La defensa de Peñalver considera «errática» la actuación del fiscal

La defensa de Joaquín Peñalver, el exjefe de Planeamiento del ayuntamiento de Murcia imputado en el caso Umbra, sobre presunta corrupción urbanística, calificó de "errático y mutante" el comportamiento del fiscal, al que acusa, además, de haber "parcelado" el asunto para que recayera en dos Juzgados distintos.

Estas consideraciones se recogen en el recurso de apelación que los abogados José Pardo Geijo y Raúl Pardo-Geijo Ruiz han formulado contra el auto del Juzgado de Instrucción número Ocho de Murcia que desestimó su petición de que la causa pasara al Juzgado número Cuatro.

Los letrados vienen manteniendo que el juez competente para investigar los hechos es este último, por ser el primero que comenzó a entender de la supuesta corrupción en el conocido por caso Barraca.

Para Pardo Geijo y Pardo-Geijo Ruiz, el fiscal dividió las denuncias que fue recibiendo sobre el asunto "a voluntad, originando así la formación de dos procesos, con dos instructores".

Y añade que de haberse actuado con la precisión técnica procesal exigible y no por otros motivos, "debiera haber sido y sigue debiendo serlo solo uno".

Así mismo afirman que la fiscalía tenía que haber enviado al Juzgado de Instrucción número Cuatro tanto la denuncia del Colegio de Arquitectos como la del PSOE, por ser aquél el que primero abrió diligencias para el esclarecimiento de los hechos.

El recurso señala que consentir este tipo de actuaciones sería tanto como participar de la conducta atribuida a Baltasar Garzón, al que se acusaba de dividir los casos en varias piezas separadas "para guardarlas prudentemente e ir sacándolas a la luz en el momento en que cada una de ellas tuviera el mayor alcance político o social".

El recurso se refiere también al reciente auto dictado por el magistrado del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia que acordó el sobreseimiento de la causa abierta, entre otros, contra el exalcalde de Puerto Lumbreras Pedro Antonio Sánchez.

En ese auto, se recoge en la apelación de Peñalver, el instructor dice que "una vez más hemos de lamentar el empleo del Derecho Penal para montar quiméricas acusaciones en asuntos que han de tener solución en la vía contencioso-administrativa; una vez más hemos de lamentar que el Derecho Penal se transforme en la prolongación de la política por otros medios".