Cartagena
El gol trae de cabeza a CaleroLa falta de acierto penaliza a un Efesé que perdona mucho y solo lleva un tanto, a balón parado, en el último mes de liga
Julián Calero se marchó preocupado del último partido por la falta de gol que detecta en la plantilla. El Cartagena está en el 'top ... 5' de equipos con menos pólvora. Muestra de ello es su desacierto en el último mes de la competición: solo 1 de sus 35 disparos, menos del 3%, terminó en el fondo de la red. Últimamente el Efesé perdona demasiado. Y necesitará recuperar la efectividad de otros momentos de la temporada para salvar la categoría.
El entrenador albinegro reconoció el pasado domingo, al término de la derrota en casa contra el Valladolid (0-2), que el equipo tiene poco gol. Los albinegros fueron un continuo acoso y derribo contra la portería pucelana, especialmente en la segunda parte, pero no hubo manera de acertar. El equipo sacó cinco saques de esquina, sumó hasta mayor porcentaje de posesión y disparó hasta en quince ocasiones, si bien es cierto que solo en tres tuvo que intervenir el guardameta Masip.
«No somos un equipo que tenga mucho gol y para nosotros mantener la portería a cero es fundamental. Hemos encajado dos y era complicado hacer tres. Lo intentamos y dimos todo [...] Hemos generado tanto que lo normal hubiera sido algo de premio». Con estas palabras, Calero hizo hincapié en una realidad: que el Cartagena es el quinto equipo con menos gol de la categoría con 31 tantos en 34 jornadas, menos de 1 por partido y solo por delante del Alcorcón (25), el Andorra (27), el Huesca (29) y el Amorebieta (30).
La pizarra, salvadora
El cabezazo de Fontán en el saque de un córner contra el Andorra es el único gol que ha marcado el Cartagena en las últimas cuatro jornadas; o lo que es lo mismo, en los últimos 360 minutos de juego, sin contabilizar los tiempos de añadido. Para encontrar la última diana materializada en jugada de combinación hay que remontarse al 9 de marzo, cuando primero Darío Poveda y después Luis Muñoz definieron delante del portero para sellar la remontada contra el Racing de Ferrol (2-1).
Calero reconoce que el Efesé no tiene «mucho gol» y pide recuperar en Gijón la firmeza defensiva de semanas anteriores
Desde entonces se mantiene ese pequeño bache de efectividad en el área rival. En el Nuevo Pepico Amat, los albinegros contabilizaron las mejores ocasiones del partido; sobre todo, en las botas de Darío Poveda. El alicantino estrelló un remate en el larguero y tampoco hizo buena una deliciosa asistencia de Luis Muñoz con la espalda para romper la igualdad en el marcador (0-0). Poco después, ante el Andorra, los de Calero pudieron ampliar la ventaja en la primera parte e incluso poner la sentencia en los últimos suspiros con un duro disparo de Alfredo Ortuño a la cruceta (1-0).
La historia volvió a repetirse solo una semana después en el desplazamiento a Butarque. El Cartagena completó un perfecto ejercicio defensivo y no se llevó los tres puntos porque tampoco le acompañó el acierto. Primero Andy Rodríguez y luego Damián Musto se estrellaron contra la madera. Y luego Ortuño erró un mano a manos delante del guardameta Diego Conde.
Fontán, uno de los pichichis
El Efesé volvió a quedarse en blanco el pasado domingo contra el Valladolid (0-2). En este partido sí que se evidenció la falta de acierto, que no de volumen de ocasiones, en el conjunto albinegro. Musto volvió a intentarlo desde su casa, Iván Calero definió demasiado suave tras el recorte, a Poveda se le marchó el balón por encima de la escuadra, Arnau Ortiz la lanzó arriba en una posición muy franca, Jairo Izquierdo rozó el palo derecho de Masip y el portero se colocó bien un tiro de Ayllón que buscaba sorprender.
Pocas veces como en esa ocasión protagonizó el Cartagena un vendaval ofensivo tan amplio con tanto desacierto. Y eso que Calero puso toda la carne en el asador: en el 46 retiró a Alarcón, de corte defensivo, para dar entrada al chisposo Arnau Ortiz; y en el 62 sacó la artillería de la que dispone quitando a Verdú por Ortuño y al pivote reconvertido a extremo Luis Muñoz por el atacante Juanjo Narváez. Incluso en el 79 Iván Ayllón dio frescura para reemplazar a un agotado Darío Poveda.
Los albinegros disparan 35 veces en las últimas 4 jornadas, pero solo nueve van entre los tres palos y uno termina en gol
El resumen son 35 disparos en el último mes, 9 de ellos entre los tres palos y solo 1, de estrategia de Fontán, que terminó en gol. Un hecho significativo en todo este aspecto es que el defensa gallego es actualmente el segundo máximo artillero del equipo con 4 dianas. En cabeza sigue Ortuño, si bien es cierto que al yeclano se le resiste el gol desde hace once jornadas, cuando adelantó al equipo en la victoria en Santander (0-2) el 21 de enero.
Esta racha sin acierto ha coincidido también con las oportunidades que no ha podido concretar Poveda en este último mes. Más allá de Fontán, Ortuño y el alicantino es complicado encontrar más socios que sumen a la causa. Narváez suma dos dianas, la última el 14 de enero al Villarreal B; Jairo Izquierdo aportó dos la pasada campaña y esta aún no se ha estrenado; tampoco el refuerzo de Arnau Ortiz; Ayllón no ha tenido excesivas oportunidades para hacerlo; y Juan Carlos Real, autor de tres en la primera vuelta, ya ni siquiera es prioritario y ni calentó el pasado domingo en la banda.
Horizontes exigentes
El objetivo para este mismo sábado en Gijón es mantener la solidez de semanas anteriores y recuperar la efectividad que se ha perdido en el último mes. Sporting de Gijón, Oviedo y Levante son los tres próximos rivales a los que mirar. El Cartagena tiene con el Andorra un horizonte más exigente con respecto al resto de implicados en la salvación. Eibar, Espanyol y Santander son los rivales de los andorranos; Oviedo, Burgos y Ferrol para un Miranés en picado; y Tenerife, Eldense y Eibar para un Albacete obligado a cambiar ya la dinámica para no perder opciones. La buena noticia es que Calero tiene a todos los jugadores disponibles.
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