Sanidad mantiene a Murcia a la cola en atención a las personas transexuales

Casi un año después de su aprobación por unanimidad en la Asamblea Regional, el Gobierno autonómico sigue ignorando la Ley de Igualdad Social de Gais, Lesbianas, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales (LGTBi). En el ámbito de la salud, la norma instaba a la Consejería de Sanidad a establecer «un protocolo de atención integral a personas transexuales», a despatologizar por completo su asistencia y a que la cirugía de reasignación de sexo se realizase en la Región. A día de hoy, nada de esto se ha hecho. Como consecuencia, Murcia permanece a la cola de España en la atención a los transexuales. Porque, si bien la mayoría de regiones siguen sin incorporar la cirugía, al menos 13 de 17 cuentan ya, como mínimo, con unidades de referencia en identidad de género o con protocolos o normativas específicas, según ha podido comprobar 'La Verdad .

La Consejería rechaza de momento ofrecer en la cartera de servicios la cirugía de reasignación de sexo, el último paso cuando un transexual decide pasar por el quirófano. Actualmente, los pacientes que precisan esta operación son derivados al Hospital Carlos Haya de Málaga, referencia nacional en este campo. Para Sanidad, esta situación es la idónea, porque se trata de operaciones «muy complejas» que requieren de «atención especializada precisa». Desde 2010, el SMS ha derivado a Málaga a 47 pacientes, 9 de ellos el año pasado.

Para el PSOE, que impulsó la Ley de Igualdad LGTB en la Asamblea, esto supone un claro incumplimiento. «La norma dice, en su artículo 14, que las personas transexuales serán atendidas en proximidad sin sufrir desplazamientos y gastos innecesarios. Mandar a un paciente a Málaga no es proximidad», advierte la diputada socialista Isabel Casalduero.

La creación de centros de referencia nacional para atenciones muy especializadas es una tendencia en los últimos años apoyada por los expertos, ya que permite garantizar tanto la calidad como la sostenibilidad. El problema, en el caso de la asistencia a los transexuales, es que el Ministerio y las comunidades no han planificado una red de unidades de referencia para esta cirugía. Actualmente, solo cinco regiones ofrecen estas intervenciones (Andalucía, Madrid, Valencia, País Vasco y Cataluña). Así que en Málaga, donde van a parar la mayoría de pacientes del resto de comunidades, están desbordados. Los transexuales derivados desde Murcia soportan esperas que pueden llegar a los tres años, según los datos que maneja el servicio de Endocrinología de La Arrixaca.

«Andalucía está empezando a poner límites a las derivaciones», explica Antonio Hernández, jefe de este servicio. Aunque desde el SMS se valore esta intervención como no urgente, un retraso tan importante no se sostiene bajo ningún criterio de calidad (la Consejería establece en 150 días la demora máxima tolerable para cualquier tipo de intervención).

Sin protocolo regional

Para el colectivo No te prives, de defensa de los derechos de la comunidad LGTB, lo prioritario -más allá de la polémica por las derivaciones- es que la sanidad regional salvaguarde y respete los derechos de las personas transexuales durante todo el proceso, que comienza con el acceso a los tratamientos bloqueantes y hormonales. En este sentido, la Consejería sigue sin elaborar un protocolo claro de atención que se adecue a la nueva Ley de Igualdad LGTB.

«Cuando un transexual llega al médico de familia con la intención de que lo deriven al endocrino, se encuentra con que todo depende de la buena voluntad del profesional», advierte Jesús Costa, presidente de No te prives. «La situación empeora en el caso de los menores», añade. «La ley dice que hay que despatologizar la transexualidad, de forma que las personas 'trans' no tienen por qué someterse a un examen psicólogico o psiquiátrico previo a iniciar los tratamientos. Pero los médicos siguen enviándote, lo primero de todo, al psicólogo», subraya.

No te prives denuncia que la ausencia de protocolos y de una unidad de referencia abren la puerta a la desprotección y a la arbitrariedad, en función de que al paciente le toque un profesional más o menos sensibilizado o con mayor o menor experiencia en este campo.

«La ley también insta a la creación de un Observatorio en el que podrían registrarse abusos o incumplimientos, pero eso es algo que tampoco se ha materializado», denuncia Jesús Costa. «La norma daba nueve meses para la convocatoria de una comisión interdepartamental que pusiese en marcha las diferentes medidas previstas. Ni se ha convocado ni se ha hecho nada», advierte, por su parte, la diputada Casalduero.

Sin unidad de referencia

La mayoría de comunidades cuentan ya con unidades de referencia de identidad de género para atender a las personas transexuales. Murcia es una excepción; cada hospital va por su cuenta. La Arrixaca es el centro con más experiencia en este campo, y dispone de una consulta especializada. Si el servicio de Endocrinología de La Arrixaca no se ha convertido en unidad de referencia regional es solo por el desinterés de la Consejería. Los profesionales llevan años dispuestos a asumir esa tarea.

Para la Asociación de Usuarios de la Sanidad, el incumplimiento de la ley es flagrante. «El SMS no solo no ofrece la cirugía de reasignación de sexo, sino que no cuenta con una unidad específica y de referencia en la que estas personas puedan recibir el seguimiento adecuado», lamenta Jesús Martínez, portavoz de esta organización. «Es particularmente sangrante que Sanidad no cumpla lo referente a los menores transexuales», subraya. «Esperemos que detrás de esto no haya un posicionamiento ideológico» u «objetor», advierte la asociación.