El primer colapso de enero desborda las Urgencias de La Arrixaca y el Santa Lucía

Con el comienzo del año ha llegado el primer colapso del invierno a los principales hospitales de la Región. Las camas vuelven a poblar los pasillos de los servicios de Urgencias del Virgen de La Arrixaca y el Santa Lucía, mientras la situación era ayer algo más desahogada en el Morales Meseguer y el Reina Sofía, aunque ambos centros están también al completo.

La Arrixaca amaneció con 41 pacientes aguardando en Urgencias su traslado a planta, según datos ofrecidos por la dirección del hospital. El servicio tiene capacidad para, como mucho, 40 enfermos (20 repartidos en las zonas de Observación y otros 20 en la Unidad de Preingreso).

El hospital permaneció saturado durante toda la mañana, con pacientes en los pasillos de Urgencias. Ocho de ellos fueron trasladados al Maternal ante la falta de habitaciones libres en el pabellón general. Se trata de una medida habitual ante situaciones de colapso, como también lo es la derivación a hospitales concertados. Ayer fueron 14 los pacientes enviados a clínicas privadas. Además, dos enfermos crónicos fueron trasladados a sus viviendas para permanecer en régimen de hospitalización a domicilio. Pese a todas estas medidas, la dirección admite que el servicio de Urgencias seguirá hoy soportando una alta ocupación, a la espera de que vayan quedando huecos libres en las plantas. Pero la situación es más complicada todavía en el Santa Lucía. Allí, los pasillos se llenaron de pacientes encamados el fin de semana, y el colapso seguía ayer sin resolverse. Por la tarde, 53 enfermos esperaban en los 'boxes', en los sillones de las salas de observación y en los corredores del servicio de Urgencias.

La dirección del hospital ordenó la apertura de 15 de las 33 camas de la U25, un área que se usa en momentos de alta presión asistencial. Las habitaciones empezaron a llenarse por la tarde. Algunos enfermos se han visto obligados a esperar durante más de 24 horas su traslado a planta, lo que ha generado numerosas quejas. Según fuentes del hospital, el aluvión de pacientes ha sido consecuencia «del fin de semana, porque hay menos altas y más ingresos». Por su parte, el presidente de la Junta de Personal, Antonio Martínez, achacó el colapso a una «negligente gestión, porque existe infraestructura para que los pacientes no tengan que esperar en los pasillos todo un día». Los trabajadores recuerdan que todos los años se produce un aumento de la afluencia tras las vacaciones navideñas, y lamentan que pese a ello no se hayan tomado medidas y no se hayan abierto alas cerradas en el hospital hasta el último momento, cuando el servicio de Urgencias ya estaba colapsado.

El pasado viernes se atendió en Urgencias del Santa Lucía y el Rosell a 418 usuarios, el sábado a 432 y el domingo a 360, lo que representa un incremento del 11% con respecto a otros fines de semana. En La Arrixaca, por su parte, se atendió el viernes a algo más de 330 personas. Según la dirección de este hospital, la afluencia de pacientes no es de momento superior a la de otros años. De hecho, la epidemia de gripe aún no ha comenzado, y las altas temperaturas podrían retrasar todavía más su llegada. En Urgencias sí se nota sin embargo un incremento de neumonías -también algo propio de estas fechas- y en general un mayor número de complicaciones en pacientes crónicos de edad avanzada. La Arrixaca afrontó a finales de diciembre un pico de bronquiolitis que saturó las Urgencias del Infantil, pero la situación se ha normalizado.

Aunque el Virgen de la Arrixaca y el Santa Lucía se llevan la peor parte, también el Morales Meseguer y el Reina Sofía están al completo. En el primero de estos hospitales se han abierto ya las camas del ala derecha de la cuarta planta, que se usan de colchón para momentos de alta presión asistencial. Mientras, el Reina Sofía abrió ayer su Unidad de Preingreso, con 22 camas disponibles.

Saturación pese a los planes

La consejera de Sanidad, Encarna Guillén, anunció en diciembre la puesta en marcha de varias medidas para intentar prevenir los colapsos que se producen con la llegada de la gripe. La epidemia no ha empezado, pero los colapsos sí, pese a los planes dispuestos. Entre las medidas previstas destaca el refuerzo de plantillas, la elaboración de 'pre-altas' que permiten planificar los espacios disponibles en las plantas y una mejora de la coordinación con la creación de 'comités de gripe' en todas las áreas de salud.

En Cartagena, a este plan se une la reapertura parcial del Rosell, con 34 camas dispuestas para hacer frente al aumento de la presión asistencial. Esas habitaciones permanecen cerradas pese a la saturación que ha sufrido el Santa Lucía este fin de semana. Un portavoz de la Consejería de Sanidad indicó que «no ha sido necesario» habilitar esas camas porque lo sucedido se ha podido solventar con la Unidad de Preingreso y con los recursos propios del Santa Lucía.

Crítica de los usuarios

La Asociación de Usuarios de la Sanidad lamentó ayer, en un comunicado, «que otra vez mas, y en la misma época de todos los años, la Consejería no ha hecho sus deberes y los ciudadanos que acuden a Urgencias de los hospitales se encuentran servicios saturados, camas en los pasillos y unos profesionales desbordados». Todos los años «saben que puede pasar, y todos los años dicen que se trata de problemas respiratorios, como si no supiéramos que los centros de salud llevan retraso en sus citas, y que han recortado de tal forma que están cerrados por las tardes», añaden los usuarios. Además, «los médicos de familia están saturados, con consultas en las que se atienden a dos cupos de pacientes, sin tiempo apenas».

Ante «unas demoras en las citas de Atención Primaria que en algunos centros han sido de hasta siete días, y al no tener una solución rápida a sus problemas, los usuarios tienen que ir a una puerta de urgencias hospitalaria o a unos SUAP sin suficientes medios personales y materiales en relación a la población que atienden», denuncia la asociación.