Borrar
El público que se congregó en la plaza Juan XXIII aplaude a uno de los gladiadores que participó en la exhibición. José María Rodríguez / AGM
De la arena de Juan XXIII a las terrazas de los bares

De la arena de Juan XXIII a las terrazas de los bares

Los festeros dan el relevo a turistas y visitantes a la hora del aperitivo en el casco antiguo, tras la resaca del viernes noche

Antonio López

Cartagena

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Domingo, 24 de septiembre 2017, 09:51

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Vita», gritó el público para salvar a Labros, el valeroso gladiador que minutos antes perdió el combate con Atos, quien con los brazos en alto y con el beneplácito del respetable libró de la muerte a su contrincante. La recompensa para el glorioso ganador fue el aplauso de los numerosísimos turistas y visitantes, también oriundos de las tierras cartageneras y de unos pocos festeros, que acudieron a ver la exhibición Munera Gladiatora. El foso de la Plaza Juan XXIII se convirtió ayer en lo que un día fue la Arena de Verona, al acoger los juegos de gladiadores con hombres libres, quizá similares a los que Escipión organizó en la ciudad en honor a su padre y a su tío, fallecidos en combate en Hispania.

Fue el epicentro de la fiesta a la hora del aperitivo. Allí se congregaron decenas de personas para disfrutar de esa exhibición, entre ellas las almerienses Carmen Fernández e Isa López. «Hemos venido en un autobús junto a otras cincuenta personas. Nos llama mucho la atención estas representaciones tan originales. Vinimos el pasado fin de semana y este hemos repetido», dijo la primera, mientras tomaba una cerveza en uno de los bares de la zona.

Paella gigante

Muy cerca de ellas estaba el grupo de amigos compuesto por Alejandro Martínez, José Miguel Cotes, Juan Martínez y Francisco Victoria, que aprovecharon la fiesta para celebrar que el tercero ha aprobado la oposición para la Guardia Civil.

Los que se quedaron hasta el final pudieron degustar de un plato de arroz, cocinado por la empresa El Tirol, aunque no dejaron de visitar otros bares en los que cogieron fuerza para ver, ya por la tarde noche, el Gran Desfile General.

Los festeros dieron ayer a la hora del aperitivo el relevo a turistas y visitantes, tras la resaca del viernes noche. De Madrid y Valencia llegaron Rosalía Ruiz, Sonia Pérez, Luis Abad, Nino García, Mario Barrero y Carmen Ruiz. Sus raíces cartageneras les hacen volver cada año para los festejos históricos. En la Plaza del Rey sí que se dejaron ver algunos miembros de las Tropas y Legiones a la hora de la comida. Las Fuerzas de Choque Extraordinari repitieron, como días anteriores.

Junto a la Plaza Juan XXIII, otra zona muy concurrida fue la Puerta de Murcia, por donde cerca de las dos de la tarde paseaba un grupo de estudiantes Erasmus procedentes de Alemania, Francia, Italia e Inglaterra. «Estamos en Murcia. Nos hablaron de esta ciudad y sus fiestas y no hemos querido dejar de conocerla. Vamos a ver el Teatro Romano y a disfrutar de estos festejos», atinó a explicar uno de ellos en un castellano un tanto trabado.

Los cerca de mil cruceristas llegados en el 'Sirena' y 'Wind Surf' se dejaron notar, tanto en el exhibición de gladiadores, como en las terrazas de los bares, donde degustaron las tapas típicas de la tierra. Yonathan y Joana, dos ingleses, fueron un ejemplo de ello.

Tras el aperitivo muchos fueron los que eligieron los conciertos que se celebraron en la Plaza San Francisco de Mr. Robinzón; en la Plaza de España, del tributo a Hombres G; y en la plaza de El Corte Inglés, del pincha discos DJ Ballester.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios