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Jorge García Badía
Viernes, 12 de febrero 2016, 00:38
No sabe nada de su pequeño. Ni tan siquiera su fecha exacta de nacimiento. Así lo hizo constar Álvaro en una comparecencia ante la Fiscalía y la Dirección General de Familia: «Que es padre de un hijo que ha tenido, entre diciembre de 2015 y principios de enero del presente año, no conociendo con exactitud la fecha porque la madre de su hijo, tras cinco meses de embarazo, rompió la relación que ambos mantenían, manifestándole que el niño había muerto en el parto. No obstante, ha tenido ahora conocimiento de que eso no es verdad, y que en realidad lo que ha hecho la madre es entregar al menor en adopción».
Este militar asegura que vive «desesperado» desde que un trabajador social le informó de que el pequeño seguía vivo. «Mi bebé tiene mes y medio y ni siquiera lo he visto». El citado funcionario le informó de que el parto tuvo lugar en el hospital de Los Arcos y, posteriormente, el bebé fue entregado en adopción, tal y como también ha relatado Álvaro a la Fiscalía y a Familia. «El menor fue tutelado, por urgencia, el 31 de diciembre de 2015, ya que la madre dio su consentimiento». Y lo que reclama es que «en el caso de que se haya iniciado expediente de acogimiento o de adopción de su hijo, se paralice hasta que se resuelva la filiación».
Su letrado, Antonio Gálvez, explica que el problema surgió cuando Álvaro acudió al centro de acogida de menores «para intentar someterse a una prueba de paternidad, pero el bebé estaba registrado con el apellido de la actual pareja de la madre». A efectos legales. no tiene vínculo alguno con el pequeño. «No me dan derecho a nada», se lamenta Álvaro. «Cuando su madre se enteró de que estaba buscando a mi hijo, le puso los apellidos de su novio».
Medidas cautelares
El letrado indicó que existe un plazo de seis semanas para que la madre pueda recuperar al menor, en caso de que se arrepienta de haberlo entregado en adopción. De forma que ahora mismo su cliente no sabe si el bebé ha sido reclamado por su exmujer o si está bajo la tutela de la Comunidad . La Dirección General de Familia precisa que «no se puede dar información» por la ley de Protección del Menor.
Ante esta situación, Álvaro ha presentado una demanda en un juzgado de Primera Instancia de San Javier, solicitando la determinación de la paternidad del bebé y la impugnación de la filiación actual. «Como medida cautelar urgente pedimos una prueba de paternidad», subraya el letrado.
También reclaman que «se libre oficio a la Dirección General de Familia, disponiendo la no entrega del menor hasta que el juzgado se pronuncie». Este militar conoció a su expareja en el verano de 2011. «Tuvimos una amistad intensa». Tanto que en febrero de 2015 comenzaron una relación sentimental y en abril ella se quedó embarazada, pero la mujer conoció a su nueva pareja y en septiembre rompió la relación.
Fue entonces cuando habría empezado a decirle que no quería el niño. «Voy a abortar», le escribió en noviembre en un WhatsApp, incluido en la causa. Álvaro solo busca respuestas para sus dudas: «El niño fue deseado y si me ha engañado diciendo que yo era el padre, también es un delito».
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