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Alberto Aguirre de Cárcer, durante su discurso en la gala de Los Mejores de 'La Verdad'.
La ejemplaridad

La ejemplaridad

Alberto Aguirre de Cárcer destacó la brillantez de las trayectorias de los premiados y renovó el exclusivo compromiso de 'La Verdad' con sus lectores

LV

Lunes, 18 de junio 2018, 19:10

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La elección de los premiados de esta edición de Los Mejores no es casualidad. Todos ellos, cada uno en su ámbito, son, como señaló en su discurso el director de La Verdad, Alberto Aguirre de Cárcer, ejemplo para todos los murcianos. Instituciones y personas que han destacado por una actitud y una excelencia mantenidas a lo largo del tiempo, «una extensa trayectoria» y un compromiso ejecutado «con tesón e independencia». En estos términos se pronunció Aguirre de Cárcer, quien recordó a los filósofos de la Grecia clásica y su idea de que la excelencia nunca es un accidente. «Aristóteles -mencionó el director- decía que siempre es resultado de gran intención, esfuerzo sincero y ejecución inteligente, y la Redacción de La Verdad tiene presentes estas reflexiones cuando elige las instituciones y personas que son merecedoras de sus premios, Los Mejores».

Aguirre de Cárcer apuntó que es precisamente en estos momentos en que prácticamente todo está en revisión, cuando «es más necesario que nunca destacar la ejemplaridad en todos los ámbitos de nuestra vida pública, huérfana de referentes personales e institucionales». Por tanto, bajo este prisma y con la intención de reconocer precisamente aquello que es digno de singular aprecio y estimación, La Verdad ha querido esta vez distinguir públicamente a la Universidad de Murcia, a la asociación Pro Música, al artista Isidoro Valcárcel Medina, al marchador Miguel Ángel López y al dibujante Manuel Sánchez Baena. Todos ellos, según Aguirre de Cárcer, acreditan esos tres requisitos planteados por el sabio de Estagira: intención, esfuerzo y ejecución inteligente. «Debo decir que en todos los premiados esta noche, la excelencia no ha sido consecuencia de una búsqueda de reconocimiento público. Más bien al contrario. Es fruto de una actitud mantenida a lo largo de una extensa trayectoria y de un compromiso profundo ejecutado con tesón e independencia». Para los periódicos con vocación de servicio público, y comprometidos exclusivamente con sus lectores, como es el caso de La Verdad, «tenemos en ellos un espejo donde mirarnos».

Mantener y redoblar ese compromiso de un medio de comunicación que cree en su función como servicio público en tiempos donde los vientos soplan en contra también es digno de reconocimiento. Y en los últimos años, «en medio de la tormenta perfecta de la crisis», Aguirre de Cárcer reafirmó ante autoridades e invitados que La Verdad ha hecho «un esfuerzo hercúleo» para no perder de vista en mitad de este temporal «el norte de la excelencia y la calidad que nos hizo el medio impreso de referencia en la Región». No obstante, «todo es susceptible de mejora y renovación, también en el periodismo, salvo los principios y los valores».

En este punto, Aguirre de Cárcer citó al maestro de periodistas, el colombiano Gabriel García Márquez, que dijo una vez que «la ética no es una condición ocasional, sino que debe acompañar siempre al periodismo como el zumbido al moscardón». Ya sea en papel o en soporte digital, La Verdad está comprometida con la tarea de crear conciencia ciudadana, vertebrar y cohesionar los distintos territorios de la Región, generar señas de identidad e intereses comunes, dar voz a la sociedad civil, respaldar la cultura y la educación, y denunciar los abusos de poder o sus comportamientos alejados de la legalidad. «Llevamos una década hablando del fin de los periódicos impresos por el avance de internet, pero la realidad es que los diarios de papel que buscan la excelencia, tienen sólidos valores y están pegados al interés de sus lectores tienen una larga vida por delante». En España hay más de tres millones de personas que compran en un punto de venta o reciben en sus casas un diario de pago cada día, personas que, según el director de La Verdad, «necesitan estar bien informadas y formarse una conciencia crítica con contenidos veraces, rigurosos y contextualizados», en un formato que jerarquiza y ordena los principales acontecimientos sociales, políticos, económicos, culturales y deportivos que depara la actualidad. «Para navegar lejos, no hay mejor nave que un libro», continuó Aguirre de Cárcer. «Pero para entender lo que vemos durante el viaje aún no se ha inventado nada mejor que un diario de papel».

En esta era digital, La Verdad sigue en vanguardia. En el ADN del grupo, reiteró el director, «está inoculado el virus del cambio continuo y por eso fuimos pioneros del salto al mundo digital en la prensa regional» y la prueba es que laverdad.es es hoy uno de los portales con mayor número de usuarios en España.

En aras a ese espíritu de renovación, La Verdad está trabajando en un nuevo producto digital para PCs, tablets y teléfonos inteligentes con contenidos exclusivos y una forma personalizada de navegar.

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