Borrar
Jim Reid, cantante del grupo escocés The Jesus and Mary Chain, durante su actuación de anoche en el Warm Up.

Ver fotos

Jim Reid, cantante del grupo escocés The Jesus and Mary Chain, durante su actuación de anoche en el Warm Up. javier carrión / agm

La mejor sorpresa: sin sorpresas

The Jesus and Mary Chain y Two Door Cinema Club elevan el listón del Warm Up

JAM ALBARRACÍN

Sábado, 4 de mayo 2019, 09:31

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La mejor sorpresa de la primera jornada del festival murciano Warm Up es que no hubo sorpresas, o si las hubo, estas fueron en positivo. Así tanto los norirlandeses Two Door Cinema Club como los escoceses The Jesus and Mary Chain ofrecieron sendos directos de alto nivel que justificaron sobradamente su condición de cabezas de cartel. Los segundos lo hicieron con un show inmaculado, de excelente sonido, interpretación sobresaliente -las voces estaban tan logradas que no las hubiera mejorado el playback- y un precioso diseño escénico, de geometrías pop y recuerdos al op-art.

Entre un par de novedades de su cuarto álbum, de inminente publicación -apertura con 'Talk' y 'Satellites' casi al final, fueron desgranando sus tres discos. Ni que decir tiene que los hits del primero fueron los más jaleados ('Undercover Martyn', 'What you know', 'Do you want it all?') aunque el momentazo disco de 'Bad decissions', con todo el mundo buscando a Barry Gibb, resultó espectacular. Nadie lo vio porque estaba en la garganta de Alex Trimble.

No menos imponente, en realidad un poco más, resultó el concierto de The Jesus and Mary Chain. La madre que parió a los hermanos Reid no debía estar en paz con el mundo. Jim arrastrando las palabras con ese desprecio propio del punk, William destrozando almas con una guitarra en lucha continua entre distorsión y feedback. Y un repertorio que, con los años, han sabido asimilar y mostrar en todo su esplendor más allá de la actitud propia de los inicios. Luces de contra para remarcar las siluetas y muro de sonido de cara para escupir la misma penumbra en piezas imperecederas como 'April skies', 'Head on' o el final con 'Reverence', con un texto que si lo cantara un grupo español se armaba el escándalo. 'Quiero morir como Jesucristo'. Catarsis total.

Carolina Durante -sorpresa muy agradable, mejoran en directo-, Second -demostrando su calidad de grupazo de masas- y el alemán Roosevelt -electropop con encanto- brillaron también pese a tener que lidiar con el insuficiente sonido del Escenario Warm, así como los adorablemente irreverentes Space Surimi, en la tercera tarima en discordia. Entre los conciertos prescindibles -floja Zahara, irrelevantes Los Invaders, ni me acuerdo Javiera Mena- destacó el de Amaia, tan fuera de lugar como un trapero en el Cante de las Minas. Este sábado más y mejor, porque siempre es posible.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios