'El Rey del Océano' murciano corona la foto de naturaleza

Los fondos marinos de la Región de Murcia, mediterráneos y marmenorenses, copan este año los premios de fotografía de naturaleza más prestigiosos del mundo y lo hacen gracias a la labor de Javier Murcia (Cartagena, 1974), que desde hace más de cuatro décadas pasea su mirada bajo el agua salina que baña nuestras costas. De niño, con gafas, tubo y aletas, lo hacía en busca de pesca submarina; y, pasada la edad del pavo, de caza para captar la imagen más impactante de la vida marina. Lo ha conseguido retratando el parto de un caballito del Mar Menor ('Hippocampus gutulattus') y del Mediterráneo ('H. hippocampus'), también a una aguja mula engullendo peces enteros, «espectacular», y a un grupo de 6 hembras de caballito esperando su turno para introducir sus huevos en el mismo macho para su gestación. No en vano es especialista en la vida de los signátidos, a los que ha pillado 'in fraganti' en casi todos los momentos de su vida.

Buzo profesional y técnico superior en Cultivos Marinos, ha hecho de su afición a la fotografía una profesión con la que difunde escenas nunca vistas de los habitantes del mar en redes sociales, ilustra libros que él mismo firma para concienciar y divulgar, y captura los premios de concursos de fotografía de naturaleza y de conservación con más tirón del mundo entre profesionales y 'amateurs'.

De hecho, hace unos días consiguió su último premio, el Nature Photographer of the Year 2021 en la categoría 'Hombre y naturaleza' por 'El Rey del Océano', en la que retrata desde el fondo un pez espada en el interior de la almadraba de La Azohía (Cartagena), su rincón favorito de la Región. Su buen ojo se ha medido al de los autores de otras 19.546 «imágenes fantásticas procedentes de 95 países», afirma la organización holandesa del festival. Y, apunta Murcia, sirve para poner de relieve «el arte de pesca más selectiva que conozco, que hace 3.000 años practicaban ya los fenicios y sigue perviviendo en la Región», recuerda con orgullo.

Convencido como está de lo que pregonaba Jacques Cousteau -«el hombre solo protege aquello que ama, y solo ama aquello que conoce»-, Javier Murcia ha optado por primera vez este año al II Concurso de la Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza (Aefona), centrado en la conservación. Su foto 'El ciclo de la vida', de un serrano de tonos salmón engullendo un 'Labrus viridis', verde intenso, ha merecido el premio absoluto de este certamen.

Ya hace dos meses, el premio de la Sociedad Alemana de Fotografía de Naturaleza, dentro del European Wildlife Photographer of the Year 2021, donde también fue destacado en la categoría de 'Hombre y Naturaleza', anticipaba su fin de año triunfal.

«La contaminación y la pesca incontrolada son los mayores enemigos del mar, que es el futuro y debemos cuidarlo», recuerda mientras confía en que esta foto le ayude en su labor de concienciar: «Una imagen vale más que mil palabras y espero que esta haga que la gente coja las tijeras parar recortar esas anillas antes de tirarlas -al contenedor del plástico, por supuesto-. Con eso ya consigo bastante». Y recuerda que a diario mueren miles de animales marinos por los plásticos, por comérselos o por ahogarse al quedarse atrapados, como le ocurrió al cormorán de 'Muerte en la laguna', que los fotógrafos alemanes han reconocido por ser excepcional.

Entregado sin descanso a su afición (raro es el día que no se sumerge), la última catástrofe que vivió el Mar Menor ha postergado la presentación de su último libro sobre el caballito de mar. Con cientos de fotos atractivas e inusuales, en las que cuenta «para todos los públicos» detalles y curiosidades de especies simbólicas y únicas de la flora y fauna regional, ya tiene a punto otros dos libros más. Además, estos días expone en el Museo de la Ciencia de Valladolid 'Fauna Transparente Mediterránea': una colección de fotos que también se podrá ver en las ciudades más importantes del país, cuenta. Y, de este grupo, destaca las medusas, «fósiles vivientes, pues la ciencia ha demostrado que son uno de los organismos más primitivos del planeta, con registros de hace más de 600 millones de años».

Va siempre pertrechado del permiso para capturar ejemplares vivos, por si desde el Acuario de la Universidad de Murcia, con el que colabora -censa y muestrea caballitos y nacras, entre otras labores-, requieren su ayuda. Hoy, celebra que las bajas temperaturas han devuelto su transparencia a las aguas y que, «con visibilidad a entre 10 y 15 metros, he visto que las medusas 'Rhizostoma pulmo' siguen en la laguna».

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