Las Acelgas II, un escándalo de barato
El local mantiene parte de la esencia del mítico bar de Espinardo, pero con un servicio más descuidado y un ambiente muy ruidoso
La cocina de Las Acelgas II prepara platos tradicionales caseros bien hechos y a un precio casi sin competencia. Los trabajadores del mítico bar de Espinardo tomaron el testigo de los anteriores propietarios, que marcaron durante años el rumbo del tapeo en el barrio murciano. En la sala, el tema es más complicado. Falta de personal, muchos clientes esperando a que terminen las mesas de comer, una insonorización insuficiente o el simple hecho de ir volando sin prestar la más mínima atención a los detalles de un servicio en condiciones. Los clientes de Las Acelgas II vienen por los platos tradicionales y, sobre todo, por el precio. Lo que deja al servicio bastante por debajo.
La carta tiene tachados con rotulador negro todos los precios. Imagino que hartos de ir modificando precios según las subidas de la materia prima, decidieron tomar el camino de en medio. Pero da igual, porque aquí no hay riesgo de pedir y luego llevarse un susto con la factura. Sangre frita, alcachofas con jamón, pipirrana, acelgas fritas con sardinas, manitas de cerdo, lengua en salsa, michirones, caldo con pelotas o rabo de toro son algunas de las estrellas de Las Acelgas II. Los viernes, sábados y domingos por la mañana la cocina se remanga y pone pulpo roquero, caballitos, almejas a la marinera o gambas fritas para tomar en el aperitivo. Todos los martes y miércoles, arroz y conejo con caracoles como plato de menú. Y los jueves, asado de carrillera.
Las Acelgas II (Murcia)
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Dirección: C/ Mayor, 47 (Espinardo)
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Teléfono: 968 830 012
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Horario: De 9.00 a 17.00 y de 20.30 a 00.00 horas. Cierra los lunes.
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Precio medio: Unos 15 euros por persona.
El plato que más me gusta de toda la comanda es el de los caracoles en salsa. Es cierto que como son difíciles de encontrar, los pillo con ganas, pero además, es que están muy buenos. En la salsa encuentro un punto de curri muy agradable. Lacón con taquitos de queso, pimienta, aceite y limón, un par de tortillas bien cuajadas de ajos y de patatas y crujientes el calamar a la andaluza acompañado de pimiento verde frito.
El bacalao rebozado no lo hacen al momento, como algunas tapas más que esperan en la vitrina, por lo que casi prefiero terminar con unos montaditos de morcilla, chorizo, sobrasada y tocino. Muy ricos.
En resumen, Las Acelgas II es un bar escandalosamente barato con una buena cocina que, con un poco de cuidado a la hora de recoger y poner platos y más tranquilidad para que los clientes que pasen al comedor se sientan un poco más atendidos, sería una referencia en la capital. Porque cocina y precio tienen para ello.
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