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Un momento del acto de colocación de la primera piedra de la autovía A-33.
El tramo de autovía de Blanca a Yecla permitirá ahorrar once minutos y cinco litros

El tramo de autovía de Blanca a Yecla permitirá ahorrar once minutos y cinco litros

La ministra de Fomento coloca la primera piedra del último tramo de la carretera, que permitirá recortar el viaje entre Murcia y Valencia en 46 kilómetros

europa press

Miércoles, 17 de diciembre 2014, 12:12

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La ministra de Fomento, Ana Pastor, puso este miércoles la primera piedra del último tramo de la autovía A-33, Blanca-Fuente La Higuera, en el tramo del enlace de la carretera N-344 a Jumilla con el enlace de la carretera C-3223 a Yecla, que permitirá recortar el viaje entre Murcia y Valencia en 46 kilómetros.

Así lo hizo saber Pastor en un contacto con los medios de comunicación acompañada por el presidente de la Comunidad, Alberto Garre, en el acto de colocación de la primera piedra. Se trata del último tramo de la autovía A-33, que ha sido adjudicado por 69 millones de euros, diez menos de los inicialmente presupuestados, con un plazo de ejecución de 40 meses, y será acometida por tres empresas diferentes.

En concreto, Pastor señaló que este tramo, que tendrá un plazo de ejecución de 40 meses, supondrá un ahorro de tiempo de unos 11 minutos con respecto al trazado actual de la N-344, en un trayecto de casi 24 kilómetros; así como un ahorro de cinco litros de combustible en el recorrido entre Blanca y Yecla, que supone unos 70 kilómetros.

Durante su intervención, la ministra destacó que, durante esta legislatura se dedicarán a carreteras de la Región de Murcia 235 millones de euros. De esta inversión se ha tenido que hacer frente a deuda de ejercicios anteriores, por un importe de 40,6 millones de euros.

Además, en esta Comunidad, en los años 2012 y 2013, se han abonado expropiaciones de obras que se iniciaron en los años 2007, 2008 y 2009 por importe de 36,57 millones de euros. Este año, por su parte, está previsto pagar más de 8,3 millones de euros en expropiaciones que afectan a 848 fincas, de las que se han pagado ya 3,4 millones y el resto se abonará en lo que resta del año o en los primeros meses de 2015.

"El esfuerzo inversor en materia de infraestructuras del Gobierno esta contribuyendo a mejorar la vertebración de esta Región y a incrementar su bienestar económico y social, lo que va a redundar en beneficio de todos los murcianos, al facilitar sus condiciones de movilidad y aumentar su calidad de vida", concluyó Pastor.

Presupuesto de 69 millones

Las obras se han dividido en tres subtramos, y el presupuesto de los tres contratos de obra adjudicados asciende a 69 millones de euros. En concreto, el subtramo 1, de 7,3 kilómetros de longitud, abarca desde el enlace con la N-344 en Jumilla hasta la carretera vecinal MU-26-A; mientras que el subtramo 2, de 7,5 kilómetros de longitud, abarca desde la carretera vecinal MU-26-A hasta el siguiente cruce con la misma carretera. Por último, el subtramo 3, de 8,6 kilómetros de longitud, abarca desde la carretera vecinal MU-26-A hasta la carretera autonómica C-3223 que da acceso a Yecla.

Este tramo de autovía será una alternativa a la antigua carretera N-344, por la que circulan 5.500 vehículos diariamente, de los que hasta un 23% son pesados, según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno en un comunicado.

Además, se diseñó con unas pendientes muy suaves, con lo que los vehículos que utilicen este nuevo trazado evitarán las pronunciadas pendientes y rampas de la carretera N-344, captando la mayor parte de los tráficos de largo y medio recorrido al permitir una conducción mucho mas cómoda, segura y eficiente.

Evitará asimismo el paso de vehículos por las travesías del polígono industrial de Los Romerales en Jumilla, La Alquería y Fuente del Pino, con la consiguiente mejora de la calidad de vida en estos lugares al reducir las molestias por ruido o contaminación e incrementar la seguridad viaria, según las mismas fuentes.

Asimismo, la ministra anunció que habrá continuidad en el tramo entre Yecla, Caudete y Fuente la Higuera para la conexión con la autovía del Mediterráneo. Se espera que cuando la autovía A-33 esté completada constituya una alternativa atractiva para los viajes entre Murcia y Valencia atravesando el interior, sin pasar por Alicante, añade la Delegación.

Características técnicas

Los tres contratos de obra definen un tramo de autovía de nuevo trazado 23,4 kilómetros entre Jumilla y Yecla. La autovía contará con dos calzadas de dos carriles de 3,5 metros cada una, separadas por una mediana de 10 metros, arcenes exteriores de 2,5 metros e interiores de 1,0 metros, y bermas de 1,0 metros.

La velocidad de proyecto es de 120 kilómetros por hora, y se construirán tres enlaces, uno de ellos con la carretera N-344, en el comienzo del subtramo 1, que permitirá el acceso al núcleo urbano de Jumila; otro enlace en el punto kilométrico 10+600 con la carretera RM-A26, a mitad del subtramo 2; y un enlace en el punto kilométrico 17+100 con la carretera RM-A26, en el subtramo 3.

Al final del tramo, en Yecla, se incluye la construcción de una glorieta provisional con la carretera C-3223, que accede al núcleo urbano de Yecla, en tanto este tramo de autovía no tenga continuidad con el siguiente tramo de la A-33, que se encuentra en proyecto.

Para la ejecución se construirá un viaducto, 14 pasos superiores y 8 pasos inferiores. Además se dispondrán las obras de drenaje transversal necesarias para dar continuidad a las vaguadas interceptadas por la autovía.

Como medidas de integración ambiental de la obra destacan la reposición de cañadas reales interceptadas, como la cañada de Albacete a Murcia, cordel de la Rosa, cordel de las Sanguijuelas y cañada de Los Serranos.

Además, prevé la revegetación de los taludes de terraplenes y desmontes empleando tierra vegetal e hidrosiembra; la plantación de especies autóctonas de árboles y arbustos; la implantación de pasos específicos para la fauna y adaptación de obras de drenaje para permitir el paso de la pequeña fauna.

Por último, prevé la instalación de pantallas contra el ruido en zonas cercanas a la población, así como el seguimiento arqueológico de la obras, y la interrupción de los trabajos de voladuras entre enero y agosto.

Cabe recordar que en los últimos tres años también se han puesto en servicio otros dos tramos de la A-33 (Blanca-Abarán y Abarán-Jumilla). En total, 30 kilómetros, en los que se han invertido más de 100 millones de euros.

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