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La artista valenciana Soledad Sevilla, Premio Nacional de Artes Plásticas en 1993. Vicente Vicéns/ AGM
Soledad Sevilla crea para La Capilla de la UMU la obra 'La forma de las estrellas'

Soledad Sevilla crea para La Capilla de la UMU la obra 'La forma de las estrellas'

La instalación de la premiada artista se inaugura el miércoles; el martes expone en la galería Artnueve 'Rutas del desasosiego'

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Martes, 14 de mayo 2019, 01:10

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Amante del silencio despierto, de la delicada sobriedad y de una belleza que implore a las almas valentía y riesgo para vivir, Soledad Sevilla (Valencia, 1944) presentará en Murcia esta semana, en la galería Artnueve y en la sala La Capilla -el recóndito, bellísimo y sorprendente espacio expositivo de la Universidad de Murcia (UMU)-, dos muestras, exquisitas y poéticas, de su quehacer artístico, merecedor desde hace años, además del reconocimiento del público y de la crítica, de galardones como el Premio Nacional de Artes Plásticas que se le concedió en 1993.

En la galería Artnueve, que dirige Mari Ángeles Sánchez, inaugurará este martes, a las 20.00 horas, la que será su cuarta exposición en este espacio, en el que afirma encontrar siempre «muy buenas vibraciones». En esta ocasión, mostrará piezas de su proyecto 'Rutas del desasosiego', inspirado en el 'Libro del desasosiego', de Fernando Pessoa, poeta con el que comparte que, en efecto, «no hay acción por pequeña que sea -y cuanto más importante, más cierto es- que no hiera a otra alma». Su trabajo se podrá contemplar, en el Espacio E1 de la galería murciana, hasta el 30 de mayo.

Inauguraciones

  • Martes 14 'Rutas del desasosiego'. Espacio E1 de la galería Artnueve, en Murcia. Inauguración, a las 20. 00 horas. Visitas, hasta el 30 de mayo.

  • Miércoles 15 'La forma de las estrellas' (instalación). Sala La Capilla del Rectorado de la Universidad de Murcia (UMU). Inauguración, a las 20.30 horas. Visitas, hasta el 13 de septiembre.

El miércoles, a las 20.30 horas, tendrá lugar la inauguración, en La Capilla de la UMU y con la presencia del rector, José Luján, de la instalación 'La forma de las estrellas', que se podrá disfrutar hasta el 13 de septiembre y para cuya creación se ha contado con la colaboración de la Consejería de Turismo y Cultura, de la que es titular Miriam Guardiola. Concebida y creada especialmente para La Capilla, 'La forma de las estrellas' «es un tetraedro, pensado y elaborado para su instalación en La Capilla del Rectorado de la Universidad de Murcia, que se basa en un plano del universo del arquitecto José Miguel de Prada Poole; un universo homogéneo, isótropo y regular, con imágenes que representan cuatro direcciones del espacio, que se supone que no es esférico sino cubico, según sus palabras». «Esa investigación», explica la artista, «llevada a cabo durante su estancia en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), entre los años 1978-1982 del pasado siglo, también le llevó a considerar a partir de las representaciones elaboradas que el universo no es homogéneo, ni isótropo ni regular».

La creadora valenciana quedó fascinada por «ese espacio mágico, que por sus proporciones se eleva hacia el firmamento»

«Compartíamos techo, ideas, opiniones, vida, y de esa comunicación surge en mí», reconoce Sevilla, «la necesidad de representar mi propio universo basado en el que él desarrollaba». «Como tantas veces -añade- la imagen latente en mi subconsciente se hace 'luz' cuando Paco Caballero me invita a ver La Capilla y me propone hacer algo». Y «ese espacio mágico, que por sus proporciones se eleva hacia el firmamento, rescató y puso en marcha ese gesto dormido». Así, «a partir de dibujos y una pequeña maqueta en papel, trasladé la propuesta al equipo de Granada, Antonio Cayuelas y José María Rueda, quienes de manera impecable han llevado a cabo aquella idea pensada en la fría atmósfera de Massachusetts».

