Las fábricas murcianas de ropa alcanzan ya su nivel de producción prepandemia

El disparo de la inflación del pasado otoño y el encarecimiento de materias primas, transporte y energía no fue obstáculo para que las fábricas murcianas de ropa despegaran de forma espectacular en noviembre (+64,7% interanual) y diciembre (+72,8%). El incentivo lo marcaron la campaña navideña –tras un exitoso 'Black Friday'–, el atasco logístico de competidores como China, Vietnam, Camboya y Bangladesh, más las expectativas de las rebajas de invierno. Tales resultados se tradujeron en 24 nuevas empresas de moda durante 2021.

Dicho empuje prosiguió tras enero, con el citado 45,2%, estimulado por la producción para la temporada primavera/verano y la reactivación de pedidos para bodas y comuniones.

Las exportaciones, por su parte, dieron el espaldarazo que necesitaba el sector, con 74.173.830 euros facturados durante 2021, informa el Instituto de Comercio Exterior. Fue un 59% más que en 2020 y un 42,8% por encima del anterior récord, alcanzado en 2019 con 51.993.270 euros. Mirando más atrás, hace cinco años (2017) la cantidad estaba en menos de la mitad, con 36.857.360 euros.

De las instalaciones murcianas salieron hacia grandes almacenes, boutiques y plataformas 'online' del extranjero 27.924.660 prendas de vestir en el pasado ejercicio, lo que supuso un 57,3% más.

Del tal volumen, 23.995.440 artículos fueron de moda femenina (+62,7%) y 2.679.820 de ropa masculina (+50,3%). En el resto destacan los incrementos en lencería (+552,6%), bikinis y bañadores (+42,3%) y sombreros (+24,1%). Pero las ventas fueron nulas en moda infantil y nupcial; al igual que en uniformes y ropa laboral.

El 82,3% de lo exportado fue a la UE: Francia, Portugal Italia, Rumania, Grecia y Alemania cubrieron el desplome del mercado británico (su demanda cayó a la mitad). Otro 15,1% fue a América; sobre todo, a Chile y Venezuela.

El presente ejercicio arrancó bien, con 7.208.300 euros facturados en enero, un 89,8% más que en el mismo mes de 2021. Murcia figura como octava provincia exportadora en volumen. Solo están por delante La Coruña, Barcelona, Zaragoza, Madrid, Guadalajara, Alicante y Tarragona.

Y no todo es ropa. Otras 297 empresas murcianas (33 más que en 2020) se dedican a producir telas, bordados, tapizados y tejidos profesionales. Su facturación exterior subió el año pasado un 56,7%, con 11.781.520 euros, aunque lejos de su techo, alcanzado hace cinco años, con 14.865.190 euros.

La incertidumbre derivada del conflicto de Ucrania y la escalada de precios está ralentizando las ventas en el mercado nacional después de un fuerte crecimiento de ingresos. Así, los dos primeros meses del año registraron un acumulado del 26% en comparación con el mismo periodo de 2021, informa la patronal Acotex. Además, la afluencia a centros comerciales aumentó un 37,4%, según Sensormatic Solutions.

A partir del pasado marzo aparecieron nubarrones. Acotex indica que el consumidor ya solo acude a tiendas con promociones agresivas. Esta situación conlleva que los márgenes sean, según la patronal, «inexistentes». Por este motivo, los principales actores del sector, liderados por el Consejo Intertextil y ModaEspaña, han pedido al Gobierno central un proyecto de recuperación específico financiado con fondos europeos. Su objetivo es lograr 4.000 millones en ayudas, mientras en financiación privada movilizarían otros 10.000.

¿Por dónde iría ese cambio? Muchas empresas de ropa coinciden en una palabra: sostenibilidad. El sector habla de desarrollar una 'slow fashion', preocupada por cuidar el origen natural de los materiales, la fabricación local, la reducción de desechos, los artículos duraderos y el reciclaje.

Otro soporte para las ayudas sería la inversión en comercio electrónico, puesto que ha demostrado ser la mejor vía de recuperación para las empresas murcianas, desde Liwe (Inside), Gor Factory (Roly) y Confelor (Daen) hasta Oronovias, Marla, Pequeña Moma, Uniformes Murcia SL y Cabanes & Ortuño.