su custodia, los restos fueron trasladados de inmediato en esa embarcación hasta el puerto de Santa Lucía, en Cartagena, concretamente al puesto de la Benemérita. Desde allí, en una furgoneta del Tanatorio Estavesa, tras ser desembarcados por cuatro agentes, fueron llevados al Instituto de Medicina Legal.
Los equipos de búsqueda continúan con el rastreo en la zona, según indicaron las mismas fuentes. A estos trabajos se unieron ayer los cazaminas 'Sella' y 'Tambre', que también siguen sacando pequeños restos del avión. Está previsto que, cuando terminen las labores de rescate del cuerpo del piloto, se celebre un funeral del Estado en la Academia General del Aire, en San Javier.
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