Hacienda afirma que Bascuñana y su mujer tampoco usaron las tarjetas durante meses
El informe de Hacienda sostiene que no sacar dinero de las cuentas les permitía ahorrar durante largos periodos casi todos los ingresos del trabajo
R. F.
Martes, 10 de marzo 2015, 01:50
A lo largo de trece años, el actual delegado del Gobierno, Joaquín Bascuñana, y su esposa apenas sacaron dinero en los cajeros automáticos ni en la ventanilla de los bancos. Una realidad que el inspector de la Agencia Tributaria, cuyo informe acaba de ser incorporado a las diligencias del 'caso Novo Carthago' y que 'La Verdad' publicó en exclusiva el pasado domingo, atribuye a la probable existencia de «fondos ocultos» para Hacienda de origen desconocido.
Esa situación, consistente en no extraer dinero del cajero o de la ventanilla del banco durante meses y años, la califica además de «totalmente anómala e incomprensible para una familia de cuatro miembros y de un nivel de renta elevado, que prácticamente no retira dinero en efectivo de las cuentas bancarias para satisfacer los gastos ordinarios».
La explicación ofrecida a 'La Verdad' este fin de semana por Bascuñana consistió en señalar que «cubrimos la mayor parte de nuestros gastos con tarjetas». Sin embargo, ello no parece responder a la realidad, pues en el mencionado informe de la Agencia Tributaria se hace constar, asimismo, que las cuentas del matrimonio tampoco registraron cargos de tarjetas de crédito a lo largo de meses, lo que les permitió ahorrar importantes cantidades de dinero en poco tiempo. En resumen, como ni sacaban dinero en efectivo, ni se producían cargos de las tarjetas, los ingresos por su trabajo se ahorraban prácticamente al completo, a excepción de las amortizaciones de algún préstamo que en algunos periodos tuvieron vigente.
Esa ausencia de cargos por uso de tarjetas se habría dado, por ejemplo, entre abril y septiembre de 2001, unos meses en los que el hoy delegado del Gobierno solo gastó 7.341 euros y logró guardar así más de 30.000. «Tal capacidad de ahorro tendría en parte su explicación en que no ha retirado efectivo del banco (para gastos ordinarios) ni ha satisfecho pagos por uso de tarjetas de crédito».
En tales circunstancias, en septiembre de 2001 ya tenía acumulados en su cuenta más de 60.000 euros, que destinó a un fondo de inversión.
Lo mismo pasó con su esposa, por ejemplo, a lo largo de varios meses en 2002. Esta mujer, que en ese tiempo estaba trabajando para la Administración central, solo tenía domiciliados en su cuenta unos pocos recibos, pero tampoco efectuaba extracciones de efectivo ni se le imputaban cargos de las tarjetas, «por lo que prácticamente todos los ingresos del trabajo los ahorraba». Cuando tuvo más de 40.000 euros en la cuenta, los destinó a sendos plazos fijos de 20.000 euros a nombre de sus dos hijas.
El inspector de la Agencia Tributaria también sospecha que Bascuñana adquirió un piso en Murcia a un precio inferior al de mercado.