El uso de la 'minería' de datos en las empresas de la Región de Murcia se dispara el 60% en un año

La 'minería' de datos era una tecnología incipiente en 2019 para la Región. Solo 260 empresas se atrevían con ella, bajo la insistencia de consultoras informáticas. Los confinamientos a raíz de la Covid forzaron a comercios, fábricas, talleres de moda y factorías alimentarias a dar el salto a la venta 'online'. Ello indujo a 183 de ellas a probar suerte con el 'big data' para captar y fidelizar clientes mientras duraron los estados de alarma. Entre mayo de 2021 –fin de restricciones– y mediados de este año se sumaron otras 296 firmas hasta llegar a las 739 actuales, ante un mercado cada vez más hostil bajo la inflación.

Pero el porcentaje de empresas que emplean 'big data' (13,3%) sigue siendo de los más bajos de España, donde el promedio se sitúa en el 15,1%, según el INE. Las comunidades más avanzadas en cuanto a implantación son Cataluña (18,6%), Madrid (18,1%), La Rioja (17,7%), Baleares (15,7%), Comunidad Valenciana (15,4%), Aragón (14,4%) y Asturias (14,1%).

Como consuelo, Murcia está por encima de autonomías potentes, como Galicia (12,5%) o País Vasco (11,8%), y de más grandes, como Castilla-La Mancha (8,9%) o Extremadura (8,8%). A ello contribuye que Murcia alberga firmas especializadas en 'big data' que son referentes a nivel nacional e internacional, como Minderest, Neuromobile, TK Analytics, NTT Data, OdinS, Unidata, Inforges, Datuary y AMS Center Murcia, entre otras.

Dentro de la Región, la 'minería' de datos se abre camino en comercio, hostelería y servicios (compañías logísticas, clínicas, consultoras, entidades financieras, aseguradoras, operadoras de telecomunicaciones, firmas suministradoras de agua y energía, etc.), con una incidencia del 14,6%. Aun así, la media nacional está en el 19%.

Entre las actividades industriales de la Región, el procesamiento de datos abarca el 12,1% –sobre el 9,8% nacional– y en construcción baja al 11,4%, si bien en el conjunto del país está en el 10%. El aluvión de datos en el ciberespacio se enriquece minuto a minuto con los pasos que dan millones de internautas buscando enlaces, actualizando perfiles en redes sociales, navegando por 'marketplaces' y tiendas virtuales, examinando catálogos y empleando comparadores de productos y precios antes de comprar.

Cada persona genera de promedio 1,7 megabytes por segundo mientras interactúa con la Red. Su 'rastro digital' es, junto a las bases de datos de clientes y proveedores, una guía para que las empresas afinen su actividad. La función predictiva asociada a miles de terabytes recopilados desde internet –vía 'cloud computing' en la mayoría de casos– permite aplicar un trato personalizado a consumidores, hasta el punto de ofrecerles precios exclusivos, pronosticar tendencias y adelantarse a los competidores. Sirve además para evaluar la satisfacción de los clientes y alertar sobre fallos en producción, ventas y prestación de servicios.

En seis de cada diez firmas murcianas que procesan datos de forma sistemática (66,1%, según el INE), las referencias son recabadas mediante geolocalización de clientes a partir de sus dispositivos portátiles. La 'minería' de datos en redes sociales también cobra más peso y es llevada a cabo por cuatro de cada diez empresas (42,3%) para así rastrear tendencias de consumo.

En cuanto a funcionamiento interno, en dos de cada diez pymes y compañías que recurren al 'big data' (23,3%) son sus plantillas las que recopilan las referencias necesarias a partir de la cadena de suministro con proveedores y clientes. Emplean diversos tipos de 'software' que van desde los básicos Excel y MySQL hasta instrumentos como Hadoop, Elasticsearch, Apache Spark, Trifacta, Weka, Knime o Cloudera.

De forma paralela, un 32,3% cosecha información a través del 'internet de las cosas'; esto es, lectores de códigos de barras, sistemas de identificación por radiofrecuencia, dispositivos inteligentes...

Existe otra herramienta para cosechar 'big data', aún no considerada por el INE. El metaverso es un espacio digital comunitario en tiempo real en el que tienen presencia cada vez más individuos y empresas. Permitirá que la recogida de datos sea mucho más amplia, a nivel de petabytes.