Ana Santos de Aramburo, directora de la Biblioteca Nacional de España. BNE

Ana Santos: «Son necesarios los autores que se fijan en los valores del humanismo»

La Directora de la BNE asegura que «es un honor» recibir el Premio Fomento a la Lectura

Domingo, 27 de septiembre 2020, 08:26

Ana Santos de Aramburo (Zaragoza, 1957) dirige una institución con más de trescientos años de vida en cuyos fondos reside un valioso legado cultural. La ... impronta y el quehacer literario de quienes conforman la historia de la literatura española aguarda en sus millones de ejemplares, documentos, revistas y periódicos, entre otros escritos testimonio de nuestra huella literaria. Llegó a la institución en 2013 procedente de la Universidad Complutense de Madrid, donde trabajó durante más de dos décadas. El viernes recogió, telemáticamente y en nombre de la Biblioteca Nacional de España (BNE), el Premio Fomento a la Lectura de la III Semana Internacional de las Letras de Murcia Ex Libris. Hoy, dice, es necesario leer a aquellos «autores que son capaces de mostrarnos que en los malos momentos la sociedad puede salir a adelante».

Publicidad

–¿Qué implica para una institución como la que dirige recibir este premio?

–Es un honor enorme hacia nuestra institución y un reconocimiento a la labor que hacen cada día todas las personas que trabajan en la Biblioteca Nacional (BNE) con toda la ilusión del mundo; también es un reconocimiento al significado del valor de esta institución para la cultura española, que desde hace más de trescientos años preserva toda la producción cultural que se genera en este país: la preserva, la difunde y la transmite de generación en generación con todo lo que esto significa.

«Es un honor enorme hacia nuestra institución y un reconocimiento»

–El galardón otorgado por ExLibris es al Fomento de la Lectura. ¿La española es una sociedad lectora?

–En cuanto a los índices de lectura somos menos lectores que nuestro entorno, pero en esto soy optimista, por una razón fundamental: hoy en día, nuestros niños y nuestros jóvenes tienen muchas más posibilidades de acceder a los textos escritos, al conocimiento y a la literatura, y por lo tanto, a lo que es la lectura, con respecto a épocas anteriores, desde cualquier sitio, además. Leen o se informan mucho más, y tienen un capacidad de conocer mucho mayor, aunque es cierto que se pierden otras habilidades como la capacidad de concentración y asimilación de textos largos. Esto último lo saben perfectamente los educadores y por ello quizá haya que plantearse un cambio en los sistemas de enseñanza para leer de otra manera. No obstante, también es verdad que cuando un libro atrapa, atrapa.

–¿Qué autores son hoy más necesarios que nunca?

–Es muy difícil decir autores concretos; cada lector tiene que encontrar su autor, o mejor dicho, tiene que encontrar su libro en el momento determinado que necesite. Lo bueno de la BNE es que los editores depositan aquí toda la producción editada en el país cada año y se puede encontrar de todo. ¿Qué autores recomendaría yo ahora? Bueno, pues aquellos autores que son capaces de mostrarnos o contar que en los malos momentos la sociedad puede salir adelante. En circunstancias difíciles los países se han levantado y han vuelto a tomar las riendas de la historia; la historia tiene estos vaivenes, y podemos recuperarnos, necesitamos esperanza. También son necesarios los autores que fijan o vuelven su mirada a aquellos valores de la civilización clásica, fundamentalmente de Grecia, de los que todavía bebemos; valores del humanismo en los que nuestra civilización se inspira y que son capaces de convertir a las personas en mejores.

Publicidad

«Cada lector tiene que encontrar su autor, o mejor dicho, su libro»

–Acaban de inaugurar una gran exposición sobre Miguel Delibes, a quien en Murcia también se homenajea estos días con dos muestras. ¿Qué legado dejó?

–Delibes es un perfecto ejemplo de todo lo que estamos hablando; es un autor que se puede seguir leyendo con total actualidad. Fue un escritor que miró a su alrededor y convirtió la realidad que estaba viviendo en literatura, en palabra escrita, y además con una prosa bellísima. Encontró valores en todo aquello que vio, fue un gran defensor de la protección del medio ambiente, del valor del entorno en que vivimos, y fue también capaz de mostrar el valor de lo que era vivir en un entorno rural, encontrando esas pequeñas cosas que están en el alma humana y que nos hacen mejores. También Delibes se enfrentó a las grandes incógnitas de la vida, como por ejemplo la lucha entre la vida y la muerte. Es un escritor de plena actualidad.

Publicidad

–¿Esta doble faceta de la Biblioteca como lugar de consulta y de exposición qué aporta al mundo de las letras?

–Es fundamental y llevamos muchos años impulsando esa línea de difusión de lo que es la palabra escrita. Aporta conocimiento hacia el gran público, y la posibilidad de que personas que nunca habían pensado en entrar a la biblioteca porque quizá no tuviesen los estudios suficientes, lo hagan. Y, además, queremos que, por favor, vengan; queremos que se encuentren con el valor de las colecciones que se conservan, que aprendan y que sepan que esto es de todos y también suyo. En las exposiciones vemos a muchos grupos de mujeres y esto nos gusta mucho.

