La salud se transforma para adaptarse al futuro

Si algo ha puesto en valor la pandemia que atraviesa el mundo es el valor de la sanidad. Los profesionales de este ámbito han sido para todos los grandes héroes de una etapa en la que se ha valorado más que nunca contar con un sistema sanitario sólido capaz de hacer frente a los retos del futuro. En este punto, la innovación y las nuevas tecnologías del mercado cobran especial fuerza en un entorno que se torna incierto y en el que se debe apostar aún más por la prevención y la protección frente a nuevas posibles amenazas.

Precisamente, analizar los retos de este sector de cara a los próximos años y valorar el modelo de negocio sanitario actual son algunos de los puntos que se trataron ayer durante la jornada Bankia Forward by Innsai 'Salud 2021: Anticipando el modelo de negocio del futuro en el escenario post-Covid', que ofreció una radiografía de la situación actual y adelantó las tendencias que vive en ámbito sanitario.

«En este difícil entorno, el sector de la salud se ha erigido como absolutamente estratégico para nuestra sociedad y nuestra economía», destacó nada más empezar el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri. Este sector, que hoy es más transcendental que nunca, cuenta con el apoyo de Bankia Forward by Innsai, un proyecto que apuesta por ayudar a las compañías del presente a entender las transformaciones del futuro, con el fin de adaptarse e interiorizarlas como fuente de ventajas competitivas.

Con el objetivo de analizar los cambios que afectan al ámbito sanitario, el evento contó con la presencia del CEO de Innsai, Jesús Navarro, quien abordó la salud como un sector inmerso en una profunda metamorfosis imprescindible para hacer frente al envejecimiento de la población, el incremento de las enfermedades crónicas, las dificultades regulatorias, y una política de precios opacos que tienen como resultado «el aumento de la insatisfacción de los usuarios y del gasto sanitario, tanto en el ámbito privado como en el público», resaltó.

Todas estas dificultades han sido el impulso necesario para comenzar un cambio de paradigma en el que la salud no está enfocada en la curación de enfermedades, sino en la prevención. Este salto se ha visto además acelerado gracias a las grandes empresas tecnológicas y la aparición de numerosas 'start-ups'.

«La Covid-19 ha puesto en evidencia que la salud es una macrotendencia que impacta transversalmente en todos los sectores. Muchas empresas han diversificado su actividad, aflorando esas capacidades que tenían y que estaban ocultas».

En este trabajo por descubrir lo que se avecina, Bankia Forward by Innsai dispone de un observatorio de innovación que ha detectado seis nuevas líneas de desarrollo en el ámbito de la salud. La primera de ellas nació bajo el paraguas de unos cambios demográficos que basculan en dos direcciones: por un lado, el envejecimiento de la población -se estima que en 2050 se alcanzarán los 9.700 millones de habitantes y un 35% será mayor de 65 años-; y por el otro, la aparición de nuevas generaciones con estilos de vida diferentes. Así, bajo el nombre de 'Keeping Healthy', Navarro definió esta tendencia como aquella destinada «a prevenir la enfermedad y a alargar nuestra vida con un estilo mucho más placentero».

Esto ha generado innovaciones centradas en el autoconocimiento y en eludir las enfermedades, como los estudios del material genético o la monitorización a través de herramientas digitales, y herramientas que buscan el autocuidado holístico de cuerpo y mente mediante suplementos, recomendaciones preventivas y ayudas al sueño. Por otro lado, también han aparecido productos y servicios para frenar el envejecimiento, como los enfocados en la gerontología y los suplementos antiedad.

En otro aspecto, este envejecimiento tiene como consecuencia un incremento de los servicios sanitarios y del gasto que «sin un cambio estructural en un contexto de crisis o de crecimiento lento nos llevaría a una insostenibilidad del sistema», remarcó el experto. En este sentido, Bankia Forward by Innsai ha identificado una segunda tendencia que denominan 'Efficient Health' y que se enfoca en «utilizar la tecnología para emplear menos recursos, reducir costes y tiempos y conseguir mejores resultados».

