El campo empieza a retirar por el calor 7 millones de kilos de hortalizas

A los bancos de alimentos, al ganado o a quedarse en la mata. Son los destinos para la sobreproducción de hortalizas que existe debido a las altas temperaturas. Las medidas empezaron a aplicarse ayer con la retirada de brócoli, coliflor y lechuga al activarse el comité de gestión de crisis, como informó 'La Verdad'. La iniciativa se tomó a petición de algunos productores con el objetivo de estabilizar los mercados, que a día de hoy «están saturados», según advirtió la consejera de Agricultura, Adela Martínez-Cachá. Veintidós empresas han solicitado ya acogerse al plan, la mayoría del Valle del Guadalentín. Empezaron a retirar más de 7 millones de kilos de hortalizas: 220.000 kilos irán destinados a bancos de alimentos, otros 800.000 a la alimentación de animales, y el resto -seis millones de kilos- se quedarán sin recolectar y servirán en parte de abono.

En total, la Consejería movilizará 1.180.000 euros en ayudas gracias a la activación de los mecanismos previstos en la PAC para la retirada de producción cuando hay un peligro de hundimiento de precios. En concreto, se destinarán 500.000 euros a la producción destinada a bancos de alimentos, 80.000 a la alimentación animal y 600.000 a los agricultores que renuncien a la cosecha.

Primer aviso en noviembre

De las 22 empresas que de momento han solicitado acogerse a las medidas, 4 destinarán su producción a la distribución gratuita a través de bancos de alimentos y 6 a la alimentación de ganado. Las otras 16 dejarán perder la cosecha. La Dirección General de Producciones y Mercados se puso en contacto la semana pasada con los productores para ofrecerles las opciones recogidas en la PAC de destrucción o derivado a la industria y banco de alimentos de tales productos «con el objetivo de que no sufran los mercados». Martínez-Cachá explicó ayer que esta semana o la próxima se estabilizarán los mercados de hortalizas después de una situación climática anormal de altas temperaturas que marcaron los consumos en Europa, y recordó que cuando tuvo lugar el veto ruso ocurrió algo similar para la fruta de hueso.

Los productores han estado aguantando al máximo antes de solicitar la retirada. Los servicios técnicos de producción y calidad de Preoexport ya constataron que el excesivo calor registrado en noviembre provocó un adelantamiento de entre 7 y 10 días en las fechas de recolección previstas en Murcia, Almería y Alicante.

Como adelantó esta Redacción, el jueves se activó el comité de gestión de esta crisis hortofrutícola. Todos los inspectores de la Consejería están trabajando en la vigilancia de las retiradas de producto para evitar que se hundan los precios, ya que muchas cosechas se han adelantado entre dos y tres semanas debido al calor, provocando un exceso de oferta sin que los almacenes puedan dar salida a tanta hortaliza. En los próximos días podrían sumarse otros productos, como alcachofa, tomate, pepino y berenjena.

Ayer, 27 grados

Las altas temperaturas de diciembre y los primeros días de este mes provocarán un descenso de los precios de las hortalizas y de los cítricos por una menor calidad causada por la alteración del ciclo vegetativo de las plantas y en la piel de los frutos, según los agricultores. Ayer se alcanzaron los 27 grados en el municipio de Murcia. Ante unas temperaturas medias mucho más altas de lo habitual en esta época y la falta de lluvia, los productores admiten que existe preocupación en el sector, aunque de momento no hay alarma.

Los cultivos más afectados serán las hortalizas de invierno, tanto por problemas de cuajado de la planta que se traduce en un descenso de los precios como por el hundimiento de la demanda en el exterior, debido a que en algunos países europeos se sigue produciendo hortalizas cuando otros años era impensable en estas fechas. Lechugas, alcachofas y coliflores están teniendo problemas de cuajado y necesitan un descenso de las temperaturas que contribuya a endurecer la planta. En concreto, las cotizaciones de la coliflor se están reduciendo un 50% y la sobreproducción de alcachofas ha conllevado un desplome de los precios en origen cercano al 30%. También han disminuido las cotizaciones en otros cultivos como el brócoli o las habas.

La falta de horas de frío impide la correcta evolución de algunos cultivos como la fruta de verano, los frutos secos, la viña y el olivo, aunque habrá que esperar a ver la evolución climatológica. Algunos de los síntomas más habituales causados por la insuficiencia de horas de frío en los cultivos son el retraso en la apertura de yemas, una brotación irregular y dispersa y un cuajado anormal.

Cuanto más se prolongue la ola de calor, más negativa será la incidencia porque esos cultivos necesitan horas de frío y entrar en un estado de letargo invernal. En cuanto a la fruta de verano, ocurre lo mismo y por tanto en primavera tendrán menor producción y peor calidad. Respecto a los cítricos, las consecuencias no son graves en estos momentos, pero existe entre los agricultores cierta inquietud por la evolución de la situación, en la que el frío no aparece.