Eduardo Cortils: «Nos hemos acostumbrado a vivir cada vez peor»
El fotógrafo murciano expone en el Centro de Arte Caja de Burgos sus impactantes imágenes de paisajes contaminados, como el Mar Menor
Desde su casa en la comarca burgalesa de Las Merindades, Eduardo Cortils (San Pedro del Pinatar, 1963) contempla un campo de girasoles en la extensa llanura castellana. El fotógrafo murciano se define como un «refugiado climático» que hace tres años se vio empujado a buscar una latitud menos asfixiante. Vivía en Sierra Espuña rodeado de altísimos pinos que fueron cayendo derrotados por la sequía. Entonces decidió emigrar y poner en marcha el proyecto artístico que se expone hasta el 24 de febrero de 2021 en el Centro de Arte Caja de Burgos (CAB): 'Un-Steady. 'n' problemas ambientales'.
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Las veinte fotografías «tratan sobre algunos de los problemas ambientales, que van desde el calentamiento global a la deforestación, de la crisis humanitaria a la pandemia, de la contaminación de acuíferos a la industria agrícola, de la España vaciada al urbanismo salvaje», explica a LA VERDAD un artista preocupado por la destrucción de la naturaleza y enamorado de las aves.
Tres de las fotografías que integran 'Un-Steady. 'n' problemas ambientales', realizadas en gran formato sobre papel acuarela Hahnemüle William Turner, han sido adquiridas por la Fundación Caja de Burgos para su colección. Ylas tres reflejan desastres naturales que complican la vida en la Región de Murcia: la contaminación del Mar Menor, en su peor momento tras el paso arrasador de la DANA; las instalaciones industriales abandonadas de Española del Zinc, en Cartagena; y el humedal de Lo Poyo, afectado por la acumulación de vertidos tóxicos procedentes de la Sierra Minera.
El artista se define como un «refugiado climático» que hace tres años se vi obligado a buscar una latitud menos asfixiante en la comarca burgalesa de Las Merindades
«Nos hemos acostumbrado a vivir cada vez peor y a enfermar por causas cotidianas y tremendamente normalizadas, como las emisiones de gases de efecto invernadero o sencillamente por lo que comemos o fabricamos siempre con prisa. Malvivimos rodeados de 'n' daños ambientales creados por una falsa idea de progreso. Por un problema de salud humana hemos detenido la marcha. Nos encontramos hoy frente al primer frenazo de la cultura del beneficio y su estrategia, el crecimiento sostenido», reflexiona el fotógrafo.
Eduardo Cortils, que ha expuesto en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y el Museo Español de Arte Contemporáneo, abordó la documentación de desastres ambientales después de un exitoso periplo de seis años con 'Antropoceno, arte y biodiversidad periurbana', donde reunió imágenes de fauna salvaje en la tierra de nadie que marca los límites entre el campo y las zonas urbanas e industriales.
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