Un avión en mitad de Sierra Espuña
Los arquitectos Patricia Reus y Jaume Blancafort optan al premio europeo AHI por su espacio de recreo en una inconclusa residencia militar
El estallido de la Guerra Civil truncó la construcción de una residencia de reposo para el Ejército del Aire en mitad de Sierra Espuña (Alhama ... de Murcia). Apenas se llegaron a levantar los cimientos, aunque en el terreno quedó trazada la planta del inacabado edificio, que tenía forma de aeroplano. El paso del tiempo y el avance del bosque engulleron aquellos muros de piedra y mortero, si bien la huella permaneció y el montañoso paraje pasó a conocerse como el Entorno del Avión, muy cerca del centro de interpretación del parque natural. Casi nueve décadas después, aquel proyecto inconcluso y original se ha recuperado como un espacio de recreo, descanso y observación para los visitantes de este pulmón verde de la Región. La intervención paisajística, liderada por los arquitectos y profesores de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) Patricia Reus y Jaume Blancafort, aspira al premio europeo Architectural Heritage Intervention (AHI), en la categoría de Espacios exteriores, que se falla el próximo jueves, 1 de junio, en Barcelona.
La idea, materializada hace dos años con el impulso de la Dirección General del Medio Natural, consistió en «recuperar la memoria histórica del lugar, en armonía con la vegetación», resume Blancafort en declaraciones a este diario. Con una inversión de casi 154.000 euros, los trabajos, llevados a cabo por la empresa Ingeniería Quipons, se centraron «en poner en valor esa forma tan especial del edificio». Así que se desmontaron unas construcciones ajenas al proyecto original y se regularizaron las alturas de las estructuras para favorecer «una comprensión nítida del conjunto». Un depósito de agua localizado en lo que sería el morro del avión es ahora un mirador, y el foso donde debió ir la piscina se llenó de arena de playa para albergar unas formas geométricas de tubo de acero que invitan al juego y a la exploración.
En esencia, la actuación responde a cómo esta pareja de profesionales entienden su oficio. «La arquitectura debe permitir que la gente que la habita viva mejor», comenta Jaume Blancafort. A la espera de la decisión del jurado, para el equipo técnico ya supone suficiente reconocimiento que su proyecto (en el que colaboraron también Candy García, Victoria Artés y el grupo de investigación Contemporary City and Architectural Design de la UPCT) fuera seleccionado entre las 240 propuestas presentadas al certamen bienal, procedentes de 28 países. 'El avión de Sierra Espuña', sobre una superficie de 1.730 metros cuadrados, aparece en la lista final de 26 obras que compiten por los premios en las dos candidaturas. Son los únicos representantes de la Región, y sus nombres aparecen junto a los de arquitectos de la talla de Norman Foster (que opta con su proyecto de rehabilitación Ombú) y del último premio Pritzker, David Chipperfiel, candidato por su reforma del Neue Nationalgalerie (Berlín).
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