Álex de la Iglesia: «Es lamentable que solo se valore a los artistas muertos o extranjeros»

La Comicteca de la Biblioteca Regional celebró ayer el Día del Cómic y el Tebeo con la presencia del director de cine Álex de la Iglesia y el público correspondió llenando el espacio. El cineasta participó en el encuentro 'Cine y cómic: avenidas convergentes', conducido por el director de cine, historietista y colaborador de Vocento Borja Crespo. «No veo mucha diferencia entre cómic, cine o literatura. Cuando cuentas algo, te interesa que te entiendan. Otra cosa es que no confíes demasiado en tu idea y por ello quieras dejarlo todo difuso», explicó el cineasta bilbaíno, que considera que «los tebeos, por su diseño gráfico, hacen más comprensible la historia al espectador y tienen mayor nivel de expresividad que otros medios. Por ejemplo, están escritos en mayúsculas», dijo el realizador.

«El tebeo ha permanecido en mi cabeza porque me ayuda a comunicarme mejor», añadió Álex de la Iglesia, que puso como ejemplo a 'Tintín' y «algunos dibujantes de Marvel» en referencia a sus líneas claras. «Si los personajes están expresados con fuerza respecto al fondo, la secuencia se entiende mejor. Los tebeos te ayudan a componer el plano y distinguir personaje y fondo. Cuando pensamos dónde poner la cámara, la respuesta es donde se entienda mejor. Esa es la base y ahí empieza el lenguaje cinematográfico. conseguir que los personajes tengan personalidad depende de los planos», subrayó el director de 'El día de la bestia' (1995) y 'La comunidad' (2000).

Durante la conversación, Álex de la Iglesia contó anécdotas sobre cómo llevar sus imágenes proyectadas a la gran pantalla, inicialmente a ese «cine guerrillero»: «Siempre he hecho cosas que no podía pagar, lo que significaba un nivel de trabajo del equipo fuera de lo normal», confesó sobre esos rodajes donde no se dormía demasiado. Y recordó también una de sus últimas películas, 'Veneciafrenia' (2021). «Me preocupa que está desapareciendo el respeto a la belleza. De pronto ya nadie nos sentimos responsables de ello. Como turista, yo también he colaborado en esa pequeña muerte de Venecia. De alguna forma destruimos lo que amamos», reflexionó.

Recordando a autores de otros tiempos, habló de la nostalgia como «una enfermedad en el sentido de estar pensando que lo anterior siempre fue mejor. Si no sabes vivir tu tiempo, no sabes vivir ninguno». Por otra parte, «es lamentable que solo se valore a los artistas muertos o extranjeros», consideró. Al finalizar la charla, el director firmó ejemplares de su libro de ilustraciones 'Arte y ensayo' a los asistentes.

Tras su paso por la BRMU, Álex de la Iglesia inauguró la duodécima edición del Festival Sombra de Cine Fantástico Europeo de Murcia en la Filmoteca Regional, y recibió el Premio de Honor por su aportación al cine fantástico.

El director participará este sábado, a las 11.30 horas en la sala B de la Filmoteca Regional, en un encuentro abierto al público.