Cartagena

Solo cinco jugadores del equipo, el 21%, tienen contrato más allá del 30 de junio

La columna vertebral del equipo es libre desde enero para negociar sus próximos destinos la próxima temporada, al terminar contratos el 30 de junio o bien regresar a sus equipos de origen como cedidos. Hasta un 79% del vestuario que rema por mantener la categoría con 10 puntos de 12 posible sen 2024 quedarán oficialmente desvinculados del club pase lo que pase tras la jornada 42.

Tomás Mejías, Pedro Alcalá, Kiko Olivas, Jairo Izquierdo, Damián Musto, Jony Álamo, Andy Rodríguez, Mikel Rico, Alfredo Ortuño e Iván Ayllón acabarán contrato el 30 de junio, salvo que el Cartagena avance alguna renovación antes, algo que a día de hoy parece complicado plantear porque se desconoce si se competirá en Segunda División o en Primera RFEF.

En cuanto a los siete cedidos de la plantilla, todos excepto el portero Raúl Lizoain tiene al menos una temporada más asegurada en el fútbol profesional paese lo que pase en el Efesé. El lateral Diego Moreno pertenece al Osasuna hasta 2026; el defensa José Fontán y el pivote Tomás Alarcón forman oficialmente parte hasta 2025 del Celta y del Cádiz, respectivamente; y al extremo Arnau Ortiz le quedarán dos temporadas en el Girona de Míchel.

Hay dos casos muy concretos que desconocen a ciencia cierta cuál será su futuro más allá del 30 de junio. El lateral Arnau Solá tiene un contrato muy largo en el Almería hasta 2027 y no sería descabellado pensar, incluso, en que encuentre un hueco cuando se confirme el probable descenso del cuadro indálico. Dos temporadas más le restan a Darío Poveda en el Getafe. Es cierto que lo normal es que el delantero siga cedido. Allí no cuentan con él y ya ha estado prestado en cinco ocasiones en apenas dos años: en el Huesca, el ibiza, el Leganés y el Cartagena por partida doble.

De este modo, solo cinco jugadores de la actual plantilla del Cartagena, el 21%, tienen contrato en vigor para la próxima temporada: son el central Gonzalo Verdú (2025), el lateral Iván Calero (2025), el medio Luis Muñoz (2025), el atacante Juan Carlos Real (2026) y el ariete Narváez (2025). También Isak Jansson (2025, más dos opcionales), salvo que se ejecute una venta.

El entrenador que más tiempo ha pasado junto a Adrián Sanmartín, Pepe Aguilar, habló ayer de «comportamientos» para referirse a la fulminante rescisión de contrato del cartagenero en el último día del mercado. El técnico del Cartagena B apenas contó con el atacante de La Puyola, a pesar de las necesidades de la plantilla en esa parcela del campo.

«Son circunstancias que nada se acogen a caprichos, sino a comportamientos. Yo a Adrián Sanmartín, el cual debutó conmigo en Tercera [y en Segunda RFEF] siendo un crío, le deseo lo mejor. Le deseo lo mejor de corazón. Pero el club está muy, muy, muy por encima de cuales sean las personas que lo conforman, jugadores, entrenador, etc. El club por encima».

Así se explicó ayer Pepe Aguilar en la rueda de prensa, al término del empate entre el Cartagena B y el UCAM Murcia, ya sin Sanmartín en el club. Tres días después de concretarse su marcha al filial del Elche, el Cartagena aún no se ha pronunciado oficialmente al respecto a través de un comunicado o en redes sociales. La semana anterior, el de La Puyola ni siquiera entró en las convocatorias del filial y el juvenil, según aseguró entonces el club, por decisión técnica.

Sanmartín, de 18 años, saltó a la palestra en 2022 cuando debutó en Segunda División en el primer equipo y poco después entró en la prelista de la selección española sub-18. Tenía contrato hasta junio de 2025.