Por un error en un experimento se les administró una cantidad de cafeína equivalente a 300 cafés

Alex Rossetto y Luke Parkin se presentaron como voluntarios a un experimento de la Universidad de Northumbria (Inglaterra) sobre los efectos de la cafeína en el deporte. Ambos llevaban años practicando deporte casi a diario y por eso eran los candidatos ideales. Sin embargo, ninguno de ellos sospechaba que ese mismo dato acabaría salvándoles la vida ese día cuando los encargados de llevar a cabo el experimento, estudiantes de segundo año, por error les administraron una dosis cien veces superior a la requerida.

La intención era medir los cambios del organismo al realizar ejercicio físico con una dosis de 0'3 gramos de cafeína, el equivalente a tres tazas de café, pero los estudiantes ingirieron 30.7 y 32 gramos cada uno. Fueron trasladados al hospital al colapsar en pocos instantes, donde se les ingresó de inmediato en Cuidados Intensivos en un estado «entre la vida y la muerte» según las declaraciones de los médicos en el proceso judicial.

La Universidad ha sido condenada a pagar 400.000 libras en concepto de indemnización

Luke permaneció 2 días ingresado en el hospital y perdió 10 kilogramos durante el proceso. Alex, por su parte, tardó más en eliminar la cafeína totalmente del organismo y permaneció 6 días en el hospital, perdiendo 12 kilogramos en total y manifestando pérdida de memoria a corto plazo.

El incidente tuvo lugar el 25 de marzo de 2015 y el juicio se ha celebrado este mes de enero de 2017. Durante el mismo se han explicado los hechos y el abogado de los estudiantes ha presentado documentación que muestra que se han producido muertes por dosis de cafeína en torno a los 18 gramos, mucho menos de lo que Alex y Luke consumieron. Los médicos han explicado que el hecho de que fuesen asiduos deportistas, jóvenes y, a consecuencia de esto, con un metabolismo más rápido que el de la mayoría de personas les ha salvado la vida.

El juez ha agradecido en todo momento durante el proceso la presencia de muchos representantes por parte de la Universidad, además de los estudiantes que administraron la dosis por error y los tutores responsables del experimento, que no se encontraban presentes en el momento de realizar el mismo. Además ha reiterado que la Universidad ha colaborado en todo momento a la investigación y tanto durante el proceso como los días posteriores al incidente, manifestaron sus más profundas disculpas y preocupación por el estado de salud de los afectados.

Sin embargo le ha impuesto una sanción de 400.000 libras, además de, por supuesto, pagar los gastos médicos de los estudiantes.