Los guardias civiles piden que se depuren responsabilidades en el incidente con Bascuñana

La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), que engloba a todas las escalas y empleos del Cuerpo, ha pedido a través de un comunicado que se depuren responsabilidades en el «incidente que tuvo el delegado del Gobierno en Murcia, Joaquín Bascuñana, con miembros de la Guardia Civil cuando realizaban su servicio cotidiano» en la madrugada del pasado 21 de septiembre. En el informe, redactado por los agentes, indica que Bascuñana se negó a identificarse en un control de alcoholemia situado a las afueras de Molina de Segura.

En la nota, la AEGC explica que como asociación profesional, «estamos seguros que la actuación de nuestros compañeros en Murcia se hizo siguiendo las pautas dadas para ese tipo de intervención y que los guardias civiles que se encontraban en dicho control no hicieron nada más que cumplir con la labor encomendada, entre la que se encuentra la identificación de los ocupantes de los vehículos».

Asimismo, recuerdan que si el delegado del Gobierno se negó a identificarse mediante la exhibición del DNI, «está incumpliendo la normativa vigente para todos los ciudadanos, sea de la clase que sea».

«En efecto -prosigue la nota- los agentes tienen obligación de saber quién es el delegado del Gobierno, pero no tienen por qué conocer los rasgos de su cara, por ese motivo se le pidió que se identificase con el documento hecho al efecto, en otro orden de cosas y siempre a tenor de lo publicado en la prensa, nos parece una salida de tono por parte de este dirigente político el exigir se le diesen novedades del servicio, cuando él se ha negado a identificarse para poder comprobar la veracidad de su persona».

Finalmente aseguran que apoyan las intervenciones de los agentes que informaron del incidente «y concretamente en esta intervención con la información que obra en nuestro poder, estamos totalmente de acuerdo en defender la actuación de los compañeros de Murcia».

Al mismo tiempo piden que la Dirección General de la Guardia Civil realice una investigación «concienzuda» de los hechos, llegando hasta el final de los mismos «y si es necesario pedir responsabilidades por algún tipo de conducta, que lo haga».