El corte de la autovía 'cierra' el Noroeste siete horas y atrapa a cientos de vehículos

El temporal de frío y nieve obligó ayer a cortar la autovía del Noroeste, lo que provocó que la comarca quedara aislada durante siete horas y dejó cientos de vehículos atrapados. La situación afectó de lleno a los vecinos de Mula, Bullas, Cehegín, Caravaca de la Cruz, Calasparra y Moratalla, así como a otros muchos ciudadanos de distintos puntos de la Región que cada día transitan por dicha vía. Un tramo de 36 kilómetros, y en ambos sentidos, se vio afectado largas horas, hasta que a las 6 de la tarde fue restablecido el tráfico. Algunos afectados denunciaron que nadie les llevó mantas, ni alimentos, ni bebidas. «Tampoco se nos facilitó información alguna sobre la evolución de los trabajos que se estaban llevando a cabo», lamentaron.

Los efectivos de Emergencias trabajaron ayer para atender todas las urgencias que se produjeron en distintos puntos del amplio término municipal de Caravaca de la Cruz. A los cortes al tráfico se sumaron otras incidencias. «No podemos ni salir de casa para ir al médico», denunciaron muchos vecinos.

Los voluntarios de Protección Civil se unieron a los trabajos de los vecinos de las pedanías caravaqueñas para tratar de despejar los accesos a las distintas localidades. En la tarde de ayer, un vehículo de Protección Civil acompañó a una ambulancia hasta Navares para evacuar a un enfermo. Durante el día se procedió a eliminar la nieve de las cuestas y calles más pronunciadas de la localidad con el objetivo de facilitar el paso de los transeúntes. Y es que fueron muchos los resbalones que sufrieron los vecinos en varias zonas de la localidad.

El techo del aparcamiento de un supermercado se desplomó a causa del peso de la nieve acumulada y algo similar ocurrió con una parte del refugio del grupo de San Jorge, donde la estructura metálica tampoco soportó el volumen del nevazo y los techos de algunos cobertizos y corrales se hundieron. Aunque no hubo mucho tráfico por las calles del casco urbano, se produjo algún pequeño choque entre vehículos, pero sin importancia. Muchos camioneros también alertaron a Emergencias de que se habían quedado incomunicados cuando transitaban por caminos secundarios a la altura de la pedanía de El Moral.

El cierre de la Autovía del Noroeste provocó colapsos en las vías de acceso a la misma desde las distintas localidades por las que transcurre. Trabajadores del Hospital Comarcal tuvieron que esperar cerca de siete horas para poder regresar a sus casas. De hecho, la única vía posible de comunicación con Caravaca de la Cruz fue la carretera que une la ciudad con la Venta del Olivo, por lo que esta infraestructura soportó más tráfico del habitual.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Pedro Antonio Muñoz, volvió a insistir en las medidas de precaución: «Deben evitarse, en la medida de lo posible, los desplazamientos en vehículo». El servicio de recogida de residuos urbanos fue suspendido para la noche a la espera de la evolución del temporal. Desde el Ayuntamiento se difundió un comunicado en el que se solicitó la colaboración de los vecinos «para que esta situación sea lo menos perjudicial posible. Esperamos que mañana [por hoy] el servicio vuelva a restablecerse con total normalidad».

Amplio dispositivo en Bullas

En Bullas, la Concejalía de Servicios puso en marcha un amplio dispositivo para dejar las calles transitables. Para ello, los operarios utilizaron una retroexcavadora, una pala de grandes dimensiones, un tractor que echaba sal sobre las aceras y un vehículo de Protección Civil con cuchilla quitanieves. Además, la Policía cortó los accesos a los parajes naturales del Aceniche, Salto del Usero y el Camino del Portugalés.

Unos vecinos vivieron momentos de incertidumbre y dolor. «Ha muerto un familiar en el hospital de Caravaca y no podemos trasladarlo al tanatorio de Bullas porque nos dicen que las carreteras están cortadas», denunció un allegado. Finalmente, pudieron trasladar al fallecido bien entrada la tarde, cuando muchas vías se restablecieron al tráfico.