Borrar
Francisco Alemán y Antonio Martínez son voluntarios de Cruz Roja desde que acudieron a cumplir sus trabajos comunitarios.
Una redención a base de esfuerzo

Una redención a base de esfuerzo

Más de 2.700 murcianos saldan sus delitos de tráfico, lesiones y violencia de género con trabajos comunitarios. Crece el número de municipios, ONG y parroquias que se suman al programa alternativo de cumplimiento de condenas. Cercado por el paro, Antonio tuvo que echar una mano en Cruz Roja hace tres años porque no podía pagar una multa de tráfico. Una vez allí, le picó el gusanillo del voluntariado y ahora reparte comida entre los más necesitados

Alicia Negre

Domingo, 14 de febrero 2016, 07:48

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Lea la información completa en la edición impresa de 'La Verdad' y en Kiosko y Más.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios