Una carrera y cuatro veleros centenarios

Hace décadas que ya no batallan contra el viento sobre la bahía cántabra, pero siguen siendo símbolo de una época de esplendor para el primer real club de regatas de España, fundado en Santander en 1870. De aquel estreno se cumplen ahora 150 años, efeméride que Correos ha conmemorado con la edición de un sello que no solo festeja la fundación del veterano club de regatas, sino que también encierra una gran historia.

A la venta desde el pasado día 30 con una tirada especial de 140.000 unidades, el sello –3,80 euros– reproduce una imagen captada por el fotógrafo murciano, ya fallecido, Tito Bernal. En ella, el 'Hispania', construido en 1909 y declarado Bien de Interés Cultural (BIC), navega frente a la península santanderina de la Magdalena. No es una estampa real, sino un montaje realizado por Correos con el que la empresa postal emula una de las muchas competiciones náuticas que, organizadas por el Real Club de Regatas de Santander, se sucedieron en la costa cántabra a principios del pasado siglo.

Sobre el papel estucado, empleado para la ocasión, el velero adopta, además, distintos colores y posiciones dependiendo del movimiento: «Es un sello verdaderamente bonito», resume Fernando Mirapeix, presidente de la Federación Cántabra de Vela. Fue él quien se puso en contacto con la actual presidenta de Puerto Sherry, en El Puerto de Santa María, en Cádiz, María del Valle de la Riva, para localizar al autor de la fotografía que hoy ilustra el sello.

Desde la federación, habían solicitado a distintos clubes de España que les enviaran sus mejores imágenes con el fin de seleccionar una que pudiera servir para conmemorar el 150 aniversario del Real Club de Regatas, pero finalmente no hizo falta hacer criba: «Fue buscando por internet como encontramos la foto de Tito. Nos pareció fabulosa y decidimos contactar con Valle», afirma Mirapeix. La imagen se había tomado en Cádiz, en el Puerto Sherry, hacía varios años.

«En todo el mundo, antes de la restauración del 'Hispania' –cuenta de la Riva– solo quedaban en activo tres barcos de este tipo: el 'Tuiga', el 'Mariska' y el 'Lady Anne'. Para volver a crear una competición internacional de la Clase 15 metros de vela clásica eran necesarias, como mínimo, cuatro embarcaciones, por lo que no fue hasta que se restauró el 'Hispania', a finales de 2010, cuando esto volvió a ser posible».

«En 2011 –sigue narrando De la Riva– mi marido viaja a Mónaco y cierra un acuerdo con el Yacht Club, propietario del 'Tuiga', para celebrar la primera competición en Cádiz. Pero una semana después fallece en un accidente de caza. Aquella carrera había sido la ilusión de mi marido y pensé que su celebración también era buena para Puerto Sherry, y me dije: '¡Adelante!'. Como era la primera semana clásica que organizábamos, quería que viniera un buen fotógrafo para cubrir las regatas y me recomendaron a Tito». Bernal, quien trabajó como colaborador de LA VERDAD durante 15 años, estuvo en Cádiz en 2012, dos años antes de su muerte a causa de un cáncer fulminante. Cuando De la Riva intentó contactar con él con motivo del sello fue cuando supo de su suerte. Ha sido la familia del fotógrafo quien ha cedido la fotografía a Correos. En ella se observan las velas del 'Hispania' y sus 'hermanos gemelos' surcando aguas del Atlántico.