«Abrir al 30% solo permite trabajar a uno de los dos»
Mar Casado y Agustín Zapata, peluqueros
Mar Casado ha recibido muchas llamadas en las últimas 24 horas. «La mayoría son de clientas que me piden hora para renovar el tinte ... que han perdido en un mes y medio sin venir. Y de hombres a los que les da vergüenza ir al trabajo con el pelo tan largo», explicó. Pero a esta peluquera de 49 años, con un negocio consolidado en Canteras (Cartagena) la alegría por tener tantos encargos para volver a trabajo se le agrió cuando su asesora laboral le advirtió de que solo podrá hacer lo «en unas condiciones tan limitadas que nos llevarán a la miseria», apuntó. Casado comparte el negocio con su pareja, Agustín Zapata. Él es autónomo y ella, su empleada. En mes y medio no ha cobrado nada por el ERTE que presentaron y él solo ha recibido una ayuda de unos 700 euros por el cese de actividad. En estas circunstancias «no ganamos para pagar facturas», apuntó Casado.
«Reanudar la actividad al 30% como nos exigen, solo permite que trabaje uno de los dos. Y recibir a los clientes de uno en uno. Eso nos impediría, por ejemplo, cortarle el pelo a una persona, mientras a otra se le asienta el tinte», advirtió. «Será una pérdida de tiempo», añadió.
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