Colapsa la renovación del parque regional de vehículos de reparto
Las matriculaciones se hunden este año casi un 31% y alargan hasta los 13 años la antigüedad media de furgonetas, furgones y camiones ligeros
Los vehículos de reparto transportaron la mayor parte de las 45.498.000 toneladas de mercancías que se movieron el año pasado dentro de ... la Región. El comercio electrónico estimula su actividad, pero no la demanda de modelos nuevos de furgonetas, furgones y camiones ligeros, que cae casi un 31% interanual en lo que va de año y un 55,6% si se compara con el nivel prepandemia.
La patronal Faconauto informó esta semana de que los concesionarios murcianos solo vendieron 193 vehículos comerciales nuevos en marzo, un 48,4% menos respecto al mismo mes de 2021. Durante el primer trimestre las ventas sumaron 583 unidades, un 30,9% menos respecto al mismo periodo del año anterior.
Lo peor de ambos datos es que el pasado ejercicio fue el más funesto para el mercado murciano en la última década: solo 2.944 unidades nuevas, un 16,5% menos que en 2020, cuando en aquel entonces los concesionarios se pasaron meses cerrados bajo el estado de alarma y aun así vendieron 3.524.
El pasado ejercicio se cerró con solo 2.944 unidades nuevas, frente a las 5.715 de 2019
La pandemia marcó un antes y un después, puesto que 2019 se cerró con la matriculación de 5.715 vehículos (+31,7% respecto a 2018), mientras que en el resto de España las ventas se encontraban estancadas (+0,3%). Para hacerse una idea, durante el primer trimestre de aquel año se comercializaron 1.315 unidades, más del doble que este año.
Tendencias del mercado
La tónica se repite en el resto del país. El mercado nacional de vehículos comerciales ligeros se desplomó un 46,5% en marzo, hasta 9.635 unidades, en pleno conflicto de Ucrania –con la incertidumbre económica que genera– y huelga de camioneros portavehículos. En lo que va de ejercicio la bajada es del 35,8%, con 26.023 unidades, a causa de los parones de fabricación, las demoras en las entregas y la escalada de precios del gasoil, que resta margen de beneficios a transportistas que desean renovar vehículos.
A ello se une el 'renting', que cobra más aceptación entre compañías logísticas y pymes de reparto. Y por encima de todo está la recuperación del mercado de ocasión: 16.398 furgonetas y camiones cambiaron de manos el año pasado en la Región, según la Dirección General de Tráfico. Es un 30,5% más respecto a 2020 y está muy cerca del nivel prepandemia (17.200 al año de media en la última década).
El mercado de ocasión crece un 30,5% y está a punto de alcanzar el nivel prepandemia
Por si fuera poco, la eliminación por el Tribunal Supremo, el pasado octubre, del requisito de antigüedad máxima para acceder por primera vez al sector está facilitando la entrada de vehículos usados dentro del sector logístico.
En lo que se refiere a modelos nuevos, las marcas más demandadas son Renault, Peugeot, Citroën, Opel y Toyota en el caso de furgonetas, según Faconauto. En furgones destacan Mercedes, Peugeot, Ford, Toyota y Wolkswagen; en camiones ligeros, Iveco, Ford y Mercedes. Más del 90% de los vehículos que se matriculan son de motorización diésel. El sector considera que hará falta una década para que se impongan los híbridos o los 100% eléctricos.
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583 furgonetas, furgones y camiones ligeros se matricularon en el primer trimestre del año, un 30,9% menos respecto al mismo periodo de 2021 y un 55,6% en relación al de 2019.
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45,49 millones de toneladas se distribuyeron dentro de la Región el año pasado, de las que 27,4 fueron entre municipios y 18 dentro de los cascos urbanos.
La edad media de los vehículos comerciales que circulan en la Región se sitúa ya en los 13 años, según la patronal europea de fabricantes (ACEA). Es una de las más altas de la UE. Supone más polución para ciudades, mayor exposición a averías e inseguridad para los conductores, según Anfac, que considera que la vida media de furgonetas y furgones no debería pasar de los 7 años.
Incorporación al sector
Fuentes del sector logístico reconocen que las compañías tienen déficit de capacidad para repartir todo lo que se compra en internet cada día (uno de cada tres consumidores murcianos emplea esa vía). Ello anima a autónomos y pymes a sumarse vía franquicias y subcontratas. Antes de la pandemia, los transportistas interurbanos conducían un 75% del tiempo y empleaban el 30% en los repartos. Esa relación se ha invertido. Los repartidores más ágiles entregan entre 50 y 70 paquetes al día en cascos urbanos y polígonos.
Tableta y móvil dentro de la furgoneta es la imagen de cualquier repartidor. La distracción derivadas de llevar la 'oficina' junto al volante, el exceso de velocidad (la distribución de 'última milla' es más apremiante que nunca) y la antigüedad de los vehículos son motivos de una creciente siniestralidad en este colectivo.
Sin el lastre de las baterías eléctricas
El Consejo de Ministros aprobó el pasado día 5 un decreto para impulsar la distribución de 'última milla' mediante furgonetas eléctricas. Se permitirá que éstas no requieran autorización aunque superen en 500 kilos los 2.000 de masa máxima autorizada (MMA). El mayor peso de estas furgonetas –derivado de las baterías que portan– causaba un dilema: que se les exigiera autorizaciones correspondientes a vehículos de mayor tamaño o que redujeran su carga útil, lo que desincentivaba su uso para repartos. La nueva normativa autoriza a las furgonetas eléctricas la misma capacidad que a las convencionales.
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