Bebe: «Tenía el sueño de regresar a ElPozo, quiero revivir la emoción de un título»
El cordobés, criado en la cantera murciana, es un pilar del gran inicio del equipo, líder de la liga en solitario tras su vuelta a casa ocho años después
Antonio Zomeño
Viernes, 31 de octubre 2025, 01:12
Hace 18 años que Rafael García Aguilera aterrizó en Murcia. Más de una decena de títulos después, aquel bachiller imberbe se hizo un nombre ... sobre el 40x20 como Bebe (Córdoba, 35 años). El pasado verano todavía le quedaba un año de contrato con el Inter, pero la llamada de ElPozo aceleró su regreso a casa, «un sueño cumplido» que disfruta junto a los suyos, con ese gen competitivo que ansía devolver al cuadro murciano al lugar donde pertenece. Ahora, con el liderato debajo del brazo tras un arranque de curso sensacional, el cierre cordobés quiere terminar con una sequía que ya dura ocho años, los mismos que ha pasado lejos de casa.
–Definitivamente, este ElPozo Murcia parece otro equipo.
–Josan lo dijo a principio de año, el objetivo era recuperar esa esencia que siempre ha caracterizado a ElPozo. Ese nivel competitivo se había perdido. Por ejemplo, los equipos venían al Palacio con la sensación de que podían ganar. En mi etapa era todo lo contrario; daba igual quien viniera que era muy difícil que sacara puntos. Tener tu casa como fortín es crucial. El aficionado quiere ver a su equipo ganar, disfrutar de las victorias es lo que hace que la cancha se llene.
«Aunque pierdas, la gente tiene que ver que te dejas la piel en la pista, que te comes el escudo»
–El Palacio parecía sumido en la apatía; exigente pero resignado. En este arranque parece que se está recuperando el vínculo.
–Es el objetivo, pero va poco a poco. Ante el Inter, el primer partido de un nivel muy atractivo, vinieron unas 3.000 personas, y el equipo respondió. La gente que vino vio a un equipo comprometido, que tiene intensidad y juego. En estos años hemos perdido abonados, pero hay que volver a enganchar a la gente. En los partidos importantes no van a fallar, y ahí tienen que ver a un equipo con ganas. Que aunque pierdas, te dejes la piel en la pista, que la gente vea que te comes el escudo. Son características que gustan al aficionado, y responde. De aquí a final de año vamos a volver a tener un pabellón muy atractivo.
–El debut fue un varapalo. Desde entonces, pleno de victorias.
–Fue un traspié. El equipo ha sabido responder, sobre todo a través de la confianza en el trabajo, sabiendo cuáles son nuestros pilares: trabajo, compromiso y actitud. Más allá del resultado, eso no se puede perder. Anteriormente, veías un equipo donde uno o dos jugadores daban el nivel, y el resto pasaban desapercibidos. Eso es lo que hemos cambiado desde el principio, que todo el mundo dé el 100%, buscando la excelencia.
«Estoy en una etapa muy feliz. Antes sufría de mucho estrés, pero mi cabeza hizo 'click'»
–Ese trabajo colectivo se ha convertido en una identidad. Hasta once jugadores llevan tres goles.
–Es la idea. El conjunto es el que gana, no la individualidad. Ahora es todo muy bonito, todo el mundo te alaba. Si ahora estamos juntos, cuando lleguen los momentos malos es donde de verdad vamos a ver a un equipo confiante. Te pueden ganar, pero la intensidad no la puedes perder, y creo que eso ha cambiado.
–Han hecho de la solidez y la intensidad una marca registrada, con solo 12 goles recibidos.
–No es solo la intensidad, estamos teniendo un gran acierto, con los porteros [Sousa y Henrique] rindiendo a un nivel muy alto. El otro día, Josan alababa los repliegues defensivos. Cuando perdemos la bola, ves al equipo recuperar la superioridad defensiva, y eso es algo que el año pasado no veías. Es el trabajo de todo el conjunto lo que hace que brillemos atrás.
–En el apartado personal ya acumula tres goles en siete duelos.
–Nunca intento brillar a nivel individual. Soy competitivo al máximo, pero desde el trabajo para el equipo. La exigencia que me pongo a mí, se la exijo también a mi compañero, y eso hace que todos intentemos mejorar. Esa mentalidad, ese tirar el uno del otro e ir de la mano, es el camino para llegar a la meta.
–Ya son 35 años, ¿en qué momento físico se encuentra ahora?
–La edad es un número. Estoy mucho mejor que hace diez años. Con el tiempo aprendes a cuidarte y desarrollas esa mentalidad de querer alargarlo. Alguien podría pensar que venía a retirarme, pero trabajo por y para este club, y siempre doy el máximo.
–Quien lo pensara no ha visto sus últimos dos cursos, con tres títulos entre el Jimbee y el Inter.
–Allá donde he ido, siempre he tenido la suerte de ganar títulos. Fui con esa idea tanto a Madrid como a Cartagena, y lo conseguí. Ahora he regresado a ElPozo, y ver cómo estamos me hace seguir adelante. Ver que donde voy el equipo resurge de sus cenizas es muy satisfactorio. Ahora toca volver a poner a ElPozo donde merece estar.
–Regresa tras 8 años, cuando se marchó de ElPozo con el último título del club bajo el brazo.
–Siempre lo he tenido claro. ElPozo me dio la oportunidad de llegar donde estoy, y para mí era un 'hasta luego'. El club pensó en mí como un jugador de la casa que debía volver y le estoy muy agradecido. Y bueno, a nivel personal, este curso en Torrejón de Ardoz ha sido el primero que he estado lejos de los míos. Volver a ver a mis hijos disfrutar en la grada no está pagado, aunque ya le he dicho a mi hija que no se puede llevar más banderines de los partidos, porque no cabe uno más en casa. Regresar siempre ha sido un sueño. Lo estoy cumpliendo; me motiva día a día ver el Palacio lleno y poder disfrutar de la emoción de revivir un título con ElPozo.
–¿Qué ha cambiado de ese Bebe que ganó con ElPozo en 2017?
–He mejorado y madurado mi juego a partir de errores que todavía tengo en la retina. Va con la experiencia de todos estos años. Al final, estoy en una etapa muy feliz de mi vida a nivel personal, y eso hace que cuando llego al trabajo rinda mejor; va de la mano. Llevo bastante tiempo trabajando con un psicólogo y mi cabeza hizo un 'click'. Antes sufría de estrés, y ahora ya no tengo nada. Bueno, el de correr con los niños.
–¿Intenta trasladar ese buen momento personal al vestuario?
–Cuando llegué, todo era negatividad, y no puedes salir a jugar pensando en la derrota. En el vestuario nos vamos contagiando, la gente se va animando y, cuando los resultados acompañan, el ambiente es aún mejor. Esto se refleja en la pista, si llevas esta camiseta no puedes bajar los brazos.
–¿Con qué objetivo ha regresado Bebe a ElPozo Murcia?
–He venido a hacer crecer al equipo y a luchar por títulos. Más allá de esa estabilidad familiar, el objetivo que me marqué es volver a conseguir un título con ElPozo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión