Paco Belmonte: «Hablo muy claro y eso a veces puede molestar, pero es mi forma de ser»

–Lo primero que tengo que hacer es preguntarle por la salida de Rebeca García. ¿Por qué se ha marchado del club la directora general desde el ascenso?

–Bueno, al final yo creo que son un poco... no sé si ciclos ¿no? Sabéis que ella llegó con el cambio de categoría, al final ha vivido junto a nosotros la transformación de Segunda B a Segunda y lo cierto es que todo el mundo tiene metas personales y profesionales. No es hablar de finalización de ciclos ni de cambio de ciclos, pero bueno, es una decisión personal, por un lado, y un poco consensuada conmigo. Además de nuestra relación y de nuestra amistad solo puedo darle la gracias por su trabajo, que ha sido excelente. Nos ha venido genial su trabajo y solo me queda desearle mucha suerte en su nueva etapa.

–¿Ha sido una ruptura amistosa o traumática?

–Rebeca y yo nos conocemos desde hace mucho tiempo y ella tiene su personalidad y yo la mía, pero ha sido una ruptura amistosa. No hay ningún tipo de problema. Para nada.

–La idea es que usted asuma las funciones que tenía ella, ¿no?

–De aquí al final de temporada lo que vamos a hacer es un gabinete de dirección para ver las funciones que asumía Rebeca, repartirlas entre la organización que tenemos actualmente y tirar del jurídico Andrés López y su equipo de trabajo. Estamos en el tercer año de Segunda y ya todo está como muy controlado y muy medido. Un equipo de fútbol es una empresa que tiene su maquinaria engrasada y no hay grandes problemas. No va a entrar ninguna persona de aquí al final de temporada.

–¿Está contento con el resultado final del mercado de invierno que cerró este martes?

–Han pasado muy pocos días desde la finalización del mercado, pero yo analizo las entradas y las salidas y contento sí que estoy. Evidentemente, estamos atravesando un mal momento en cuanto al resultado y el juego. Pero yo creo que esto no viene relacionado con el mercado de invierno, ya que lo venimos arrastrando de antes. Si miramos los cinco nombres que han salido no eran jugadores determinantes en los 32 puntos que hicimos en la primera vuelta y creo que hemos mejorado en cuanto a calidad y cantidad con los seis futbolistas que han llegado. Nuestra idea no era hacer once operaciones. Eso es cierto. El tiempo dirá si esta estrategia ha sido acertada o no.

–¿El hecho de que hayan venido seis cedidos en enero ha sido algo buscado?

–Yo lo veo más como una oportunidad. Hay gente que no lo ve tan claro y que detesta esas oportunidades de mercado que surgen en enero, pero nosotros lo vemos diferente. Tenemos que identificar quiénes somos y saber dónde podemos llegar. Hay jugadores que han firmado en otros equipos que a nosotros también nos hubiera gustado firmar. Pero somos el Cartagena y al final todos han tenido que venir cedidos. Entre Martos, Miguelón, Pêpê, Ureña, Darío Poveda y Eteki pueden ganar cerca de cinco millones de euros en sus clubes de propiedad y el Cartagena los ha firmado en una novena parte. Hablamos de jugadores con sueldos que nosotros nunca podríamos asumir. Nos pueden ayudar estos meses y eso es lo que creemos que va a suceder.

–¿No le falta al Cartagena un poco de estabilidad? Hablo de que los jugadores pasen más tiempo aquí y no haya tantos cambios en la plantilla cada seis meses.

–Bueno, vamos a ver si podemos ser capaces de mantener un bloque de 10 o 12 futbolistas para el año que viene. A mí me gustaría el poder darle continuidad a mucha gente, sobre todo cuando vienes de un año en el que has sido el noveno clasificado. Y ahora quedan 17 jornadas y eres el noveno también, pese a la mala racha de las últimas jornadas. Para la temporada que viene tienen contrato Marc Martínez, Escandell, Calero, Alcalá, Datkovic, Kiko Olivas, Jairo, Ferreiro, Jansson y Ortuño. Son diez jugadores. Está bien. Somos un equipo que firmamos un perfil de futbolista muy determinado. Es verdad que nosotros algunas veces también nos hemos planteado imitar lo que hace el Mirandés.

–¿Y por qué no lo hacen?

–Traer a ocho chavales jóvenes a ver si dan rendimiento y ver si podemos vender jugadores suena tentador. Sabemos que en el momento que tú vendas dos jugadores y ganes 6 millones de euros ya estás creciendo como proyecto. Pero soy de los que piensa que si metemos a ocho chavales jóvenes en el Cartagonova nos podemos llevar un susto y descender de categoría. Hay que tener mucho cuidado. Entonces, hay que equilibrarlo todo. Cada año cometemos errores y hay que intentar minimizarlos, pero no hay una metodología estricta que diga que el Cartagena va a planificar el año que viene igual que este. Somos los primeros que detectamos qué jugador falla y pensamos qué solución podemos poner a los errores que cometemos.

–¿Qué le ha pasado al equipo en los dos últimos meses?

–Creo que cuando íbamos bien fue porque hicimos coincidir en la alineación a muchos jugadores en su mejor momento y ahora tenemos a muchos jugadores que están coincidiendo en el campo sin estar en su mejor momento. Esa es la clave y creo que no hemos dado con la tecla para resolver este problema.

–¿Y por qué se han caído esos jugadores que andaban tan bien y han pasado a estar tan mal?

–El fútbol es un estado anímico y físico, pero sobre todo anímico. En diez meses tú no estás bien siempre, ni en casa, ni con los amigos, ni en nada... Tú tienes altibajos y nosotros tenemos que identificar esos altibajos. Estamos alargando demasiado tiempo una mala situación del equipo y eso es lo que hay que corregir. Creo que las piezas nuevas nos van a venir bien, pero mi diagnóstico, que no tiene por qué ser el bueno, está claro: hemos juntado a mucha gente que cuando ha habido que jugar un partido de fútbol no ha estado en su mejor momento.

–Últimamente a Luis Carrión le recuerdan cada día lo que le pasó con el Numancia, en aquella segunda vuelta en la que pasó de estar en la zona de promoción de ascenso a bajar a Segunda B.

–Supongo que al hombre no le hará ninguna gracia, porque lo que le pasó con el Numancia nunca más le ha pasado. Yo no tengo ninguna duda de que Luis [Carrión] está sumamente capacitado para sacar esto y que además tiene argumentos futbolísticos para hacerlo. No son comparables las plantillas que tenía en el Numancia con esta del Cartagena. Hay un matiz importante, además. A los jugadores que hemos firmado este mes de enero los hemos convencido argumentándoles que vienen para intentar estar arriba. Yo creo que el míster está tranquilo y todos tenemos que estar tranquilos. Si nos ponemos nerviosos estamos jodidos. Vamos a ver dónde estamos a falta de cinco jornadas, porque seguro que habrá cosas en juego.

–Si el equipo termina en mitad de la tabla, ¿apostará por la continuidad de Luis Carrión o en junio acabará su ciclo en el Efesé?

–No sé lo que piensa Luis [Carrión] al respecto. Las notas tienen que ser en junio, pero la realidad es que él apostó fuerte el pasado verano, quedándose aquí después de hacer un gran año. Y deduzco que él también tendrá que argumentar y pensar sobre su futuro al acabar esta temporada. Luis no es un tipo de tomar decisiones en febrero ni en marzo y al acabar la liga nos sentaremos con él y decidiremos.

–¿Qué es lo que más le gusta de su forma de trabajar?

–Su modelo de juego me encanta y a mí me parece genial que lo lleve hasta las últimas consecuencias, porque yo en mi manera de gestionar el club también llevo las cosas hasta las últimas consecuencias. Es verdad que los equipos se tienen que adecuar a determinadas situaciones y yo creo que eso Luis [Carrión] lo ha hecho en determinados momentos, quizás este año menos que el año pasado. Pero este sistema nos gusta a todos y es el que nos va a sacar de este momento complicado en el que estamos.

–¿No le parece que se equivocó hace un mes en aquella entrevista concedida a '7 Región de Murcia' cuando hizo público que habían rechazado una oferta de 1,5 millones por Armando Sadiku? Yo creo que le metió al jugador una presión innecesaria.

–Como cada uno interpretara mis palabras, es cosa de cada uno. ¿Si me he equivocado o no en el tema de Sadiku? Respeto al máximo a quien lo piense. Pero lo explico otra vez. Yo solo quise anunciar que había una oferta de un club japonés por Sadiku y que podía salir. La primera llegó y el futbolista no se fue a Japón por determinadas circunstancias. La segunda oferta, la de Arabia Saudí, la comenté en rueda de prensa. Le llegó al futbolista, pero nunca le llegó al club. ¿Le he metido presión? Si me dijeras que a Sadiku le han llegado ocho balones de gol a puerta vacía y los ha fallado todos, podría pensarlo. Pero no ha tenido ni una sola ocasión de gol en este mes de enero. He hablado con él de todo esto y Sadiku es un tipo que disfruta jugando con presión.

–¿Habla usted demasiado o lo que pasa es que habla demasiado claro?

–Hay gente que me tilda de prepotente y de chulo. Tú me conoces y sabes cómo soy. Yo creo que estamos muy poco acostumbrados en el mundo del fútbol a escuchar las cosas tan claras. Yo tengo un mensaje demasiado claro que a veces puede molestar, pero es que es mi forma de ser.

–Hoy vuelven los elementos de animación al estadio Cartagonova. ¿Por qué no se podía haber hecho esto antes?

–Esto ha sido como cuando un niño hace una cosa mal y tiene que cumplir un castigo. Hemos ido remando poco a poco para tener un perdón y lo hemos logrado, con la cooperación de la OND, LaLiga y nuestras peñas. La buena noticia es que ya es hasta final de temporada y esperemos no cometer ningún error en el camino, porque daremos un paso atrás.

–El fondo norte bajo está siempre desierto y por televisión la imagen es penosa. ¿Cómo se puede solucionar eso?

–La temporada que viene vamos a cambiar la Grada Compromiso de lado. Vamos a hacerla más grande y así todo ese fondo norte bajo siempre va a estar lleno, porque está teniendo una respuesta brutal, de asociaciones de tal manera. La zona de fondo sur bajo que ahora ocupa la Grada Compromiso la vamos a dejar para la afición visitante.

–¿Qué pasa con el nuevo videomarcador?

–Está encargado y va a venir. Lo normal es que lo estrenemos ya la temporada que viene.

–¿Qué cuesta?

–Más de 200.000 euros, que por cierto vamos a pagar nosotros. Y ciertamente no me parece lógico que el club pague un videomarcador que se va a instalar en un estadio municipal.

–¿Van a pagar también los 400.000 euros que cuesta la nueva UCO?

–Estamos negociando a tres bandas, con LaLiga y con el Ayuntamiento, con la idea que las tres partes aportemos un dinero.

–¿Cuánto han recibido ya del fondo CVC y en qué han usado el dinero?

–Esta temporada la vamos a terminar con 4,2 millones de euros, de los 6 que nos corresponden. Y la mayor parte del dinero, como sabéis, lo estamos destinando a la construcción de la ciudad deportiva en La Manga Club.

–¿Cómo van los trabajos?

–La primera fase está prácticamente acabada y en breve vamos a comenzar con la segunda. Nos hemos quedado con la explotación del campo principal y en unos días vamos a dar una rueda de prensa monográfica, con novedades sobre La Manga Club.