Secciones
Servicios
Destacamos
CÉSAR GARCÍA GRANERO
Miércoles, 3 de octubre 2007, 02:42
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
Juanete es un caso único en España. A sus 87 años está en un tris de celebrar su cuarto centenario en vida. Por eso es especial. No hay muchos que puedan decir lo mismo. Será con el Murcia, con el que jugó en los años 50 y con el que ganó popularidad después de chutar un penalti a medio camino. «El chaparrón había sido de aúpa. Había un gran charco en el área. Lancé y el balón no llegó a la portería, se quedó parado», explica. Es una anécdota, uno de esos borrones simpáticos, que no hacen daño, de una carrera florida. Así lo atestigua una pared del salón constelada de fotos en blanco y negro de su etapa como futbolista. Antes que en el Murcia estuvo en el Madrid de Santiago Bernabéu, el Deportivo y el Nástic. También con otros, pero con estos tres ha celebrado ya un centenario y ahora tiene otro a las puertas:
- No sé si me llamarán -dice.
Probablemente sí. El Murcia ya lo llamó en la inauguración del nuevo estadio y él es uno de los personajes del siglo del Murcia. En la lista de homenajeados los habrá más famosos que él, pero no con una colección de centenarios semejante. Juan García Juanete fue interior izquierdo, llevó siempre el 10 y exhibe una asombrosa lucidez octogenaria. Además, se está precaviendo contras las lagunas de la edad. «Yo mismo, poquito a poco, escribo mi historia. No es por afán de protagonismo», matiza mientras enseña los tres cuadernos que lleva con fogonazos de sus recuerdos.
El más especial, sin duda, cuando Santiago Bernabéu la abrió las puertas del Madrid. «Me dio 5.000 pesetas, me hizo una ficha de 15.000 y me puso un sueldo de 500».
- Nada comparado con ahora.
- Sí, sí. Entonces era un capital -aclara.
La del Murcia no fue precisamente su mejor época. Se pegó un trastazo de altura el día que volcó el autobús en el que volvía el equipo de La Coruña. «Cayó por un terraplén y fue a parar al río en Piedrahita. El agua nos salvó».
Se rompió un hombro, se retiró en el Gandía y fracasó luego con un negocio ruinoso como transportista y se hizo entrenador. Ahora está apartado del fútbol, pero aún no ha cerrado la libreta con su historia como jugador: dentro de poco le añadirá un nuevo centenario.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.