Paco Ureña recibe el alta hospitalaria tras la grave cogida sufrida el domingo en Abarán

El torero Paco Ureña recibió este miércoles por la tarde el alta hospitalaria. El diestro de Lorca permanecía ingresado desde el domingo en el hospital Virgen de la Arrixaca, adonde fue trasladado en ambulancia desde la plaza de toros de Abarán, donde sufrió una grave cogida en la corrida de toros celebrada en aquella localidad y en la que compartió cartel con el murciano Rafaelillo. El sexto toro de la tarde, de la ganadería de Juan Pedro Domecq, cogió de forma espeluznante a Paco Ureña cuando se abría de capote, vapuleando y estrellando al diestro contra las tablas, pasando el pitón por el pecho y el cuello del diestro en segundos angustiosos.

Tras ser atendido en un primer momento en la enfermería de la plaza por el equipo dirigido por el Dr. Ricardo Robles, fue trasladado al hospital. Allí ha pasado las primeras setenta y dos horas desde la cogida. Tras las pruebas realizadas, el informe médico refleja los daños ocasionados por el percance, que obligarán al diestro a la inmovilización de la zona cervical durante dos meses cómo mínimo, en una larga recuperación, al presentar fractura de la vértebra cervical C4. Además, también presenta una lesión en su rodilla derecha que también precisará de tiempo y rehabilitación al llevar roto el ligamento lateral interno. A esos dos traumatismos hay que sumar múltiples contusiones, una craneal, que no presenta complicaciones, otra torácica y otra fuerte contusión en el brazo, por un pitonazo del astado, que provoca fuerte dolor.

Después de tres días en el hospital, con fuertes dolores, el torero conseguía levantarse de la cama y dar sus primeros pasos desde el domingo. Como anécdota, Ureña renunció a la silla de ruedas y salió del hospital andando. El torero de Lorca se recuperará en su residencia en Albacete de las heridas que le mantendrán alejado de los ruedos durante los próximos meses.

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