«Convirtió la realidad que vivía en literatura, y además con una prosa bellísima. Es un autor muy actual»

Cultura «segura»

–¿Qué cambios ha traído para la institución la Covid-19?

–Pues, como en todas las instituciones y espacios públicos y en todas las vidas de todas las personas de este país, ha traído cambios importantes. Abrimos el pasado 8 de junio; desde entonces no hemos cerrado y confiamos en no volver a tener que hacerlo. Hemos adoptado las medidas de protección sanitarias y para consultar en sala hay que pedir cita previa, para que cuando el investigador o estudiante vaya ya tenga su pupitre asignado y el fondo preparado. Y luego, la sala de exposiciones como las actividades culturales tienen el aforo limitado. Ha supuesto un esfuerzo de adaptación por parte de todos; los trabajadores están siendo, además, muy generosos con el compromiso que tienen con la biblioteca y todos están respondiendo muy bien.

Publicidad

–Las artes han adoptado el lema 'La cultura es segura' para defender su actividad. ¿Se suma a este eslogan?

–Evidentemente, la cultura es segura y la BNE se suma y lo practica. Si todos respetásemos las normas sanitarias y todas las medidas de prevención seguramente el nivel de contagios sería distinto, desgraciadamente es el que es y tenemos que concienciarnos mucho. La cultura, siempre y cuando se respeten los aforos y las medidas de prevención, que se respetan habitualmente, es segura.

«Esta pandemia nos ha demostrado el valor inmenso de la estrategia digital, que debemos seguir impulsando»

–¿Qué retos tiene por delante su institución?

–Esta pandemia y el confinamiento nos ha demostrado el valor inmenso que tiene toda la estrategia digital, que llevamos años impulsando y que, por tanto, debemos seguir impulsando como reto prioritario. Tenemos que seguir digitalizando las colecciones e ir poniendo cada vez más recursos a disposición de todos a través de nuestras herramientas y plataformas; tenemos que favorecer la reutilización de estos contenidos digitales para otros usos, e impulsar y apoyar la creación de cualquier herramienta derivada de nuestros contenidos digitales como apoyo a la educación, a la investigación o a la generación de nuevo conocimiento, pero también como apoyo al disfrute, al ocio y al descubrimiento de lo que significa encontrarte en tu casa, de repente, con la posibilidad de consultar los beatos, incunables, manuscritos literarios... Esto, desde luego, es un descubrimiento que tenemos que seguir proporcionando.

Publicidad

–¿Está cerca ese objetivo de digitalización total?

–No, estamos lejísimos. Nos quedan cientos de miles de ejemplares que digitalizar que están en dominio público, y bueno, los recursos son escasos, pero uno de nuestros objetivos fundamentales es apoyar la digitalización, porque el gran repositorio de la cultura en español está en la BNE, y no solo para los españoles, sino para todos los países que comparten nuestra lengua y para cualquier lugar del mundo que quiera acercarse a la cultura española.

–¿Cree que el futuro de todas las bibliotecas pasa por la digitalización?

–No, son cosas diferentes, aunque de alguna forma se complementan. Si queremos permitir un acceso universal, la digitalización tiene que basarse en ejemplares que estén libres de dominio público, es decir, libres de derechos, porque es fundamental cumplir con la legislación sobre derechos de autor para que estos puedan seguir viviendo y creando, con lo cual, las bibliotecas públicas y municipales, que cuentan fundamentalmente con fondos modernos, tienen, por supuesto, que ofrecer el acceso al préstamo digital de libros electrónicos, que ya lo hacen, y además con mucho éxito, pero el concepto de digitalización afecta sobre todo a lo que son colecciones patrimoniales.

Noticia Patrocinada

«Vamos a tener que esforzarnos para responder a lo que el entorno demanda»

Pérez-Reverte y María Dueñas

–¿En esas colecciones las letras murcianas ocupan un hueco importante?

–Evidentemente las letras murcianas ocupan un lugar importante, teniendo en cuenta que hay autores murcianos de primera línea y que son 'best-seller' en muchos de sus títulos y ventas. Arturo Pérez-Reverte, María Dueñas..., hay también autores que son muy destacados por la repercusión y los premios que ha tenido su obra y todos ellos están representados en la BNE porque todo lo que se publica en España se deposita aquí. También libros electrónicos y revistas literarias, por no hablar de aquellos fondos patrimoniales que tienen que ver con Murcia.

–Personalmente, ¿cómo mira hacia el futuro?

–Hace muchos años que soy bibliotecaria y he visto muchos cambios en la profesión a lo largo de estos casi 40 años. Es un futuro que nos va a demandar una adaptación a un cambio permanente, como siempre ha sido en el mundo de la información, de la documentación de la palabra escrita o de la transmisión en algún tipo de soporte. Miro hacia el futuro de manera esperanzada y convencida de que vamos a tener que esforzarnos y adaptarnos por responder a lo que ese entorno está demandando. Hay que saber responder a lo que demanda la sociedad en un entorno tecnológico y esto es lo que las bibliotecas hacen desde hace mucho tiempo, y lo que van a seguir haciendo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Prueba LA VERDAD+: Un mes gratis

Publicidad