Jorge Luis Navarro: «Ahora hay menos alumnos interesados en ser docentes de Matemáticas»

–Su ponencia se titula 'La signatura de un sistema coherente', ¿cómo lo definiría para una persona sin nociones matemáticas?

–Los sistemas son estructuras complejas formadas por diversos componentes que funcionan o no dependiendo de qué componentes estén actuando correctamente. Hay muchos ejemplos tanto en ingeniería como en otros campos. La signatura, sin embargo, es un código numérico que nos indica cómo de bueno es cada sistema. Es similar a la signatura de un libro que nos indica dónde debe colocarse en una biblioteca ordenada por la temática de los libros.

–Estos sistemas rodean nuestra vida diaria, ¿dónde los podemos encontrar?

–Prácticamente en todas partes. Por ejemplo, los sistemas de los motores de un avión o las ruedas del tren de aterrizaje son muy importantes para todos los que viajamos en ellos. Nosotros mismos somos un sistema formado por un corazón, dos riñones, dos pulmones, etc. Además, todas estas teorías también se pueden aplicar a problemas de conexión en redes, tanto de datos como de distribución de electricidad, transporte de gas o de atención a clientes en tiendas 'online'. Todas estas situaciones se pueden modelizar gracias a los sistemas coherentes.

–¿Cómo puede estimarse el tiempo de vida de un aparato?

–Esta es una buena pregunta. En general, depende de la información disponible. Si tenemos una muestra completa de tiempos de vida de sistemas similares, la respuesta es muy sencilla: basta usar la media aritmética. La realidad suele ser más compleja, ya que no se suele disponer de una muestra completa o hay que esperar mucho tiempo para tenerla. En estos casos, los matemáticos tenemos que trabajar con datos de fallos tempranos o censurados, o usar la signatura y la información disponible sobre los componentes para predecir el tiempo esperado de vida o la fiabilidad del sistema.

–¿Entra aquí en juego la temida obsolescencia programada?

–En general, estos sistemas son demasiado importantes como para que se programe su fallo. Es cierto que esto se puede hacer en una impresora o en un ordenador, pero no es tan sencillo hacerlo con las ruedas de un avión (¡y es mucho más peligroso!).

–¿Qué papel juegan las Matemáticas en un mundo cada vez más tecnológico?

–La verdad es que hoy en día las Matemáticas están por todas partes, como hemos podido ver en el tratamiento de datos de la Covid. Muchas empresas buscan perfiles de trabajadores que sean capaces de manejar grandes cantidades de datos, extrayendo la información contenida en ellos en un tiempo razonable. Muchos de nuestros egresados encuentran ahora empleos de este tipo. El problema es que ahora hay menos alumnos interesados en ser docentes de Matemáticas en Secundaria y Bachillerato.

–¿Qué supone para usted el ingreso en la Academia de Ciencias de la Región de Murcia?

–Es un gran honor y un premio a mi larga carrera investigadora. La verdad es que, desafortunadamente, los méritos investigadores tradicionalmente se valoran poco o nada. En este sentido, las academias juegan un papel fundamental, promocionando y difundiendo la buena investigación que se está realizando en nuestra Región. Espero poder colaborar en este sentido y animar a nuestros estudiantes a seguir la difícil carrera investigadora, especialmente ahora que la UMU está dejando de valorar de forma adecuada este mérito del PDI (personal docente e investigador).