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La Fiscalía investiga a un empleado del INE por fotografiar y grabar a compañeras

El comité de empresa afirma que los hechos se remontan a junio de 2016 y lamenta la falta de contundencia de la Administración

Jorge García Badía

Miércoles, 3 de mayo 2017, 01:06

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Las piernas y las nalgas de sus compañeras eran el objetivo de los vídeos y las fotografías que realizaba supuestamente un trabajador del Instituto Nacional de Estadística (INE). La Fiscalía ha abierto una investigación después de que el comité de empresa, compuesto por UGT, CC OO y Csif, haya presentado una denuncia que recoge las conclusiones de un expediente disciplinario, abierto por el INE a ese empleado, por una presunta falta muy grave de acoso por razón de sexo.

«Entendemos que ha habido una pasividad desde el primer momento por parte del INE», expuso ayer el comité de empresa para justificar el paso dado hacia la vía judicial. El citado expediente solo ha decretado el traslado forzoso de este trabajador, que desarrolla labores de coordinación de equipo, desde las oficinas de la calle Primero de Mayo a las situadas en Alfonso X El Sabio. «Todavía no se ha ejecutado el traslado; tendrían que haber sido más contundentes desde el principio».

En octubre de 2016, las empleadas se quejaron verbalmente a la Administración pública de la conducta de ese compañero, pero solo se abrieron diligencias informativas y no fue hasta diciembre cuando se inició el proceso disciplinario, a raíz de una denuncia anónima. El expediente recoge el testimonio de diez mujeres, que afirman que este hombre las fotografió y grabó supuestamente con su móvil cuando ellas no se daban cuenta. El comité de empresa tiene constancia de que estas prácticas las venía realizando supuestamente desde junio de 2016.

Solía grabarlas en apariencia por la espalda cuando observaba que una empleada se agachaba a recoger algún documento o iba al cuarto de baño. De hecho, en el expediente existe un vídeo que las propias trabajadoras filmaron sobre este compañero mientras grababa a una mujer. «Se hizo en octubre y se ve cómo se levanta de su silla y, en cuanto una empleada se pone de lado, empieza a grabarla». También habría sido pillado viendo vídeos pornográficos en horas de trabajo.

Ordenador precintado

El comité de empresa quiere que la Fiscalía aclare si los hechos pueden ser constitutivos de posibles delitos de acoso y vulneración del derecho a la intimidad de las trabajadoras. «Esperamos asimismo que se depuren las posibles responsabilidades de los mandos que no cortaron de raíz estas ofensas; ninguna de las afectadas tendría que haber estado sometida a ese estrés».

A los sindicatos también les preocupa qué ha ocurrido con el ordenador de este empleado público, que fue precintado y custodiado por el INE. «No se ha procedido a la comprobación del contenido almacenado en el ordenador del expedientado, tal y como se ha solicitado por este comité, con el fin de comprobar si dichas fotografías y vídeos eran guardados allí e incluso reenviados a otras personas».

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