Para este fin es especialmente útil la interacción digital, a través de aplicaciones y servicios virtuales para el seguimiento de pacientes, la medicina automatizada, que permite ya el diagnóstico con precisión a través de la inteligencia artificial y el 'big data', o la puesta en marcha de intervenciones menos invasivas.

La globalización es un fenómeno que ha dado lugar a una interacción e interdependencia entre individuos, empresas y sectores. Esta conexión mundial ha favorecido la expansión de un nuevo estilo de vida que tiene como objetivo la salud. Esta tendencia, que Bankia Forward by Innsai define como 'Health & Wellness Everywhere', se manifiesta a cualquier edad y en cualquier lugar y cultura y se ejemplifica en el aumento de búsquedas en Google relacionadas con comida saludable, la aparición de numerosas 'apps' vinculadas a la salud mental, el incremento del turismo sanitario hasta la llegada de la pandemia, o la realización de 4.365 proyectos de edificación en 62 países que cuentan con la certificación Well, que evalúa los edificios en relación al bienestar y la salud que aporta a sus ocupantes.

De las líneas hacia las que se dirige el sector ya mencionadas, todas ellas están enfocadas en la eficiencia o el ahorro de recursos. Las restantes, por el contrario, tienen como foco a un usuario que es nativo digital y que empieza a demandar una mayor transparencia de los datos y un acceso ágil y rápido a la información. Estas exigencias han alterado el concepto tradicional de paciente, que ha pasado a ser «un consumidor proactivo y protagonista en la toma de decisiones que afectan a su salud», subrayó Navarro, abriendo un camino de trabajo en el sector que en Bankia Forward by Innsai se califica como 'Proactive Health'.

«Pasamos de un sistema con información opaca a la que es difícil de acceder, a otro transparente», explicó este profesional, lo que ha generado un aumento de la medicina directa al consumidor y un incremento de la telemedicina a través de 'apps' que pueden, entre otras cosas, realizar un seguimiento de los tratamientos de forma 'online'. Se estima que el mercado de aplicaciones móviles de salud alcanzará los 100.000 millones de dólares en 2023.

Si por algo se define el siglo XXI es por ser la era del conocimiento. Con apenas un clic, cualquier persona puede acceder a una ingente cantidad de información que permite a los usuarios tener siempre a mano información veraz sobre la idoneidad de todo tipo de productos y servicios. Esta facilidad para conocer las cualidades de aquello que se les oferta obliga a las empresas a ir un paso más allá y utilizar la personalización como un plus más que ofrecer a ese consumidor cada vez más exigente. En este sentido, la salud no se ha quedado atrás y bajo el nombre de 'Costumized Health' ha iniciado un camino en el que los usuarios están dispuestos a compartir datos a cambio de productos que se ajusten de forma exacta a lo que necesitan.

En cifras, un 58% de la población española es propensa a adoptar servicios hiperpersonalizados en salud y las marcas que aceptan el desafío de la personalización ven incrementados sus ingresos de un 36%. En este sentido, esta realidad se ha trasladado a la práctica con la búsqueda de tratamientos más precisos y personalizados, la monitorización, el análisis y el tratamiento en tiempo real y el aumento de los cuidados a domicilio.

Uno de los mayores problemas de la sociedad de hoy es el estrés. La falta de tiempo produce un sentimiento de tensión física y emocional muy extendido que ha generado una nueva tendencia sanitaria centrada en reducirlo. «El 87% de los trabajadores encuestados dicen estar estresados y un 12% causan baja laboral», indicó Navarro.

Para ponerle freno, bajo el nombre de 'Natural Wellness' nació un nuevo ámbito de mercado centrado en el bienestar que está valorado en 4.500 millones de dólares y que engloba a todos aquellos servicios que ensalzan el binomio naturaleza-salud como método para conseguir un equilibrio físico, emocional y mental saludable.

Este enfoque hacia el bienestar se manifiesta en cambios en los patrones de comportamiento, la adopción de nuevos estilos de vida, o la fusión entre creencias y salud, lo que ha abierto nuevas posibilidades de negocio como el turismo sanitario, que antes de la Covid-19 se estimaba que alcanzaría los 919.000 millones de euros en 2022.