Más de 1.800 viajeros diarios en la Región se verán afectados por el corte de vías de más de tres años
La Plataforma en Defensa del Ferrocarril se reúne con Adif y hace un último intento para que cambie de planes y ejecute las obras por tramos
La Región de Murcia sufre desde primera hora de este viernes por la mañana uno de los mayores cortes ferroviarios que se han programado en España con motivo de las obras de la red de alta velocidad. Tanto en duración como en kilómetros, y también por el número de personas afectadas: más de 1.800 viajeros diarios -principalmente estudiantes, trabajadores y jubilados- tendrán que utilizar el servicio de autobuses desplegado por Renfe a partir de las 6.30 horas para sustituir los trenes de Cercanías de la línea Murcia-Lorca-Águilas. El corte ferroviario durará como mínimo tres años y medio. En febrero también se interrumpirá parte de la línea Cartagena-Chinchilla y un tramo se realizará con transbordos en autobús para los trenes con Madrid.
La Plataforma en Defensa del Ferrocarril, diversos colectivos, la patronal Croem y todos los partidos políticos, excepto el PSOE, han expresado su rechazo a esta medida de Adif y han planteando alternativas que la empresa estatal no considera viables.
Cortes similares se produjeron en Granada, que estuvo sin ferrocarril cuatro años; los accesos a Almería también quedaron cortados 30 meses; mientras que Barcelona estuvo sin trenes de Cercanías tres meses, entre otros.
El tráfico ferroviario se mantiene en la línea Murcia-Alicante, que incluye los AVE de Orihuela. También sigue la línea Cartagena-Chinchilla-Madrid, aunque se verá afectada a principios de 2022.
Reunión en Madrid
Los miembros de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril agotaron este jueves el último cartucho que les quedaba para tratar de convencer a Adif de que no corte de forma integral la línea, y que en su lugar ejecute por tramos las obras de alta velocidad con Almería y el soterramiento de las vías en Barriomar y Nonduermas, todas incluidas en el Corredor Mediterráneo. La delegación vecinal se reunió en Madrid con el director general de Adif, Juan Pablo Villanueva, quien les explicó los motivos del cierre de la línea durante más de tres años. Villanueva no atendió ninguna de las reivindicaciones, y solo accedió a ampliar el dispositivo de autobuses si fuese necesario.
En el horizonte del año 2025, Adif tiene programada la reapertura de la línea en tres fases, conforme finalicen las obras: primero pondrá en servicio el soterramiento entre Murcia y Nonduermas; posteriormente el trayecto hasta Lorca San Diego, y finalmente el tramo con Águilas.
Adif informó de que no piensa cambiar sus planes, y sostiene que no se puede ejecutar las obras por tramos. La Plataforma considera que sí sería posible combinando transbordos de trenes y autobuses, y pone como ejemplo la estación de Alcantarilla: trayecto en autobús con Murcia, y después trenes hacia Lorca y Águilas. Y así en cada estación del recorrido.
El Ministerio de Transportes argumenta que si no se corta el servicio las obras se prolongarían diez años, a la vez que se perderían fondos 'Next Generation'. En la planificación anterior, Adif propuso simultanear las obras y el paso de los trenes, con un plazo de ejecución de tres años. Aquella propuesta técnica no es ahora viable, según la empresa. El corte de la línea coincide con la huelga del Sindicato de Maquinistas que comenzó ayer y continuará hoy, así como los días 4, 5, 8, 9, 11 y 12.
Estaciones urbanas
Exceptuando la protesta de los maquinistas, el corte de la línea afectará a 16 trenes de Cercanías por cada sentido, junto al Intercity Lorca-Barcelona. El servicio ferroviario tiene catorce paradas a lo largo de su recorrido, aunque no todas corresponden a las estaciones, ya que se han habilitado paradas urbanas en siete poblaciones.
Varios ayuntamientos afectados han acordado con Renfe modificar las parada «para dar mayor facilidad a los viajeros», dijo Renfe. Los autobuses pararán en el camino de los Romanos de Alcantarilla; en Librilla lo harán en la avenida de las Fuerzas Armadas; mientras que en La Hoya pararán en la carretera del Hinojar. Asimismo, los viajeros con origen y destino en Lorca tomarán los autobuses en la avenida de Europa y en la calle José Espinosa Pomares, según se trate de las estaciones de San Diego o de Sutullena. En Almendricos, la parada estará en la avenida de Águilas; mientras que en Jaravía lo hará en el barrio de Jaravía.
La Plataforma en Defensa del Ferrocarril hizo ayer un último intento para que Adif cambie de planes y corte la vía por tramos
Renfe comunica, asimismo, que los precios serán los mismos que se pagan actualmente, manteniendo el sistema de abonos. Por otra parte, los autobuses que prestarán servicio no son accesibles para viajeros con silla de ruedas. Tampoco se admitirán billetes con tarifa de grupo, y no estará permitido el transporte de animales de compañía ni de bicicletas.
Renfe informa igualmente de que los tiempos de viaje en autobús serán superiores a los habituales del servicio por ferrocarril, con unos incrementos de tiempo que oscilarán entre 20 y 40 minutos. Por ejemplo, el trayecto por carretera de las 6.30 horas de la mañana entre Murcia y Lorca Sutullena durará 1 hora y 24 minutos. Habrá servicios directos y semidirectos, estos últimos con paradas en todas las estaciones o puntos acordados. En el subtramo entre Lorca y Águilas, los viajeros tendrán que cambiar de autobús. Hay tres servicios diarios.
A partir del año 2025,el Ministerio prevé restablecer el servicioen tres fases, empezando por el soterramiento
En una segunda fase, Adif también cortará en febrero parte de la línea Cartagena-Chinchilla, estableciendo transbordos en autobuses. Habilitará una estación entre Cieza y Alcantarilla -todavía por determinar- para hacer los transbordos del ferrocarril a la carretera, con origen y destino en Murcia y Cartagena. Mantendrá los dos trenes diarios de larga distancia con Madrid, a la vez que reforzará los AVE desde Orihuela.
Protesta de los empresarios
La patronal Croem entiende que sea necesario limitar el tránsito de Cercanías para ejecutar las obras, pero considera inaceptable «eliminar este servicio sin que exista una alternativa adecuada».
En un comunicado solicitó que se estudien «más opciones a las planteadas hasta ahora por Adif y que condenan a los usuarios. Todo ello sin saber además si el inicio de las obras es inmediato». Cree necesario que el Gobierno central y el autonómico «establezcan líneas de trabajo y consenso». «Ni los empresarios ni la sociedad en su conjunto merecen el espectáculo continuo a costa de las infraestructuras, sobre todo las ferroviarias, que en esta región son impropias del siglo XXI».