Los vecinos de Mazarrón se vuelcan con Acosta: «Hay más oportunidades; el 'Tiburón' es un campeón»
Así se ha vivido en la tierra del piloto murciano la carrera que podría haberlo proclamado como campeón del mundo de Moto3
Paco García, conocido en el pueblo como 'El Sultán', apuraba su cigarro de liar mientras observaba este domingo la carrera de Moto3, cuando Pedro Acosta, 'El Tiburón' de Mazarrón, logró situarse por momentos el primero. «¡Vamos, vamos!», gritó con entusiasmo, al igual que las más de 200 personas que seguían el evento deportivo y abarrotaban la carpa instalada frente al estadio de fútbol del municipio.
Ese momento fue mágico. A pesar de que Acosta no logró el título de campeón mundial, el pueblo vibró con la carrera que protagonizó su 'Tiburón'. Desde primera hora de la mañana Mazarrón fue una fiesta. El Ayuntamiento también instaló otra pantalla gigante en el colegio Manuela Romero del Puerto. Pero el jolgorio se formó desde bien temprano junto a la pizzería Siena del pueblo, donde el club de fans del piloto últimaba a las 8 horas todos los detalles para que los vecinos pudieran apoyar a Acosta. Los cohetes resonaban en el cielo en medio de almuerzos, corrillos, conversaciones sobre el piloto... «Va a ganar, seguro. Y si no puede ser hoy, Pedro tendrá dos oportunidades más», explicaba uno de los forofos de Acosta.
Entre el gentío estaban los padres del 'Tiburón' y la hermana pequeña de este. «¿Nervios? ¡Qué va! Estoy muy tranquilo, pero pregúntale a la madre...», exclamó el cabeza de familia. Su esposa, Mercedes, que se encargaba de vender el merchandising, sí se mostró como un flan. «Siempre que se sube a la moto me pongo fatal. Anoche hablé con él y parecía tranquilo. Lo único que pido es que la carrera vaya bien», añadió mientras la gente le pedía gorras y sudaderas. Y la hermana confesó que «me late el corazón a mil, y tengo retortijones desde que me he levantado de lo nerviosa que estoy».
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Durante la carrera, los familiares no perdían ojo a la gran pantalla. Entre tanto, decenas de moteros hacían rugir los motores, derrapando y pintando la calzada para caldear el ambiente. «Como el 'Tiburón' gane se va a liar la de Dios», sentenció Paco El Sultán, que no dejaba de grabar vídeos con su móvil para inmortalizar el momento. Finalmente, no se dieron las condiciones para que Acosta se proclamara campeón del mundo, pero ese hecho no evitó que vecinos y visitantes celebraran que «el Puerto tiene un gran piloto».
Más de 400 socios
El vicepresidente del club de fans, Luis García Morales, se mostró esperanzado en que el 'Tiburón' pueda lograr el ansiado título en la próxima carrera. «Cuando lo consiga, será algo histórico», relató. Añadió que, «antes de que arrancara la temporada solo éramos cuarenta socios. Ahora, hay más de 400 en el club».
Al finalizar la carrera, la gente se agolpó en el bar Siena, que se convierte en sede de los moteros cada vez que hay carrera. Su gerente, José Martínez, no daba abasto a tirar cañas bien frías y a servir tapas para tantas personas. «Esto es sudar la camiseta, y lo demás son tonterías», bromeaba. Pero alguien en la barra soltó el nombre de Acosta, y José lo calló al instante: «Mira, te lo voy a decir para que tú lo sepas. Pedro va a ganar en Portugal, y punto».
En el comedor del bar brindaban una y otra vez Antonio Zamora y Germán Tomás, dos alcantarilleros que habían viajado en moto para ver el evento. «Siempre habíamos visto las carreras por la tele, y nos hemos decidido a venir. ¡Es emocionante!», relataron.
A las puertas del bar, un grupo encabezado por Daniel Hernández coreaba «no soy una sardina / no soy un boquerón / yo soy el Tiburón / de Puerto de Mazarrón». Y entre el humo de los cohetes y el olor a gasolina de las motos, 'El Sultán', cigarro en mano, decía a sus colegas: «Hay más oportunidades; tenemos un campeón».