Interrogantes

Las obras de Soledad Sevilla, habitualmente extrañamente inquietantes y en apariencia muy sencillas, propician que el espectador sin prisas pueda adentrarse por territorios, apenas insinuados, de depurada belleza y notable fuerza. Interrogantes artísticos, laberintos para los sentidos, caminos de ida y vuelta en busca de un mayor conocimiento y de una mirada más lúcida sobre las cosas y los cuerpos vivos. Obras sin desmesura ni artificio, poéticas, en ocasiones como rescatadas del fondo del mar. Obras sin palabras pero que te hablan: piezas cuyas suavidades pueden servirte de trampolín mental para viajar muy lejos: a las sombras, a mares vegetales, al origen, al otro lado del espejo, a los jardines colgantes de Babilonia, al interior siempre falto de exploración de uno mismo.

Soledad Sevilla procura vivir en paz, pintar en silencio y no dejarse arrastrar por cantos de sirenas, pero se ve obligada a menudo a transitar por la realidad respirando un aire distinto al que habita en la atmósfera casi sagrada de su estudio. Entre sus mejores obras, imposible no citar la instalación 'Escrito en los cuerpos celestes', creada por encargo del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y que deslumbró al visitante en el madrileño Palacio de Cristal del Parque del Retiro.

A propósito de 'Rutas del desasosiego', cuenta la artista que «hacía algunos años que tenía Lisboa en el horizonte, atraída por ese universo que es 'la Rúa Dos Douradores, con la oficina de Vasques &Cía., con el puesto de frutas, el estanco, la barbería... y sus personajes entrañables y complejos, como el patrón Vasques, Moreira, Borges, Sergio, el de los paquetes y toda una serie de secundarios y anónimos que nos permiten habitar un espacio tanto mental como físico'». Todo surge de su pasión por el 'Libro del desasosiego' -que Pessoa escribió bajo el heterónimo de Bernardo Soares-, y por la profunda carga de humanidad que encierra. Fue en mayo de 2016 cuando la creadora valenciana recorrió Lisboa durante quince días, y «al llevar a cabo mis recorridos», explica, «transformé una idea, que mi imaginación había alimentado durante largo tiempo, al fin en experiencia». A lo largo de esos quince días, recuerda, «quince rutas diferentes me conducen a la Baixa, durante los cuales capturo imágenes y sensaciones superponiendo mis pensamientos a los de Bernardo Soares». Estaba «reescribiendo las rutas, estaba haciendo física una huella que hasta entonces solo había sido espiritual, y de esa superposición mental surge el camino recorrido y su espacio vacío; el camino se suprime una vez andado, pero destacar su ausencia completa esa acción».

27.543 manuscritos

Por otro lado, «los 27.543 documentos manuscritos encontrados a su muerte [de Pessoa]» que fue «acumulando en su baúl de inéditos, algunos de los cuales ordenados dentro de sobres por el propio autor», le produjeron «una fuerte impresión». Quiso entonces Soledad Sevilla poner el foco también «en ese acontecimiento, vivirlo como tal, rescatarlo de lo habitual o normal y trasformar esa idea en materia artística: las quince cajas [creadas para sus 'Rutas del desasosiego']. «La sencillez de estas obras presentes en la exposición» de Artnueve, precisa, «busca reflejar el espíritu del poeta», que en palabras de Robert Bréchon «experimenta la pasión de perder, como otros poseen la rabia de vencer». Cree Soledad Sevilla que «es en estos momentos de tanta confusión de valores, cuando hay que tener conciencia de que la creación es algo intrínsecamente necesario para el ser humano, y que irradia una influencia benéfica incontestable». Y a propósito de Pessoa, deja claro que «después de casi cien años, el incesante dialogo con su poesía y su pensamiento, y la influencia benéfica en tantas almas, está fuera de toda duda y sigue siendo un motivo de asombro». «Todo lo que intuimos, que no es casual ni aleatorio, ocurre por algo, aunque no lo entendamos. No todo es azar», dice la artista, de la que siempre se espera un alto nivel de exigencia y que provoque [una ráfaga de] placer.

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