Elías León Siminiani: «Me interesan las zonas de Murcia donde jugaba»

–Este corto surge de una inquietud personal por la arquitectura. ¿Desde cuándo tiene este interés?

–Desde hace unos cuantos años. Empecé a interesarme mucho por la arquitectura y el urbanismo y, como el cine es mi lenguaje para relacionarme con el mundo, empecé a buscar e imaginar maneras de acercarme a la arquitectura desde el cine. Después de bastantes años de obras previas en las que en algunos aspectos ya había hecho del espacio, los edificios y del urbanismo una parte importante de la obra, me he centrado en eso.

–¿Por qué elige la obra de Secundino Zuazo como eje conductor?

–Zuazo es de los pocos arquitectos que tenemos en España en el siglo XX que trabajó tanto en arquitectura como en urbanismo. Es decir, trabajó tanto en hacer casas y edificios como en el tejido urbano que nos une. Como cuenta el corto, es una persona muy importante en la configuración de Madrid, tal y como lo conocemos hoy. Además es una persona cuya biografía está cruzada por la Guerra Civil y por los regímenes, lo que hizo que su consideración social y su estatus profesional cambiase radicalmente. Esto me daba también la oportunidad de aterrizar en ese amor interclase que yo estaba buscando. Es un arquitecto muy relevante en la historia del siglo XX en España.

–Imagino que el proceso de documentación habrá sido largo.

–Sí, largo y apasionante. Estudié biografías distintas de arquitectos hasta que encontré esta, la que tenía más elementos que me servían para lo que estaba buscando.

–La historia se cuenta a través de su propia voz en 'off'. ¿Qué le atrae de la figura del narrador, que ya ha utilizado en otros proyectos?

–Llevo años haciendo de maneras distintas estas ficciones narradas. En este caso me convenía mucho porque el corto, de alguna manera, es una película de época sin época. Hay dos o tres herramientas de las que me sirvo para proponer esta especie de salto en la imaginación al espectador, con el cual hay un pacto pues estamos en 1959 pero el corto se ha rodado hoy. Está también el vestuario de los personajes, de época, o la utilización de material de archivo, del NODO. La voz en off me posibilita hablar directamente de este pacto y explicarle al espectador que este es un ejercicio compartido en el cual yo les doy una serie de pistas y ellos tienen que imaginar que están en ese año. También es una herramienta de producción. Se necesita mucho dinero para hacer un corto y, como no lo tengo, empiezo a pensar por ahí.

–¿Siempre tuvo claro que esta historia culminaría en un corto y no en un largometraje?

–En este caso tenía claro que iba a ser un cortometraje, porque lo produzco yo [con la productora recientemente creada El Gesto Cinematográfico] pero sí es cierto que quiero probar una serie de cosas en el lenguaje, como la conformación de este imaginario del que hablamos, con la idea de tratar de hacer una obra más larga más adelante, siguiendo un poco la misma pauta creativa. Estoy contento sobre todo porque es un contenido muy personal pero estoy sintiendo que le interesa a la gente y eso me da alas para seguir el camino.

–¿Qué edificios de Murcia podrían ser conductores de una historia similar?

–En Murcia siempre me ha llamado mucho la atención la configuración de la Gran Vía, estos edificios que hay entre el Banco de España y la plaza Circular, la zona de El Corte Inglés... Todas esas zonas de edificios muy altos que responden a un patrón parecido. Me interesa saber cómo se decidió levantar eso. Luego, particularmente, me gustan esas zonas en las que yo jugaba de pequeño, como la plaza de Captesa y cómo eso entra en contacto con el 'Tontódromo' y las zonas que tuvieron sus usos en su momento y ahora son lugares de tránsito por los que no pasa nada. Me interesa mucho y espero poder hacer algo algún día.

–¿Los edificios actuales qué le inspiran?

–Ahora la construcción contemporánea no es algo que me llame tanto la atención pero con el paso de los años sí me puede llegar a interesar. Siempre siento que tengo que tomar un poco de distancia para poder conceptualizar algo.

–De nuevo nominado al Goya. ¿Cree que se lo llevará?

–Es muy complicado. Esta es la cuarta vez que me nominan y nunca lo he ganado. Estamos muy contentos de haber llegado hasta aquí y de conseguir la nominación. A ver qué pasa. Vemos que el corto tiene potencial.