Los amantes de Aljucer reciben penas de 19 y 14 años de prisión por el crimen

Diecinueve años de prisión a Fabiola y catorce a Salvador. Tales son las penas que la Audiencia Provincial ha impuesto a los dos amantes de Aljucer por el asesinato del marido de la primera, Ángel Navarro Monteagudo, a quien degollaron en un carril de la huerta de Puente Tocinos en abril de 2013. La condena a Salvador es inferior a la de la mujer debido a varias circunstancias, como la colaboración que el varón mostró con la Justicia desde el primer momento, confesando el crimen y dando detalles de la participación que tuvo su amante, a lo que se suma que a Fabiola se le ha aplicado la circunstancia agravante de parentesco, ya que era la esposa del fallecido.

La sentencia, notificada ayer, ha sido dictada por el magistrado Álvaro Castaño-Penalva, quien ha ejercido como presidente del jurado popular que enjuició los hechos y que encontró a los dos amantes culpables del crimen.

Los jurados dieron por probado que el autor material del asesinato fue Salvador Hidalgo Cuello, quien aprovechando que Fabiola se había llevado a su marido a un lugar apartado y estaba practicándole una felación, se acercó a la víctima por la espalda y le ocasionó un corte muy profundo en el cuello con un cuchillo de cocina.

En la vista oral, este joven de Puente Tocinos reconoció la autoría del asesinato, aunque alegó que lo cometió sin saber exactamente lo que hacía porque ese día había consumido cantidades muy elevadas de alcohol y drogas. Sin embargo, el tribunal popular consideró, en base a los informes periciales presentados en la vista, que sus condiciones cognitivas no estaban afectadas y que era perfectamente consciente de sus actos.

Una rodilla sobre el pecho

Por lo que se refiere a Fabiola Banegas Méndez, de nacionalidad boliviana, el jurado no creyó sus explicaciones de que había conducido a su esposo a un lugar apartado con la única intención de hablar con él y que no imaginaba que Salvador fuera a matarlo. En la apreciación de su culpabilidad pesaron todas las circunstancias que rodearon el crimen, como el hecho de que mandara un mensaje en clave a su amante para decirle que ya estaban en la zona, y, especialmente, las manifestaciones que hizo el autor material del crimen, quien afirmó que Fabiola era quien le había inducido a degollar a su marido. «¿Me ayudarás a matarlo?», le había pedido, según la versión de Salvador, unos días antes de que se perpetrara el crimen.

La noche del asesinato, Fabiola habría colocado incluso una de sus rodillas sobre su esposo, Ángel, para impedir que pudiera resistirse mientras Salvador le cortaba el cuello. Después le robaron la cartera y se dedicaron a sacar dinero de los cajeros, que invertían en drogas y alcohol, hasta que la cuenta se quedó sin fondos.

La pareja fue detenida en un hotel de Alicante mientras celebraba el éxito de su plan.