Borrar
Decenas de tractores circulando, ayer, en fila india, por la Gran Vía murciana durante la protesta en demanda de agua para los regadíos.
Los agricultores se echan a la calle y logran reabrir los pozos del Campo de Cartagena

Los agricultores se echan a la calle y logran reabrir los pozos del Campo de Cartagena

Miles de manifestantes paralizan el tráfico en el centro de la capital con más de 500 tractores y 150 camiones para exigir agua de riego

Alicia Negre

Miércoles, 28 de septiembre 2016, 01:53

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El campo se hizo oír ayer con fuerza en la capital de la Región. Miles de agricultores -4.200, según estimaron las organizaciones convocantes- se echaron a las calles de Murcia, paralizando en gran parte el tráfico con sus más de medio millar de tractores y 150 camiones para exigir agua para el riego. Con esta protesta multitudinaria, el sector logró arrancar a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) algunos compromisos, entre ellos, el de permitir la apertura de los pozos del Campo de Cartagena -se calcula que hay en torno a 700-, siempre que estos cuenten con autorización y sus dueños se comprometan a no realizar vertidos. Un pequeño «desbloqueo» que, remarcó el sector, aún es insuficiente y que solo sirve para calentar más los motores de cara a la manifestación que prepara para el próximo 13 de octubre en Madrid. «La protesta de hoy ha servido para desbloquear y la de Madrid tiene que servir para conseguir», remarcaron. «Quien tiene que solucionar este problema es el Ministerio».

El campo murciano, principalmente la zona del Campo de Cartagena, se sumió ayer en un paro voluntario que aprovechó para acudir a Murcia a dejar claras sus reivindicaciones. Cientos de agricultores marcharon a la capital a primera hora de la mañana, a bordo de sus tractores y camiones, para sumarse a un recorrido por la ciudad que no olvidó la sede de la Consejería de Agua y la de la Delegación del Gobierno y que durante horas dificultó el tráfico por el centro.

Garre, entre los manifestantes

Simultáneamente, miles de agricultores y trabajadores agrícolas se agolparon en las puertas de la CHS, en la Plaza Fontes, para exigir con gritos y pancartas el agua necesaria para sacar adelante sus cultivos y poder mantener sus puestos de trabajo. Una multitud indignada a la que se sumó, entre otros, el expresidente regional Alberto Garre.

Una hora después de que se iniciase la protesta, convocada por las organizaciones agrarias Asaja, Coag y UPA y por las asociaciones Fecoam, Proexport y Apoexpa, el presidente de la CHS, Miguel Ángel Ródenas, y su equipo accedió a reunirse con los representantes de las mismas. Durante cerca de dos horas, los miembros de ambas partes dialogaron en una sala del Palacio Fontes y los representantes de las organizaciones agrarias salieron de allí con un pequeño triunfo que, sin embargo, está lejos de calmar las aguas.

«Hemos conseguido poco, pero le vamos a dar un poco para adelante al carro», subrayó Vicente Carrión, secretario de Coag del Campo de Cartagena, nada más concluir el encuentro. Explicó que se inicia ahora un procedimiento con la comisaría de aguas de la Confederación para que «se puedan poner en marcha todos los pozos del Campo de Cartagena que cuenten con autorización». Aquellos que no dispongan de ella deberán iniciar un procedimiento para lograrla. Un trámite que, recalcó Carrión, «se va a coordinar entre las asociaciones y la CHS y que se tratará de que se agilice». Además, el dirigente de Coag hizo hincapié en que habían adquirido con Ródenas un compromiso de «vertido cero» al mar. «En el caso de que las desaladoras de la zona se tengan que poner en marcha el propietario tiene que tener un gestor autorizado» que se encargue de eliminar ese vertido.

En referencia al Valle del Guadalentín, Carrión explicó que «se intensificarán las actuaciones con la Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT) y Acuamed para liberar «esos 10 hectómetros cúbicos que la MCT tiene en contrato y no utiliza». Según aseguró Carrión, por parte de Ródenas «se pondrá todo el empeño para que eso se desbloquee y se resuelva a la mayor brevedad posible». Además, en esa reunión se pactó la «tramitación por el procedimiento abreviado del impacto ambiental de los pozos del Sinclinal de Calasparra y la autorización a la desaladora de Escombreras para que toda la producción pueda ir destinada a regadío».

Una «situación límite»

Los convocantes de esta manifestación multitudinaria dieron lectura a un manifiesto en el que advirtieron de que «el regadío del trasvase está en un situación límite, ya que los agricultores ni disponen de agua para realizar plantaciones ni garantías de los caudales necesarios para llevar a buen fin sus cultivos».El secretario general de UPA, Marcos Alarcón, remarcó que los agricultores «están cansados de oír que la situación se va a arreglar, de escuchar promesas pero ver que no llega el agua» y remarcó que, por ello, «exigen que las medidas que prevé el decreto de sequía, que muchas no se han cumplido, se agilicen y que haya compromisos. Alarcón incidió en que «ya no valen promesas a futuro. Hay que reaccionar en el corto plazo».

Santiago Martínez, presidente de Fecoam, hizo hincapié en la necesidad de que «arreglen la tubería que han roto» -en alusión a la red de salmueroductos del Campo de Cartagena- y remarcó que, dado que «ya no hay vertidos al Mar Menor, se podría seguir regando si arreglan esa tubería». La adopción de medidas es de gran urgencia, advirtió, porque «se pueden empezar a hacer expedientes de regulación de empleo y muchísima gente iría a la calle porque no se puede seguir así».

Por su parte, Javier Soto, vicepresidente de Proexport, subrayó que «necesitamos el agua para seguir produciendo, exportando y luchando por una agricultura sostenible y responsable con el medio ambiente». Al ser preguntado por la ausencia de la patronal Croem en la protesta, Soto sostuvo que acudían con «la máxima unidad posible».

Alfonso Gálvez, secretario general de Asaja, destacó que «todo el regadío de Murcia se encuentra en una situación crítica». Explicó que, «aunque la prórroga del decreto de sequía es positiva porque tramita medidas extraordinarias para poder hacer frente a la sequía no es suficiente y tenemos que empezar a trabajar forzosamente todos los agentes para que haya un pacto nacional del agua y un plan hidrológico que contribuya a garantizar los regadíos de la cuenca».

Desde Coag, su representante en la comarca del Campo de Cartagena subrayó que «tienen que tomar buena nota las distintas administraciones, la CHS, la Comunidad y todos los grupos políticos porque necesitamos que en Murcia haya una sola voz para reclamar agua, algo imprescindible para seguir ejerciendo nuestra actividad».

La presidenta de la Asociación de Mujeres Rurales de El Raiguero, María Costa, dejó patente su indignación con la situación y remarcó que «la agricultura está pasando una sequía grandísima». Lamentó, asimismo, que «los políticos sean incapaces de solucionar este problema» y advirtió de que el campo ya está preparado para salir de nuevo a la calle.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios