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El alcalde Miguel Ángel Cámara, cabizbajo, en una fotografía de julio de 2013. :: israel sánchez/agm
El consejero Cámara

El consejero Cámara

El alcalde de Murcia percibió dietas por importe de 29.000 euros de una firma de análisis químicos a la que el Ayuntamiento adjudicó contratos por 325.000 euros

Ricardo Fernández

Jueves, 5 de febrero 2015, 13:44

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Las preguntas surgen, inevitables, cuando se analiza el informe realizado por la Agencia Tributaria sobre el patrimonio del alcalde Miguel Ángel Cámara, elaborado como consecuencia de su imputación en el 'caso Umbra': ¿Por qué una empresa dedicada a los análisis químicos, de nombre Labaqua SA y con sede en Alicante, realizó pagos por un importe total de 29.000 euros, entre los años 2001 y 2008, al regidor murciano? ¿Podía Cámara percibir emolumentos de una firma en apariencia privada, sin incurrir en algún tipo de incompatibilidad con su cargo? ¿En virtud de qué se produjeron esas retribuciones?

Después de múltiples consultas a distintas fuentes, entre ellas al letrado Vicente Sanmartín, uno de los profesionales que tiene encomendada la defensa del alcalde, este periódico está en disposición de responder a esas preguntas. De las respuestas no se infiere a priori nada de apariencia ilegal -salvo mejor opinión al respecto-, pero sí se dan algunas circunstancias sobre las que quizás merece la pena reflexionar.

Miguel Ángel Cámara llegó a Labaqua de la mano de la empresa de capital mixto Aguas de Murcia (Emuasa), que se encarga de gestionar el suministro de agua potable a los hogares murcianos y que está constituida por el Ayuntamiento de Murcia, con un 51% de las acciones, y la empresa Hidrogea (49%).

Hacia el año 1989-90, Emuasa adquirió un 6% de esos laboratorios alicantinos, lo que le dio derecho a tener un representante en el consejo de administración de Labaqua. El designado fue Cámara, una decisión que habría estado motivada por su condición de presidente del consejo de administración de Emuasa.

Según se recoge en el mencionado informe de la Agencia Tributaria, cuyo contenido se ha conocido recientemente, Cámara recibió sucesivas retribuciones de la empresa alicantina a lo largo de los años 2001 (4.627 euros), 2004 (5.048 euros), 2005 (5.048 euros), 2006 (5.048 euros), 2007 (5.048 euros) y 2008 (4.207 euros), hasta sumar un total de 29.026 euros (casi cinco millones de pesetas). Unos pagos que se efectuaron en concepto de dietas por asistencia a los consejos de administración.

Trabajos para el municipio

Esta situación se habría mantenido hasta diciembre de 2009, en que Emuasa vendió su parte del 6% a la propia Labaqua, recibiendo por ello en torno a tres millones de euros.

Es digno de destacar, sin embargo, que durante el periodo en que Cámara estaba ejerciendo como consejero de Labaqua, esta empresa se benefició al menos de un contrato con el Ayuntamiento de Murcia: un encargo por importe de 12.000 euros, enunciado como 'Control y prevención de la legionelosis en los centros de estancias diurnas del municipio de Murcia', que se tramitó sin publicidad -'a dedo'- por tratarse de un contrato menor.

También en 2009, cuando Emuasa seguía teniendo el 6% de Labaqua y Cámara en apariencia seguía siendo consejero de esta firma, el Consistorio le adjudicó un nuevo contrato, éste ya mucho más importante y mediante concurso: 134.000 euros, para la 'Prevención de la legionelosis en diversas instalaciones deportivas'.

Según la documentación oficial que obra en poder de 'La Verdad', el laboratorio alicantino siguió obteniendo contratos -directos o mediante concurso público- del Ayuntamiento de Murcia en los años 2010, 2011 y 2012, hasta sumar adjudicaciones por un importe global de 325.161 euros.

Todos ellos se referían a labores de prevención de la legionella en instalaciones municipales.

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