La Ambulancia del Deseo reconoce a colectivos que «humanizan la sanidad»

Cultura, arte y humanización. Son los tres conceptos que eligió la Ambulancia del Deseo para celebrar la quinta edición de la gala en la que la fundación internacional –cuya primera sede en España se abrió en Lorquí en 2018–, quiso compartir con la sociedad su misión. Más de setecientas personas acudieron al evento, celebrado en el Teatro Romea de Murcia. «En muy poco tiempo hemos recibido muchos premios y reconocimientos; ahora es el momento de devolverlos», destacaba el médico José Manuel Salas, director general y fundador de esta ONG que ha cumplido en seis años las últimas voluntades de unas trescientas personas en fase terminal o con problemas de movilidad.

«Humanizar la sanidad» es una de las premisas de las que parte la Ambulancia del Deseo, donde unos doscientos voluntarios repartidos regalan su tiempo a cambio de sonrisas. Empatía que los Pupaclown llevan impregnada en su esencia. Desde hace 26 años, los payasos de hospital amenizan la estancia de niños ingresados en La Arrixaca con números de magia, cuentos, música e improvisación. Una labor que les hizo merecedores del premio de la ONG a la Mejor Iniciativa de Humanización a nivel regional.

En el ámbito nacional, el galardón recayó en Cultura en Vena. Una fundación que tiene como objetivo «mejorar la vida de las personas inyectando cultura allí donde no suele llegar», como es el caso de hospitales y zonas rurales de España en riesgo de despoblación. Por otro lado, Kartsana, empresa catalana fabricante de camillas para ambulancias, fue la compañía que recibió la distinción Premio Amigo de la Fundación por su «gran apoyo» a la ONG.

Vladimir Salazar, fundador de Never Surrender que falleció en noviembre de 2022, recibió un galardón a título póstumo por «su entrega en cuerpo y alma en la lucha contra al cáncer, acercando el deporte a todos los enfermos de la Región para mejorar su calidad de vida». El quinto premio, que reconoce al Voluntario del Año, fue doble en esta ocasión. Una sorpresa para Silvia Coronel y Mercedes Pérez Santamarina.

El momento más emotivo de la gala fue protagonizado por Carlos, un madrileño que sufre ELA (esclerosis lateral amiotrófica) y anhelaba volver a ver el mar hasta que apareció en su vida la Ambulancia del Deseo. Junto a su pareja, Sandra, lo compartió con los asistentes. «Siempre recibimos mucho más de lo que damos», recalcaban desde la fundación.